Un mensaje a nuestros pol¨ªticos

Despu¨¦s de toda la pol¨¦mica desatada por la caza de elefantes, el rey Juan Carlos, nos ha sorprendido con una declaraci¨®n corta y emotiva pidiendo perd¨®n a los espa?oles y comprometi¨¦ndose a no hacerlo nunca m¨¢s.

En absoluto soy mon¨¢rquico, pero tengo que aceptar que, adem¨¢s de sus palabras y su gesto compungido, el Rey est¨¢ enviando un mensaje y un ejemplo a nuestros pol¨ªticos; un mensaje que espero hayan captado.

Esperamos que en los pr¨®ximos d¨ªas y semanas podamos presenciar a muchos de nuestros pol¨ªticos pidiendo perd¨®n. Pidiendo perd¨®n por haber nombrado y apoyado a tantos corruptos que han aprovechado sus puestos p¨²blicos para lucrarse personalmente; pidiendo perd¨®n por haber dilapidado nuestros impuestos en proyectos fara¨®nicos e in¨²tiles como aeropuertos vac¨ªos, monumentos y edificios absurdos; pidiendo perd¨®n por mentirnos a todos poniendo en marcha una serie de medidas ocultadas o falseadas en sus planes electorales; pedirnos perd¨®n por prometernos que en ning¨²n caso van a tomar medidas que afecten al Estado de bienestar ni a servicios b¨¢sicos y, a continuaci¨®n, poner en marcha medidas dr¨¢sticas que deterioran la sanidad y la educaci¨®n.

Esperamos una catarsis colectiva de nuestros pol¨ªticos que, adem¨¢s de pedirnos perd¨®n, prometan solemnemente no volver a caer en los mismos errores. Estoy seguro de que a partir de aqu¨ª, nuestra clase pol¨ªtica va a recuperar la credibilidad perdida.¡ª Antonio Bustamante Ram¨ªrez.