El texto ¨ªntegro de la intervenci¨®n de Zapatero ante el Comit¨¦ Federal del PSOE
"Compa?eras y compa?eros, celebramos este Comit¨¦ Federal transcurrido un mes despu¨¦s desde nuestro ¨²ltimo encuentro, una vez que se han convocado oficialmente las elecciones auton¨®micas y municipales y tras una semana nuevamente intensa en la consolidaci¨®n de nuestra presencia internacional y en la lucha por el fortalecimiento de nuestra econom¨ªa.
En efecto, y como sab¨¦is, el mes de marzo ha estado en buena medida definido por la celebraci¨®n de dos sesiones del Consejo Europeo destinadas a mejorar la gobernanza de las econom¨ªas europeas, a establecer un mecanismo permanente de estabilidad financiera en la zona euro, y a adoptar un pacto, el llamado Pacto por el Euro Plus, para reforzar la competitividad de la econom¨ªa europea, la competitividad de todas y cada una de nuestras econom¨ªas europeas.
Sobre su significado inform¨¦ al Congreso de los Diputados pormenorizadamente el pasado mi¨¦rcoles, especialmente en lo referido a los ocho compromisos concretos que asum¨ª en el mismo Consejo Europeo del pasado 25 para hacer realidad en Espa?a la mejora de nuestra competitividad, la recuperaci¨®n del empleo, como la gran tarea, la sostenibilidad de nuestras cuentas publicas y la estabilidad de nuestro sector financiero.
Son todos ellos la ¨²ltima manifestaci¨®n de nuestra voluntad tenaz de hacer todo lo necesario para intensificar nuestra capacidad de crecimiento y con ella y ante todo, nuestra capacidad para volver a crear empleo. Es una voluntad que se suma al convencimiento de que s¨®lo lo lograremos si aprendemos todas las lecciones de la crisis, y por tanto, si cambiamos nuestro sistema productivo, si asumimos una vocaci¨®n reformista, si apostamos por modernizar nuestro pa¨ªs. Esa es nuestra voluntad.
Estamos comprometidos con un intenso proceso de modernizaci¨®n de la econom¨ªa espa?ola, el que se requiere para superar la crisis a la que nos hemos tenido que enfrentar. Una crisis que ha producido mucha inseguridad en no pocos conciudadanos de nuestro pa¨ªs, sobretodo los que han perdido su empleo y ahora tarda en encontrarlo y se siente d¨¦biles en sus relaciones familiares y sociales, con la tentaci¨®n de perder la esperanza. Tambi¨¦n los que han perdido su negocio, levantado y mantenido en muchas ocasiones con gran esfuerzo.
Una crisis que ha producido tambi¨¦n incertidumbre en ciudadanos que se identifican con nosotros, que nos apoyan, sobre el sentido de nuestra acci¨®n de gobierno, y sin embargo, no lo olvidemos ni por un momento, con cada medida econ¨®mica que aplicamos, con cada iniciativa que impulsamos, con todo lo que hacemos, no pretendemos sino crear las condiciones que favorezcan la recuperaci¨®n del empleo en nuestro pa¨ªs al tiempo que preservamos nuestra cohesi¨®n social.
Cuando concluya esta crisis, y s¨®lo concluir¨¢ cuando se cree empleo de forma estable, se podr¨¢ decir que logramos sentar los fundamentos de un modelo productivo renovado, m¨¢s competitivo e innovador, m¨¢s sostenible, para garantizar nuestro bienestar. Y que mientras lo hac¨ªamos, no dejamos de velar por la m¨¢xima cohesi¨®n social ante la amenaza de una crisis tan dura como la que hemos sufrido.
Compa?eras y compa?eros, los ¨²ltimos meses han sido todav¨ªa muy duros para la acci¨®n de gobierno, porque despu¨¦s de pedir esfuerzos extraordinarios a los ciudadanos en un clima de incertidumbre por la inestabilidad financiera en Europa que afectaba a nuestro pa¨ªs, ha continuado la destrucci¨®n de empleo aunque fuera a un ritmo claramente menor.
