Madrid multa a los 'botellones' ruidosos con entre 300 y 750 euros desde hoy
Los socialistas anuncian recurso ante los tribunales contra la nueva Ordenanza contra el Ruido porque la consideran "innecesaria, oportunista, arbitraria, fisgona, incoherente, recaudatoria, permisiva e ilegal"
El Ayuntamiento de Madrid ha aprobado esta ma?ana, con los votos a favor del PP y en contra del PSOE e IU, la pol¨¦mica Ordenanza contra el Ruido que, en palabras de la delegada de Medio Ambiente, Ana Botella, "apuesta por la convivencia" e introduce novedades como la regulaci¨®n de alarmas, el uso de megafon¨ªa en la calle, la carga y descarga, la recogida de contenedores y las fiestas particulares, sin olvidar el botell¨®n aunque no aparezca escrito como tal al no ser una expresi¨®n jur¨ªdica o acad¨¦mica. Las sanciones por hacer ruido en la calle mientras se bebe alcohol entre las 23.00 y las 7.00 son a partir de hoy de entre 300 y 750 euros. En el caso de que las multas se pongan a menores, los padres ser¨¢n responsables subsidiarios.
El hecho de que sean los padres los que paguen ha llevado al concejal socialista Pedro Sant¨ªn a anunciar que su grupo recurrir¨¢ la Ordenanza. Sant¨ªn ha dedicado todo tipo de elogios a esta ordenanza, que considera "t¨¦cnicamente muy mala", "innecesaria", "oportunista en t¨¦rminos pol¨ªticos", "arbitraria", porque permite imponer 750 euros de multa "a ojo", "fisgona", porque proh¨ªbe el baile en el interior de las viviendas cuando se supera el ruido permitido, "incoherente", "recaudatoria", "permisiva" porque eleva los niveles m¨¢ximos de ruido y "adem¨¢s ilegal". El edil critica que muchos art¨ªculos no estipulan los l¨ªmites m¨¢ximos que no se pueden superar, sino que utiliza t¨¦rminos como "gritar", "vociferar" o "niveles tolerables" sin definir dichos t¨¦rminos. "Las multas se pondr¨¢n a ojo... o a o¨ªdo del funcionario, pero el ruido es medible y, por tanto, objetivo", ha recordado.
Botella ha contestado a los socialistas que est¨¢n en su derecho de recurrir la ordenanza, pero que "tiene todos los informes necesarios" y "est¨¢ basada en dos leyes, la Ley del Ruido y la Ley de Bases de R¨¦gimen Local, que otorga al Ayuntamiento la potestad sancionadora hasta 3.000 euros". Adem¨¢s de PSOE e IU, las asociaciones de vecinos del centro tambi¨¦n rechazan esta regulaci¨®n.
Al margen del botell¨®n, la norma establece zonas de especial protecci¨®n, como el entorno de asilos o centros sanitarios, contempla ¨¢reas de protecci¨®n ac¨²stica e incluye un cat¨¢logo de locales de m¨²sica en vivo que tendr¨¢n un "tratamiento transitorio" hasta que haya una regulaci¨®n espec¨ªfica para este "patrimonio cultural". En cuanto a la m¨²sica callejera, el aspecto que m¨¢s cr¨ªticas ha suscitado junto con el botell¨®n, se proh¨ªben todas las actuaciones con amplificadores o percusi¨®n y se permiten todas las dem¨¢s sin licencia previa, en contra de lo que se hab¨ªa anunciado previamente -el texto se modific¨® tras aceptar el PP algunas de las enmiendas de IU-. Tampoco ser¨¢n confiscados los instrumentos musicales de los infractores, como se pretend¨ªa al principio.
Botella: "Es m¨¢s liberal"
El PSOE critica la discrecionalidad en su interpretaci¨®n ya que puede darse el caso de que un acorde¨®n o una trompeta s¨ª estar¨¢n permitidos en la calle pero una guitarra el¨¦ctrica no. Para Botella, esta ordenanza es "m¨¢s liberal" que la anterior, puesto que autoriza la m¨²sica en toda la ciudad excepto la que utilice instrumentos de percusi¨®n y elementos de amplificaci¨®n, "cosa que est¨¢ prohibida en la mayor¨ªa de las ciudades", y adem¨¢s no se incautar¨¢n los instrumentos a lo m¨²sicos callejeros. Por su parte, la concejal de IU Raquel L¨®pez ha agradecido el intento de di¨¢logo y consenso del equipo de Gobierno pero no cree que ataje "el problema de ra¨ªz, el verdadero problema: el coche", fuente del "90% del ruido". "Es extra?o que en 2004 las multas a los coches ruidosos llegaban a los 30.000 euros y ahora se rebaja a 600, mientras nos inventamos multas de convivencia de hasta 3.000", ha reprochado.
Otro factor que, a juicio de la edil, no se ha tenido en cuenta es la ley antitabaco, que echa a los ciudadanos de los bares a la calle para fumar, exponi¨¦ndoles a la posibilidad de ser multados por "hablar con el de al lado" -desde que entr¨® en vigor la ley, han aumentado un 16% las quejas por ruido en la capital-. Adem¨¢s ha criticado el r¨¦gimen sancionador "muy, muy conservador", que castiga por ejemplo con 750 euros cantar flamenco con micr¨®fono y con 90 tocar el claxon continuamente, y eso es "sancionar a los ciudadanos por vivir en la calle". Tambi¨¦n considera "muy grave" que a trav¨¦s de la ordenanza se "coarte" la libertad de reuni¨®n, ya que establece que partidos y asociaciones tambi¨¦n tienen que pedir autorizaci¨®n con un mes de antelaci¨®n para sus actos, cuando a la Delegaci¨®n de Gobierno s¨®lo hay que comunicarlo con 10 d¨ªas.
La ordenanza fue aprobada el 5 de enero por la Junta de Gobierno del Ayuntamiento y el pasado d¨ªa 15 por la comisi¨®n municipal de Medio Ambiente, con los votos del PP, el rechazo del PSOE y la abstenci¨®n de IU, tras ser rechazadas 54 de las 66 enmiendas. Esta normativa, que sustituye a la vigente desde 2004 y adapta la legislaci¨®n estatal en esta materia, proh¨ªbe expresamente tambi¨¦n el desarrollo de las actividades recreativas y espect¨¢culos p¨²blicos en los que exista m¨²sica en la v¨ªa p¨²blica a una distancia inferior a 150 metros de los centros socio-sanitarios -centros de mayores, residencias, centros sanitarios y en centros docentes si el acto se desarrolla en horario escolar-. Asimismo, regula cuestiones tan diversas como las alarmas, el uso de megafon¨ªa en las calles, obras, carga y descarga de mercanc¨ªas, recogidas de contenedores de residuos o fiestas particulares. Tambi¨¦n clarifica la definici¨®n de espacios privados y p¨²blicos y las normas que se aplican en cada uno. As¨ª, se aplica ordenanza a los espacios de propiedad privada que tienen un uso p¨²blico y que est¨¢n abiertos -como algunos callejones o jardines de algunas casas- , pero no a las viviendas particulares y otros locales cerrados, en los que rige una normativa general que obliga a aislar ac¨²sticamente dichos espacios.
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