Para morirse de la risa

Nos vend¨ªan la idea del alargamiento de la esperanza de vida como si fuera un avance de la humanidad, pero el Fondo Monetario Internacional (FMI) nos ha abierto los ojos al descubrir "el riesgo de que la gente viva m¨¢s de lo esperado". O sea, que la longevidad es un riesgo. En el siglo XVIII los europeos solo contaban con vivir 40 a?os, mientras que los beb¨¦s de los tiempos presentes llegar¨¢n (de media) al doble. La culpa es de lo que ustedes se imaginan: la mejor atenci¨®n sanitaria, el desarrollo econ¨®mico, la ausencia de grandes guerras... Es decir, cosas por las que la gente com¨²n y corriente cree que merece la pena vivir.

?Qu¨¦ ha fallado aqu¨ª? Se hab¨ªa contado con una "desaceleraci¨®n" en el crecimiento de la esperanza de vida en los pa¨ªses desarrollados, pero los continuos avances m¨¦dicos lo est¨¢n estropeando. Encima, en las econom¨ªas emergentes tambi¨¦n mejora el nivel de vida y se usan m¨¢s servicios m¨¦dicos, ergo la gente tardar¨¢ m¨¢s en morirse. ?Y qui¨¦n va a pagar la sanidad y las jubilaciones? A ver.

En el fondo, se trata de un problema muy serio: alerta de los problemas de financiaci¨®n de las pensiones y de la necesidad de retrasar la edad de jubilaci¨®n. Pero la tecnocracia es lo que es. En vez de sensibilizar a la poblaci¨®n sobre tales asuntos, plantea como un grav¨ªsimo problema vivir m¨¢s tiempo, lo cual a unos les aterrorizar¨¢ y a otros los matar¨¢ de risa. La mentalidad de algunos de los t¨¦cnicos es que piensan que la mejor gesti¨®n del paro es eliminar las subvenciones a los parados o, como en el informe de marras, que lo de vivir m¨¢s representa una cat¨¢strofe financiera. El jefe de los estudiosos que as¨ª se explican es el director de Mercados de Capitales del FMI, por cierto un compatriota: Jos¨¦ Vi?als, ex subgobernador del Banco de Espa?a.

El FMI urge a que se act¨²e "cuanto antes", pero har¨ªamos mal en interpretarlo como una invitaci¨®n a la degollina. Sobre todo en Espa?a donde, vaya por Dios, tenemos una de las longevidades m¨¢s altas del planeta: 81,87 a?os de media. Eso s¨ª, ahora son ocho cent¨¦simas menos que en 2010. ?Esto les parecer¨¢ una "desaceleraci¨®n" suficiente a los estudiosos del FMI?