Pero lejos de amilanarnos, hemos seguido con las reformas, buscando trabajosamente los apoyos parlamentarios para sacarlos adelante, y hemos logrado recuperar el dialogo social, es verdad que no s¨®lo a nuestro esfuerzo, sino tambi¨¦n gracias a la actitud responsable y constructiva de los sindicatos y de la nueva representaci¨®n de los empresarios.
Mucho trabajo, os lo puedo asegurar, y en la direcci¨®n adecuada, acabando sus frutos incluso en contextos tan complicados como el de esta crisis. Ya durante 2010 comenzamos a crecer, todav¨ªa de una manera lenta, pero m¨¢s de lo que vaticinaban todas las previsiones, Y ahora ante la crisis en Portugal y el encarecimiento de su deuda soberana, la financiaci¨®n exterior de Espa?a lejos de encarecerse sigue bajando y ello s¨®lo se explica por la confianza creciente que fuera y dentro de Espa?a inspira este arduo y esforzado proceso de reformas que estamos llevando a cabo.
Recuperada la estabilidad y asegurada la continuidad de la recuperaci¨®n, el siguiente paso de este proceso es en buena l¨®gica la intensificaci¨®n del crecimiento y con ¨¦l, al fin, la creaci¨®n de empleo. No va ser f¨¢cil y tampoco r¨¢pido, pero para llegar ah¨ª y para hacerlo cuanto antes, no vamos a bajar la guardia, vamos a completar la tarea en estos pr¨®ximos doce meses de legislatura.
Vamos a aplicar las reformas aprobadas, a culminar las que est¨¢n en marcha, -y algunas de ellas necesitan de la definitiva aprobaci¨®n parlamentaria-, y a impulsar todas las nuevas que hemos comprometido, como las incluidas en el Pacto por el Euro, a las que me he referido y que se ir¨¢n aprobando en los sucesivos Consejos de Ministros.
Durante estos ¨²ltimos quince meses, desde que present¨¦ la Estrategia de econom¨ªa sostenible en el Parlamento, hemos realizado ajustes (algunos extraordinarios, pidiendo un esfuerzo especial a algunos colectivos de ciudadanos, a los que quiero dar las gracias de nuevo por su solidaridad), ajustes y reformas.
Hemos hecho los ajustes imprescindibles, con el m¨¢ximo sentido de la equidad y dejando a salvo las grandes pol¨ªticas sociales y casi todos los avances de nuestra primera Legislatura. Lo hemos logrado a pesar del extraordinario esfuerzo de austeridad que estamos llevando a cabo. Ajustes, por tanto, los imprescindibles, para asegurar el cumplimiento del objetivo de d¨¦ficit; y que en su gran mayor¨ªa est¨¢n ya encauzados. Las previsiones, afortunadamente, se van cumpliendo.
Ajustes, los imprescindibles, y reformas todas las necesarias para que nuestra econom¨ªa sea m¨¢s competitiva. Porque s¨®lo as¨ª estaremos en condiciones de seguir reforzando nuestro Estado del bienestar, que es la gran aspiraci¨®n de nuestro proyecto pol¨ªtico.
Las reformas est¨¢n en el adn de los socialistas espa?oles, y por eso hemos sido partido de gobierno, con diferencia, m¨¢s tiempo que ninguna otra formaci¨®n pol¨ªtica en el per¨ªodo democr¨¢tico. Un per¨ªodo, no lo olvidemos, en el que hemos sabido vencer los momentos dif¨ªciles como el actual, hasta ser capaces, como sociedad, como pa¨ªs, de dar un salto verdaderamente hist¨®rico en nuestras aspiraciones.
