Cristo, porno y canap¨¦
Al calor de Arco, se reproducen en Madrid las fiestas con coartada art¨ªstica Asistimos, entre otras, a la inauguraci¨®n de la exposici¨®n de Bruce LaBruce
La excusa era Arco, pero podr¨ªa haber sido Madrid Fusi¨®n, Cibeles, el Orgullo Gay o la Vogue Fashion¡¯s Night Out, fechas, si se me permite, cada vez m¨¢s complicadas de diferenciar. Salir, posar, y un poco de lo que los expertos en las lides fotocoleras llaman high and low: mezclar a los hijos de la modernidad capitalina (consolidados o an¨®nimos reci¨¦n llegados) con ricachonas y gente bien. Polos que se atraen, se gustan, y se ven rec¨ªprocamente bien en las fotos.
Hubo un poco de todo. Los bajos del Hotel Puerta de Am¨¦rica, donde el promotor Enrique Polanco ha instalado su feria de arte contempor¨¢neo paralela a Arco, JUST MAD, escenificaban el estreno de Ana Botella cortando cintas inaugurales como alcaldesa de Madrid (y d¨¢ndole al jam¨®n y la torta del Casar). Tambi¨¦n una entrega de premios del Club de Medios en el Ritz, un desfile de Alejandra Catal¨¢n, hija de los Catal¨¢n de toda la vida (AC Hoteles), y dos arty-parties simult¨¢neas (a eso de las siete de la tarde) de color y convocatorias antag¨®nicas.
La galerista Topacio Fresh inauguraba en su Fresh Gallery la comentad¨ªsima exposici¨®n del cineasta y artista canadiense Bruce LaBruce, porn¨®grafo arty que asegura aborrecer el porno. Y el sector fotogenia del underground madrile?o, al que le encanta subir al barrio de Salamanca, atest¨® una vez m¨¢s la peque?a sala de la calle conde de Aranda. Hab¨ªa doble motivo: el espacio servir¨ªa tambi¨¦n de plat¨® televisivo improvisado ¡ªbien pertrechado de c¨¢maras y p¨¦rtigas¡ª para grabar secuencias del reality Alaska y Mario, que prepara su vuelta a MTV.
La pareja, junto a la actriz Rossy de Palma, el actor Pablo Rivero, el dise?ador Carlos D¨ªez y la ilustradora Silvia Prada, entre otros, protagonizan Obscenity, la muestra de fotograf¨ªas en las que LaBruce ahonda en la posibilidad de alcanzar milagros a trav¨¦s del sexo. Un poco de iconograf¨ªa cat¨®lica recreada en clave pop e incorrecta, vamos: penitentes, m¨¢rtires, ¨¢ngeles malotes, un poco de pecho descubierto y una piedad en la ?que Vaquerizo hace de Cristo yacente; foto que ha provocado su despido como colaborador de la COPE por chocar frontalmente contra los valores que defiende la cadena de los obispos. Entre el gent¨ªo y las colas para alcanzar el codiciado y patrocinado gin-tonic premium de rigor, se escuchaba al cesado responder estoicamente la repetida pregunta: ¡°?Pero, Mario, qu¨¦ te ha pasado con la COPE?¡±. La respuesta, aqu¨ª.
En aras del cat¨®dico espect¨¢culo, hubo gritos y aplausos a la llegada de Boris Izaguirre, y tambi¨¦n sorprendentes (y comentadas) ausencias de muchos de los retratados. Ninguno de los cat¨®licos descontentos con la muestra llamados por el apostolado eucar¨ªstico a manifestarse frente a la galer¨ªa se dio cita anoche.
El pelirrojo LaBruce, cutis brillo caviar, gafa de pasta y mucho m¨¢s manso que su curr¨ªculo, fotografiaba y se hac¨ªa fan de sus j¨®venes fans. Se confesaba encantado y expectante ante una posible financiaci¨®n para su proyecto cinematogr¨¢fico, titulado Santo, the Obscene, que pretende rodar en Almer¨ªa, Barcelona o Madrid y para el que desear¨ªa reunir a sus fotografiados espa?oles bajo una est¨¦tica y argumento similares.
La noche continu¨® en el bar Chicote, pero s¨®lo se hablaba de otra sala, Stella. Es la nueva ubicaci¨®n del Fabuloso Club, garito de la ¨ªnclita Silvia Superstar, starlette indie (militaba en las filas de las bandas Killer Barbies y Aerol¨ªneas Federales), dj y experta anfitriona que ha exportado con ¨¦xito de su Vigo natal (donde regenta varios locales) su f¨®rmula de punk, surf, soul y est¨¦tica Russ Meyer.
Con todo, las mejores fotos de la noche a¨²n estaban por verse. Se proyectaban a las 23.00 en la sala de columnas del c¨ªrculo de Bellas Artes. Alberto Garc¨ªa-Alix reuni¨® a sus incondicionales supervivientes de la movida madrile?a m¨¢s turbulenta, cruda y quiz¨¢s m¨¢s interesante para presentar su nueva productora, llamada Cabeza de chorlito, con la que pretende incubar futuros proyectos art¨ªsticos. Un v¨ªdeo mostr¨® una antol¨®gica selecci¨®n de sus mejores instant¨¢neas al ritmo que marcaba el m¨²sico y cantante de tangos Daniel Melingo, que le puso el broche emocional a los saraos de una noche rebautizable como Babelia¡¯s Art Night Out.
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