Defensa del funcionario

Soy funcionario desde el a?o 1985, trabajo en la AEAT (Agencia Tributaria), y leo con tristeza los ¨²ltimos datos donde se indica que seis de cada diez de nosotros superan los 2.000 euros mensuales.

Despu¨¦s de 27 a?os de carrera, con una oposici¨®n aprobada en igualdad de condiciones, perteneciente al grupo D, con un nivel 18 y nueve trienios, no llego a los 1.400 euros mensuales. Veo con tristeza c¨®mo a diario siguen saliendo en el BOE puestos de libre designaci¨®n (a dedo) con sueldos de 3.000, 4.000 y 5.000 euros. Veo con tristeza c¨®mo nos criminalizan la sociedad, los medios de comunicaci¨®n y, lo que es m¨¢s triste, la clase pol¨ªtica, esos que en su inmensa mayor¨ªa no han superado ninguna oposici¨®n en su vida.

Estoy orgulloso de ser funcionario, de ayudar al contribuyente, y orgulloso de poder mirar a todo el mundo a la cara sin avergonzarme de nada, porque, al contrario que muchos de los que forman la clase pol¨ªtica, no le debo nada a nadie, todo me lo he ganado con mi esfuerzo y mi trabajo, al igual que todos y cada uno de mis compa?eros con los cuales tengo la suerte de trabajar a diario.¡ª Francisco Ranz Pajares.