Ahora, necesitamos las reformas para acelerar el cambio de modelo productivo; las necesitamos para incrementar la competitividad, la eficiencia de la econom¨ªa espa?ola, del sector p¨²blico y del privado, y el objetivo pol¨ªtico que perseguimos con ellas es, insisto, mantener intacta nuestra ambici¨®n por enriquecer el Estado social, la educaci¨®n, la sanidad, la igualdad de oportunidades, la protecci¨®n de los m¨¢s desfavorecidos, el equilibrio y la cohesi¨®n en nuestro pa¨ªs.
Compa?eras y compa?eros. Hemos podido cometer errores. Pero hemos dado la cara en todo momento -no recuerdo ya cuantas veces he comparecido en el Parlamento, como dice nuestro portavoz, Jos¨¦ Antonio Alonso, nos estamos dejando la piel en la batalla diaria contra la crisis, estamos en el camino adecuado. En el diagn¨®stico de lo que hay que hacer para sentar las bases de una nueva etapa de crecimiento duradero y sin habernos dejado por el camino, no s¨®lo los servicios b¨¢sicos del Estado del bienestar, sino incluso la mayor¨ªa de las conquistas m¨¢s recientes, como el Sistema de Atenci¨®n a la Dependencia tan querido por todos nosotros.
Lo hemos hecho hasta ahora y lo seguiremos haciendo as¨ª hasta el final de la legislatura. Tenemos claro el programa de acci¨®n para lo que queda de legislatura. Son decisiones que afectan a la Econom¨ªa, como la reforma de los servicios profesionales, la reforma aeroportuaria, la sostenibilidad urbana, la ordenaci¨®n de las telecomunicaciones, la culminaci¨®n del proceso de reestructuraci¨®n de las cajas de ahorros, la flexibilizaci¨®n de horarios comerciales en determinadas zonas tur¨ªsticas, o el afloramiento del empleo sumergido.
Decisiones que mejorar¨¢n el funcionamiento de la Justicia, como la regulaci¨®n de la mediaci¨®n y el arbitraje o la agilizaci¨®n de su funcionamiento, o la implantaci¨®n definitiva de la nueva oficina judicial. Decisiones que modernizar¨¢n las administraciones, como un nuevo programa de reducci¨®n de cargas administrativas, o la implantaci¨®n del silencio positivo como nueva y radical pauta de comportamiento ante los ciudadanos, o la supresi¨®n de una parte de las licencias a que hoy se ven sometidas las iniciativas emprendedoras de muchos de ellos, o el nuevo elemento para asegurar la estabilidad de nuestras cuentas p¨²blicas que ser¨¢ la nueva regla de gasto para el conjunto de las administraciones.
Decisiones que supondr¨¢n una revisi¨®n a fondo de nuestro sistema de Formaci¨®n Profesional para desarrollar todo el potencial de las nuevas pol¨ªticas activas de empleo y tambi¨¦n de nuestro sistema de Ciencia e Innovaci¨®n para aplicar la nueva ley.
Decisiones que afectar¨¢n al Bienestar Social, como la universalizaci¨®n de la asistencia sanitaria, o la integraci¨®n de los trabajadores agrarios en el sistema general de la seguridad social. Decisiones que culminar¨¢n el Di¨¢logo Social, de m¨¢xima trascendencia, como la reforma de la negociaci¨®n colectiva, confiando en el acuerdo al que han de llegar empresarios y sindicatos.
Decisiones que mejorar¨¢n la actividad de las empresas al afectar a la eficiencia y el ahorro energ¨¦tico y a su internacionalizaci¨®n. Decisiones que incrementar¨¢n los derechos de los ciudadanos, como la Ley de igualdad de Trato o la Ley de muerte digna.
Decisiones, en fin, destinadas a incrementar la estabilidad de la econom¨ªa y la confianza en ella como, ser¨¢n la preparaci¨®n y aprobaci¨®n de los Presupuestos Generales para 2012 para lo que ya hemos iniciado los contactos al objeto de contar con los apoyos necesarios.
