Detenido un "l¨ªder" de mendigos por abusar y agredir a una mujer en Sevilla

"Eleg¨ªa a sus v¨ªctimas en un espacio f¨ªsico concreto, de una condici¨®n social determinada y asegur¨¢ndose de que no iban a acudir a las instituciones sociales amparado en la escasa credibilidad que podr¨ªan tener y en la ley de silencio que impera entre los sin techo, ambiente en el que el autor era un l¨ªder y al que nadie se atrev¨ªa a denunciar". La polic¨ªa describe as¨ª a un l¨ªder de mendigos detenido el mi¨¦rcoles en Sevilla junto a un amigo que le ayud¨® a violar y agredir durante seis horas a una mujer sin recursos econ¨®micos.

La v¨ªctima desobedeci¨® esa supuesta ley del silencio y acudi¨® de inmediato a la polic¨ªa tras conseguir huir de sus captores. Identific¨® a Dumitru Catalin C., de 30 a?os, como el hombre que ayud¨® a Juan F.C., de 47 a?os, el autor material de la detenci¨®n ilegal, abuso y agresi¨®n a la mujer. Juan C. F. hab¨ªa sido detenido en 56 ocasiones por otras agresiones sexuales, malos tratos en el ¨¢mbito familiar, lesiones, amenazas y detenci¨®n ilegal. Ten¨ªa orden de alejamento de sus cuatro hijos, tambi¨¦n por abusos. Ambos pasaron ayer a disposici¨®n judicial y han sido encarcelados.

Los hechos ocurrieron el pasado 15 de noviembre, cuando la v¨ªctima se encontr¨® con el autor en un comedor de la beneficencia y fueron a pasar la noche en la muralla de la Macarena (Sevilla). "Una vez all¨ª, en un lugar totalmente apartado de la vista y de dif¨ªcil escapatoria, la viol¨® repetidas veces durante horas, amenazando con matarla si no colaboraba, al mismo tiempo que le propinaba fuertes golpes en el pecho", a?ade la polic¨ªa en un comunicado.

Tras cuatro horas de agresi¨®n, supuestamente le oblig¨®, intimid¨¢ndola con cortarle el cuello con una navaja, a que se vistiera y le acompa?ara a comprar unas cervezas, para, posteriormente regresar al mismo lugar, esta vez acompa?ado de un amigo suyo. Otra vez, la oblig¨® a que se desnudara y la viol¨® mientras su amigo le dec¨ªa a la v¨ªctima que "aguantara". Al cabo de dos horas, en un momento de descuido, la v¨ªctima consigui¨® huir y ponerse en contacto con la polic¨ªa.