?Estamos cerca del final de las minas antipersonales?

Esta entrada ha sido redactada por nuestro colaborador en Camboya, Alejandro Boza.

La lucha contra las minas antipersonales marc¨® un hito hist¨®rico a finales de los noventa con la firma de la Convenci¨®n de Ottawa, que proh¨ªbe su uso, almacenamiento, producci¨®n y transferencia, adem¨¢s de promover la destrucci¨®n de los arsenales. En poco m¨¢s de cinco a?os, cuando todav¨ªa no exist¨ªa internet, la campa?a internacional para la prohibici¨®n de las minas antipersonales (ICBL) logr¨® movilizar a centenares de miles de personas en todo el mundo para reclamar un mundo libre de minas. La organizaci¨®n, que cont¨® en su d¨ªa con el apoyo medi¨¢tico de Lady Di, recogi¨® en manos de Jody Williams el premio Nobel de la Paz en el a?o 97.

Hace unas semanas, Camboya acog¨ªa la und¨¦cima reuni¨®n de los 158 estados miembros de la Convenci¨®n de Ottawa en la que se revisaron los avances en el cumplimiento del tratado durante 2011. Desde su entrada en vigor en 1999, el uso de minas antipersonales ha disminuido radicalmente.

La buena noticia es que Nigeria y Burundi se declararon libres de minas, al mismo tiempo que se dio la bienvenida a nuevos pa¨ªses (Tuvalu y Sud¨¢n del Sur) y Finlandia anunci¨® que tambi¨¦n suscribir¨¢ el tratado, dejando a Polonia como ¨²nico miembro de la UE que se queda fuera. Sin embargo, a pesar de las buenas intenciones, grandes potencias como China, Rusia y Estados Unidos permanecen ajenas al esp¨ªritu del tratado, y otros pa¨ªses como Israel, Myanmar y la Libia de Gadafi han seguido sembrando minas para defender sus zonas fronterizas.

Europa vendi¨® minas y ahora limpia minas. El coste de cada mina apenas es de un d¨®lar, mientras que para eliminarlas se calcula un coste de 1.000 d¨®lares. En 2010 la Uni¨®n Europea dedic¨® m¨¢s de 225 millones de d¨®lares para las tareas de desminado, sensibilizaci¨®n y asistencia a las v¨ªctimas. La contribuci¨®n internacional de 31 pa¨ªses alcanz¨® los 480 millones de d¨®lares y se reparti¨® entre los 57 pa¨ªses afectados, destin¨¢ndose gran parte a Afganist¨¢n (102M$), Angola (46M$) e Irak (37M$).

En 2010, los programas de acci¨®n contra las minas limpiaron 200 km2 de zonas minadas y 460 km2 de campos de batalla, incluyendo 18,5 km2 de bombas de racimo en zonas contaminadas. Estos trabajos, aparte de los esfuerzos gubernamentales y de Naciones Unidas, los realizan ONG internacionales como Mine Action Group , Halo Trust, Handicap International o APOPO que, con sofisticados radares, detectores de metales, perros, ratas o rudimentarios rastrillos, dependiendo del terreno, del tipo de mina y de los medios disponibles, van limpiando minas y devolviendo esas tierras para que puedan ser utilizadas por proyectos comunitarios.

Gracias a estos esfuerzos, las v¨ªctimas mortales se ha reducido dr¨¢sticamente, desde las 4.300 muertes de 1996 hasta las 286 de 2010. Sin embargo, se siguen produciendo accidentes y v¨ªctimas, en su mayor¨ªa civiles, en pa¨ªses como Afganist¨¢n, donde hay unos 55.000 damnificados o Camboya, con 40.000 supervivientes; y tantos otros en Irak, Laos, Vietnam, Angola o Etiop¨ªa.

Son muchas las organizaciones que trabajan en la asistencia a las v¨ªctimas en todo el mundo, contribuyendo a su rehabilitaci¨®n personal y su inclusi¨®n social, mejorando la accesibilidad en las comunidades rurales o construyendo sillas de ruedas con piezas de bicicleta para asegurarse un mantenimiento f¨¢cil y econ¨®mico.

Si los pa¨ªses que forman parte de la Convenci¨®n de Ottawa cumplen sus compromisos, dentro de diez a?os, en 2021, cuando expire el plazo para que Bosnia Herzegovina y L¨ªbano terminen sus tareas de limpieza y destrucci¨®n de minas, podremos hablar de un mundo libre de minas. Eso s¨ª, tendremos que seguir exigiendo a los pa¨ªses que a¨²n est¨¢n fuera del tratado que asuman sus obligaciones.