Es una tarea ambiciosa. Un programa realista, porque s¨¦ que seremos capaces de llevarlo a cabo. Y es tambi¨¦n un programa de decisiones que no puede esperar y que hay que culminar ya. S¨¦ que el Gobierno podr¨¢ hacerlo y s¨¦ que contar¨¦ con vuestro apoyo. Lo har¨¦, eso s¨ª, actuando con la autonom¨ªa con que debo actuar como presidente del gobierno, como presidente que soy de todos los ciudadanos.
Queridos compa?eros y queridas compa?eras. Porque s¨¦ que seguir¨¦ contando con esta autonom¨ªa y con vuestra confianza para ejercerla, creo que hoy puedo abordar con tranquilidad y con normalidad la expectativa abierta sobre mi posici¨®n en relaci¨®n con la candidatura a las elecciones generales.
Y lo voy a hacer donde siempre pens¨¦ que deb¨ªa. Aqu¨ª. Ante vosotros. Ante el ¨®rgano de nuestro partido soberano entre congresos.
Cuando fui elegido presidente del gobierno en 2004 pensaba que dos legislaturas era el periodo razonable al que pod¨ªa aspirar para estar al frente de los destinos del pa¨ªs. Dos legislaturas. Ocho a?os. No m¨¢s. Pensaba que era los m¨¢s conveniente, no ya para nuestra formaci¨®n pol¨ªtica, a la que me unen unos v¨ªnculos emocionales que no hace falta que os recuerde hoy aqu¨ª, sino tambi¨¦n para el pa¨ªs, para el pa¨ªs que, desde mi propia visi¨®n de liderazgo democr¨¢tico, le convienen dos periodos al frente de los destinos de Espa?a. Permitidme que a?ada que tambi¨¦n pensaba que ser¨ªa lo m¨¢s conveniente para mi familia.
Esa era mi convicci¨®n hace siete a?os y los a?os han pasado y en los m¨¢s recientes nos ha tocado luchar desde el gobierno y a m¨ª, como es mi obligaci¨®n, en primera l¨ªnea frente a una crisis econ¨®mica tan intensa y tan compleja como la que a¨²n estamos combatiendo. De modo que, despu¨¦s de este tiempo, mi forma de pensar no ha hecho sino afianzarse en mi ¨¢nimo.
Lo que es una convicci¨®n se convirti¨® en una determinaci¨®n personal, en una decisi¨®n firme y esta es la decisi¨®n que hoy os traslado y hago p¨²blica: no voy a ser candidato en las pr¨®ximas elecciones generales.
Gracias por vuestro respeto y por vuestro afecto. Ahora quiero explicaros por qu¨¦ he decidido hacer p¨²blico en este momento mi voluntad. Para determinar el momento del anuncio no hay, como bien sabemos en nuestra historia democr¨¢tica, precedentes indiscutibles o simplemente consolidados. Solo cuento para esta tarea con la gu¨ªa de la responsabilidad personal con el pa¨ªs. Con mi pa¨ªs y con el partido, con mi partido.
Una responsabilidad rigurosamente intransferible de cuyo ejercicio me considero obligado a dar cuenta, a motivar ante vosotros y ante todos los ciudadanos. El razonamiento que me ha llevado a hacer el anuncio hoy es el siguiente:
Queda un a?o para las elecciones generales. Un plazo que me ha parecido razonable para hacer p¨²blica mi decisi¨®n, para clarificarla formalmente ante el partido y la propia sociedad espa?ola. Es un plazo que nos permite, que nos deber¨ªa permitir asumir con naturalidad y con responsabilidad, ahora ya colectiva como organizaci¨®n, la puesta en marcha m¨¢s conveniente en cuanto al tiempo de los procedimientos que fijan los estatutos de nuestro partido para elegir a la persona que encabece nuestras listas en marzo de 2012. Y para que ella pueda, a su vez, despu¨¦s de ser elegida, disponer de tiempo suficiente para forjar un proyecto pol¨ªtico para el nuevo periodo y tambi¨¦n para explic¨¢rselo a los ciudadanos.
