Uno de los planificadores del 11-M vigil¨® la Embajada de EE UU
Said Berraj, que sigue huido, fue grabado por las c¨¢maras de seguridad del edificio en 2003 y no fue reconocido hasta despu¨¦s del atentado
Las c¨¢maras de seguridad de la Embajada de EE UU en Madrid, en el n¨²mero 75 de la calle Serrano, captaron en 2003 a un tipo peque?o y enjuto en actitud sospechosa y vigilante. Cabello negro, cejas pobladas, nariz aguile?a y barba de varios d¨ªas. No caminaba de forma espont¨¢nea sino que observaba con detalle los accesos a la legaci¨®n diplom¨¢tica, una de las m¨¢s blindadas. Los oficiales de seguridad del edificio chequearon aquella imagen con la de centenares de sospechosos de todo el mundo, enviaron su rostro a las agencias de seguridad en Washington, pero no lograron identificarlo. Era Said Berraj, uno de los presuntos cerebros del 11-M que sigue huido y en busca y captura internacional.
Espa?a es un "significativo objetivo del terrorismo islamista" y la Embajada de EE UU "objetivo prioritario para las c¨¦lulas yihadistas en este pa¨ªs", seg¨²n un cable secreto de la legaci¨®n diplom¨¢tica, fechado el 15 de septiembre de 2005, en el que se desvela que Said Berraj, uno de los eslabones perdidos del 11-M, vigilaba la embajada un a?o antes de los ataques contra los trenes de Madrid en los que murieron 191 personas.
El documento titulado Espa?a, un frente activo en la guerra contra el terror, lo explica as¨ª: "Aproximadamente un a?o antes de los ataques contra los trenes en Madrid en 2004, el equipo de vigilancia de la embajada fotografi¨® a una persona sin identificar vigilando la legaci¨®n. En el curso de la investigaci¨®n de los ataques del 11-M, el servicio de seguridad (RSO) descubri¨® que la persona fotografiada era Said Berraj, uno de los planificadores del atentado contra los trenes que escap¨® y todav¨ªa sigue libre". Tras el atentado, la polic¨ªa distribuy¨® fotograf¨ªas de los sospechosos, entre las que estaba la de Said Berraj.
Berraj, al que la polic¨ªa apod¨® con el nombre de El Mensajero, trabajaba como repartidor de Seur en Madrid y rezaba en la mezquita de Abu Baker. Fue detenido el 10 de octubre de 2000 en un piso de Estambul (Turqu¨ªa), en compa?¨ªa de Amer el Azizi, Salahedin Benyach y Lahcen Ikassrien . Todos ellos pretend¨ªan viajar a Afganist¨¢n para visitar los campos de entrenamiento de Osama Bin Laden. Cuatro d¨ªas m¨¢s tarde, Berraj y Azizi fueron deportados a Teher¨¢n; Benyach a Londres, e Ikasrrien, entregado a la Embajada de Marruecos en Turqu¨ªa. Seg¨²n la polic¨ªa, Imad Eddin Barakat, Abu Dahdad, uno de los primeros impulsores de las actividades islamistas en Espa?a, viaj¨® a Estambul para encontrarse con Ikasrrien, algo que ambos niegan.
Tras su tropiezo en Turqu¨ªa, todos quedaron en libertad y regresaron a Madrid, salvo Ikasrrien, que lo intent¨® de nuevo y logr¨® entrar en Afganist¨¢n, donde fue detenido en 2001 por las tropas de la Alianza del Norte y entregado a los estadounidenses, que lo recluyeron en Guant¨¢namo. Posteriormente fue entregado a las autoridades espa?olas, juzgado y absuelto al anularse las pruebas obtenidas en el penal de EE UU. Azizi muri¨® a?os m¨¢s tarde en un ataque de los aviones Predator, no tripulados, en Wazirist¨¢n, zona tribal donde se refugian los dirigentes de Al Qaeda. En mayo de 2004, el juez Baltasar Garz¨®n proces¨® a Said Berraj .
El descubrimiento de Berraj en las inmediaciones de la Embajada de EE UU revela c¨®mo un a?o antes del 11 de marzo de 2004 los miembros de la c¨¦lula yihadista ya planificaban ataques en Espa?a. En el mismo cable secreto se asegura que la salida de las tropas espa?olas de Irak ordenada por el Gobierno del PSOE "no ha reducido la amenaza" hacia Espa?a de Al Qaeda.
Contacta con el autor de esta noticia | La mayor filtraci¨®n de la historia | Preguntas y respuestas | Ir al especial
"Nos piden que apoyemos, que es ETA"
La Embajada de EE UU sigui¨® con atenci¨®n los atentados del 11-M. El mismo d¨ªa del ataque emiti¨® a primera hora de la tarde un cable confidencial con el t¨ªtulo Masacre de ETA en Madrid tres d¨ªas antes de las elecciones. "Expertos en ETA de la polic¨ªa espa?ola, al igual que otros funcionarios espa?oles, nos hab¨ªan expresado que ETA intentar¨ªa atentar antes de las elecciones del 14 de marzo. Nuestros contactos dijeron que ETA atentar¨ªa durante la campa?a".
"Otegi atribuy¨® el ataque a los extremistas isl¨¢micos. Contactos en la oficina del presidente nos han llamado para que hagamos hincapi¨¦ en que el Gobierno espa?ol est¨¢ seguro de que el autor es ETA, como Acebes ha declarado enf¨¢ticamente. Nos piden que el Gobierno de EE UU apoye esta declaraci¨®n y no exprese ninguna duda en sus comentarios p¨²blicos acerca de la autor¨ªa", dice el cable.
El comentario final destaca la magnitud de la tragedia "sin precedentes en la historia de ETA". Asegura que el hecho de que no hubiera una llamada de aviso antes de que explotaran las bombas representa una huida hacia delante de los terroristas. Y concluye que "un ataque de ETA, aun tan terrible como este, no deber¨ªa da?ar al partido del Gobierno ya que durante la campa?a electoral el PP se hab¨ªa mostrado contrario a cualquier di¨¢logo con los terroristas". "De cualquier manera, si Batasuna es capaz de sembrar dudas acerca del autor, algunos podr¨ªan da?ar al Gobierno del PP por exponer a Espa?a al terrorismo islamista a causa de su pol¨ªtica en Irak. De ah¨ª la llamada de La Moncloa para que el Gobierno de EE UU sea claro en sus comentarios p¨²blicos de que el autor de esta tragedia es ETA".
El 15 de marzo, otro cable advert¨ªa de que la probabilidad de v¨ªnculos de Al Qaeda con el ataque se incrementaba. "Mientras las autoridades no descartan completamente la responsabilidad de ETA, o un papel de ETA en la coordinaci¨®n con un grupo terrorista isl¨¢mico, la principal l¨ªnea de investigaci¨®n es Al Qaeda".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.