La ordenanza contra el ruido apunta al 'botell¨®n' y a las molestias nocturnas

La nueva ordenanza contra el ruido aprobada ayer por el Ayuntamiento de Madrid apunta directamente hacia una actividad contra la que el Ayuntamiento intenta luchar desde hace a?os: el botell¨®n. El texto establece espec¨ªficamente sanciones de entre 300 y 600 euros para los que beban en la calle y generen molestias a los vecinos entre las once de la noche y las siete de la ma?ana.

De paso, y en plena pol¨¦mica por la nueva ley antitabaco, puede haber multas para las personas que se re¨²nan en horario nocturno en zonas p¨²blicas y generen molestias a los que viven en la zona. O sea, que los fumadores que salgan de un bar o una discoteca de noche a echar un pitillito deber¨¢n cuidarse de hacer excesivo ruido. "La ordenanza afecta a cualquier tipo de ruido generado en la calle. Puede estar acompa?ado, o no, del consumo de bebidas alcoh¨®licas o de tabaco", dijo ayer el alcalde, Alberto Ruiz-Gallard¨®n.

Pol¨¦micas sobre el tabaco aparte, la nueva ordenanza, que sustituye a la que estaba vigente desde 2004 (y que se aprobar¨¢ definitivamente en el pr¨®ximo pleno del Ayuntamiento) hace un repaso de las diversas fuentes de ruido que se producen en la ciudad y establece sanciones para los que incumplan la normativa. Por ejemplo, en los veh¨ªculos de motor, donde proh¨ªbe expresamente el uso de motos sin silenciadores y establece sanciones de hasta 600 euros para quien sobrepase los l¨ªmites permitidos.

El texto presta tambi¨¦n atenci¨®n a los ruidos de car¨¢cter dom¨¦stico y vecinal, que pueden desquiciar a cualquiera y hacerle la vida en su casa insoportable. Por ejemplo, establece limitaciones al uso por la noche de televisiones, radios o equipos de m¨²sica a todo volumen. Tambi¨¦n proh¨ªbe en horario nocturno las reparaciones que generen molestias por impacto (como martillazos a las dos de la ma?ana), las mudanzas, las fiestas privadas que por el n¨²mero de personas o el volumen de la m¨²sica generen ruidos e incluso los gritos dentro de las casas. Adem¨¢s, dedica un art¨ªculo a los propietarios de animales dom¨¦sticos, que "deber¨¢n adoptar las medidas necesarias para evitar que estos produzcan ruidos que ocasionen molestias al vecindario".

La nueva ordenanza tambi¨¦n regula el uso de las alarmas en comercios o veh¨ªculos y la megafon¨ªa en las calles (que estar¨¢ prohibida con fines de propaganda a no ser que haya sido autorizada previamente). Presta atenci¨®n adem¨¢s a los m¨²sicos que tienen la calle como sala de conciertos. El art¨ªculo 41 establece que "no se permitir¨¢n en la v¨ªa p¨²blica actuaciones en las que se empleen instrumentos musicales, elementos de percusi¨®n, amplificaci¨®n o de reproducci¨®n sonora", y se?ala que la Polic¨ªa Municipal podr¨¢ requisar los instrumentos a los m¨²sicos. Obviamente, el Ayuntamiento de Madrid puede autorizar conciertos o actuaciones musicales durante fiestas o celebraciones.

La vigilancia para que se cumpla la nueva ordenanza se ejercer¨¢ de oficio por parte del Consistorio o a instancia de parte, es decir, que los ciudadanos que sufran ruidos podr¨¢n denunciar. Las multas a los comercios o las industrias que incumplan la normativa pueden llegar a los 300.000 euros, y las sanciones muy graves para los particulares podr¨¢n alcanzar los 3.000.

El Ayuntamiento contempla, adem¨¢s, la declaraci¨®n de zonas de protecci¨®n ac¨²stica especial y zonas de especial protecci¨®n, como hospitales, centros de mayores o colegios.

El portavoz de Medio Ambiente del PSOE en el Ayuntamiento, Pedro Sant¨ªn, critic¨® la nueva ordenanza y se?al¨® que criminaliza el botell¨®n sin ofrecer alternativas y es simplemente recaudatoria. Tambi¨¦n dud¨® de que se vaya a aplicar m¨¢s all¨¢ de las grandes declaraciones del alcalde.