El mecanismo del dedazo simplifica mucho las cosas, pero no es el nuestro ni el de la mayor¨ªa de la sociedad espa?ola, que no entiende, con raz¨®n, que los liderazgos democr¨¢ticos puedan gestarse a trav¨¦s de otros procedimientos, Y nadie pod¨ªa esperar de m¨ª una actitud distinta. Por otra parte, nunca estuvo en mi ¨¢nimo apurar hasta el final, ni prolongar innecesariamente la especulaci¨®n sobre mi candidatura. Lo he vuelto a meditar durante las ¨²ltimas semanas. He escuchado unos u otros argumentos sobre la oportunidad de hacerlo antes o despu¨¦s. Seguro que no es f¨¢cil acertar, que es una cuesti¨®n opinable y habr¨¢ opiniones para todos los gustos.
Finalmente he cre¨ªdo que lo mejor era hacerlo ahora, tambi¨¦n para poner fin a lo que se percib¨ªa como una incertidumbre que nos pod¨ªa acabar distrayendo de nuestra tarea principal que es desarrollar las reformas, consolidar la recuperaci¨®n econ¨®mica y abrir el tiempo de la creaci¨®n de empleo y, por supuesto, el reto electoral que tenemos ante el 22 de mayo.
Ahora vamos a seguir respetando los tiempos y los procedimientos y os pido a todos que lo hagamos. Nuestra fortaleza como partido reside precisamente en esos procedimientos, los establecidos en nuestros estatutos y en que los activemos cuando corresponda. Estoy seguro de que si lo hacemos as¨ª estaremos en condiciones de ofrecer la mejor candidatura posible a la sociedad para el nuevo per¨ªodo pol¨ªtico en representaci¨®n del Partido Socialista.
Queda un a?o de legislatura. Por delante unas elecciones auton¨®micas y locales y una intensa actividad de gobierno en un periodo trascendente para nuestro pa¨ªs.
Os propongo que sea el Comit¨¦ Federal, en la pr¨®xima reuni¨®n que tengamos, despu¨¦s de las elecciones auton¨®micas y municipales, el que fije el momento de activar el proceso de primarias previsto en los Estatutos del partido para elegir nuestra candidatura a las pr¨®ximas elecciones generales.
Podemos sentirnos, pues, satisfechos y hasta orgullosos de que nuestros procedimientos sean los que son, democr¨¢ticos. Orgullosos, pero, a la vez, plenamente consecuentes con lo que implican. Y lo que implican es: pleno respeto y actitud leal con los tiempos; pleno respeto y actitud leal con el hecho mismo de la concurrencia de una diversidad de candidaturas, si se produce, y pleno respeto y actitud leal, por supuesto, con los resultados. Y pleno respeto y actitud leal por parte del ganador, lo cual tiene una traducci¨®n muy clara, a mi juicio, y en su momento trat¨¦ de ser consecuente con ella: voluntad integradora. Voluntad integradora para sumar, para valerse de todos como mejor forma de servir a nuestros partido y a los ideales que defendemos.
Si actuamos as¨ª, y yo me siento responsable como vuestro Secretario General que as¨ª sea, sacaremos fuerzas de la democracia para ser m¨¢s fuertes que nadie en democracia.
Tambi¨¦n estoy seguro de que nuestras posibilidades de revalidar la confianza mayoritaria de los ciudadanos para este nuevo periodo depender¨¢n, en buena medida, de que ahora sigamos centr¨¢ndonos en el trabajo que estamos haciendo por nuestro pa¨ªs. Desde el Gobierno de Espa?a, en primer lugar, pero tambi¨¦n desde las Comunidades Aut¨®nomas y Ayuntamientos que gobernamos y desde los que podamos hacer despu¨¦s de las pr¨®ximas elecciones.
