Bildu complica la vida a todos

La arrolladora irrupci¨®n de Bildu, con la conquista del mayor ¨¦xito de la izquierda abertzale en unas elecciones, sacude el escenario pol¨ªtico vasco con tama?a magnitud que complica la vida al resto de los partidos, y de manera especial al PNV, con la ¨²nica excepci¨®n de I?aki Azkuna, que obtiene el reconocimiento a su gesti¨®n mediante la ¨²nica mayor¨ªa absoluta de todas las instituciones vascas. Convertida, tras el PNV, en la segunda fuerza de Euskadi en detrimento de un PSE-EE que se resquebraja, la nueva marca radical asesta un golpe determinante en Guip¨²zcoa, donde se lleva por delante a Markel Olano (PNV) y Od¨®n Elorza (PSE), a quienes obligar¨¢ a ensanchar sus opciones para asegurarse su respecto gobierno. En Vizcaya, en cambio, el PNV, que parece ver oscurecido su condici¨®n de m¨¢s votado por el esplendor de Bildu, mandar¨¢ m¨¢s c¨®modo.

M¨¢s que nunca, desde ayer, el Pa¨ªs Vasco es la suma elocuente de distintas sensibilidades como se desprende de los resultados tan dispares en sus Juntas Generales, donde ha ganado un partido distinto en cada parlamento foral, y en sus capitales. En este intrincado contexto, y bajo una incierta situaci¨®n econ¨®mica que contin¨²a a pesar de su olvido en la campa?a, se deber¨¢n producir antes del pr¨®ximo 11 de junio los acuerdos entre diferentes.

Bildu ha llegado para determinar la pol¨ªtica de los dem¨¢s. Dispone para ello de un respaldo tan asentado en cada territorio, y tan demoledor en Guip¨²zcoa, que le permitir¨¢ condicionar cada una de las acciones de gobierno, excepci¨®n hecha de Bilbao. Y empezar¨¢ por la foto que m¨¢s esperaba: abrir el turno de consultas para la formaci¨®n de gobierno en Guip¨²zcoa en su condici¨®n democr¨¢tica de partido m¨¢s votado. El PNV ya sufri¨® una degradaci¨®n similar en 2007 cuando gan¨® el PSE. Pero ahora es muy distinto. Los jeltzales saben que para mantener el poder no les queda otra soluci¨®n que acercarse a los socialistas, un deslizamiento pol¨ªtico que les aleja del entorno abertzale y por el que suspiraba Bildu para as¨ª ensanchar sus dominios sociol¨®gicos.

Este protagonismo colateral en Guip¨²zcoa evitar¨¢ el aislamiento de los socialistas, que salen malheridos de las urnas, donde el efecto Zapatero les ha puesto al pie de los caballos de la abstenci¨®n en ?lava y del PP, sobre todo en Vitoria y San Sebasti¨¢n, y a menos de dos a?os de las auton¨®micas de 2013.