Ellas ganan en Chile

Hay errores y errores. Los de las encuestas electorales son a veces gratificantes por cuanto dejan margen a la sorpresa, a lo imprevisto. Y eso es lo que ha ocurrido en las municipales chilenas del pasado domingo, en las que se esperaba la ventaja de la coalici¨®n oficialista del presidente Sebasti¨¢n Pi?era. Por el contrario, registr¨® una clara derrota. Es verdad que en este caso el error vino inducido por el cambio de sistema. Por primera vez, el voto no era obligatorio, sino voluntario. Esa ha sido tambi¨¦n la causa de la gran abstenci¨®n (57%).

Pero no es la sorpresa el factor m¨¢s importante que ha marcado estos comicios. La historia de esta victoria de la opositora Concertaci¨®n tiene algo de gesta en varios ejemplos. Frente al alcalde de Nu?oa, Pedro Sabat, en el cargo desde hace 16 a?os, ha ganado la socialista Maya Fern¨¢ndez, nieta del presidente Salvador Allende, que hab¨ªa hecho su campa?a puerta a puerta y a cuestas con su fuerte acento cubano.

Frente al veterano alcalde de Santiago, Pablo Zalaquett, que tambi¨¦n llevaba m¨¢s de una d¨¦cada al frente del Consistorio, se ha impuesto otra mujer, Carolina Toh¨¢, gracias a su programa participativo. Toh¨¢ fue ministra de la anterior presidenta Michelle Bachelet, pero, como si liderase una asamblea del 15-M, tambi¨¦n hizo una campa?a casa por casa preguntando a la gente qu¨¦ le gustar¨ªa que hiciera por su ciudad. Y est¨¢, finalmente, la victoria de Josefa Err¨¢zuriz, una mujer sin militancia alguna, sobre el ultraderechista Cristi¨¢n Labb¨¦ en Providencia, que abandona la alcald¨ªa con la promesa de no saludar a su contrincante y una frase para la historia: ¡°Si mi pasado pinochetista termin¨® pas¨¢ndome la cuenta, fue un gran honor¡±.

Los an¨¢lisis m¨¢s ortodoxos dicen que estas elecciones han sido una gran derrota para Pi?era y quiz¨¢ el preludio de la ca¨ªda del centro-derecha en las pr¨®ximas generales de 2013. La otra lectura es la victoria de una pol¨ªtica adaptada a los nuevos tiempos, una pol¨ªtica participativa capaz de derribar gigantes. Que las vencedoras sean mujeres no es novedad. Desde que Bachelet accedi¨® al poder, Chile ha dejado de ser catalogado como un pa¨ªs machista, por lo menos en lo que a la representaci¨®n pol¨ªtica se refiere.