Quiero expresarme sobre este punto con la misma claridad que he tratado de hacerlo hasta ahora. Voy a ejercer mi responsabilidad como Presidente del Gobierno hasta el final de la legislatura, hasta el ¨²ltimo d¨ªa y lo voy a hacer como hasta ahora: cumpliendo con los compromisos que asum¨ª en el Parlamento ante los representantes de todos los ciudadanos. Desde el discurso de investidura hasta las sucesivas comparecencias que hemos tenido en el Congreso en la lucha contra la crisis.
Compa?eros y compa?eras. Ahora el partido se va a volcar, se debe volcar en las elecciones auton¨®micas y municipales. En ambas est¨¢ en juego el d¨ªa a d¨ªa de nuestro estado social, el rigor en la gesti¨®n de las cuentas p¨²blicas, la sensibilidad de los servicios p¨²blicos y sus destinatarios y, adem¨¢s, la b¨²squeda de la cooperaci¨®n entre administraciones para alcanzar la prestaci¨®n m¨¢s eficiente posible de esos servicios. Si os fij¨¢is, esto es tanto como describir las cualidades pol¨ªticas de los socialistas.
Son elecciones, pues, en las que debemos ir de cara al encuentro de los ciudadanos y a debatir con nuestros adversarios. Me alegro de que hay¨¢is hecho esta oferta de debates de todos nuestros candidatos.
Estas son elecciones auton¨®micas y municipales y ser¨ªa absurdo tratar de pervertir su significado, porque los ciudadanos saber perfectamente lo que votan el 22 de mayo. Pero s¨ª quiero pediros que record¨¦is siempre a los ciudadanos que, ante la crisis, ha habido dos actitudes bien diferenciadas en nuestro pa¨ªs. El PP tom¨® una opci¨®n: apostar todo a que la crisis acabar¨ªa derrotando al Gobierno.
He sido l¨ªder de la oposici¨®n durante cuatro a?os y siempre trat¨¦ de evitar que las opciones pol¨ªticas de mi partido dependieran que a mi pa¨ªs le fueran mal las cosas para que as¨ª le fuera mal al Gobierno y por este solo hecho se incrementaran nuestras posibilidades electorales.
Quiero, por todo ello, pediros que en los debates que manteng¨¢is, si se suscitan cuestiones de pol¨ªtica general, aprovech¨¦is la oportunidad para explicar lo que hacemos desde el Gobierno de Espa?a, el sentido de nuestras medidas, el significado de las reformas, nuestra preocupaci¨®n por la cohesi¨®n social, la distinta actitud ante la crisis de unos y de otros. Que lo hag¨¢is mostrando con humildad nuestra preocupaci¨®n porque lleguen cuanto antes el empleo, los resultados del esfuerzo que estamos haciendo, pero tambi¨¦n con la defensa de c¨®mo estamos librando la batalla los socialistas ante una crisis tan dura y compleja como la que a¨²n sufrimos.
Compa?eras y compa?eros, a trabajar; el Gobierno a gobernar; los candidatos a defender su programa, el partido a apoyar a los candidatos y las reformas. Vamos a demostrar, una vez m¨¢s, qui¨¦nes somos y c¨®mo somos. Somos un proyecto profundamente enraizado en la sociedad espa?ola, en los trabajadores, en los que no tienen de todo, en las mujeres y los hombres que aspiran a la igualdad. Somos una formaci¨®n pol¨ªtica hist¨®rica y cargada de futuro. Una formaci¨®n democr¨¢tica que ama la libertad interna y el coraje. Una formaci¨®n en la que nos reconocemos porque nos llamamos compa?eros.
Eso, compa?eros, muchas gracias"
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