Que en 2013 seamos muchos m¨¢s

Esta entrada ha sido escrita por nuestra colaboradora habitualYolanda Rom¨¢n (@stricto_sensu). Con ella cerramos un a?o muy complicado pero que ha estado lleno de grandes cosas, grandes entradas en este blog, grandes autores y grandes personas que nos han acompa?ado para permitir ofrecer una visi¨®n diferente del mundo. Tambi¨¦n han sido indispensables todos ustedes que nos leen y nos difunden. Gracias por esta ah¨ª y dar sentido a nuestro esfuerzo.

Atraves¨® media Espa?a para contarme su historia.

Es menuda, con cara de ni?a y ojos vidriosos. Tiene el alma hecha a?icos y una entereza y una lucidez que s¨®lo se posee cuando uno est¨¢ a punto de arrojar la toalla y decide intentarlo una vez m¨¢s. Me impact¨® ella tanto o m¨¢s que su historia. Una historia calcada a otras que hemos estudiado y denunciado antes, ese patr¨®n diab¨®lico de la justicia en Espa?a que condena a madres y a sus hijos a un infierno inimaginable de dolor, impotencia y desesperaci¨®n.

Me negu¨¦ a ver las fotos que tra¨ªa de la ni?a. Dicen que soy tan seria en el trabajo que parezco insensible, pero lo cierto es que la ¨²nica forma que tenemos de ayudar a las v¨ªctimas de injusticias es no perdiendo la objetividad. La denuncia que hagamos debe ser rigurosa y el rigor necesita un punto de distanciamiento y frialdad que yo debo garantizar, por eso ante su infierno soy como un bloque de hielo.

Aunque era dif¨ªcil no derretirse con su relato milim¨¦tricamente ordenado, su voz a punto de quebrarse y su genuina sorpresa ante el funcionamiento de la justicia en Espa?a, todav¨ªa tuve el cuajo de recordarle con dureza que nuestro margen de maniobra es peque?o y que no se hiciese muchas ilusiones, que no ser¨ªamos de gran ayuda para resolver su caso concreto. Me mir¨® con los ojos muy abiertos y me dijo lo siguiente:

¡°Ya nos hab¨¦is ayudado much¨ªsimo. Desde que publicasteis vuestro informe nos hab¨¦is devuelto la esperanza. Ahora, cuando alguien me mira con recelo, les ense?o el informe y los art¨ªculos de prensa y entonces por fin me creen. Ahora s¨¦ que no estoy loca. No ten¨¦is ni idea de cu¨¢nto nos hab¨¦is ayudado ya¡±.

En ese momento no cruc¨¦ miradas con mis compa?eras de trabajo, pero s¨¦ muy bien lo que sintieron, s¨¦ que se llenaron de fuerza y de razones y de valor para seguir trabajando, para seguir creyendo en lo que hacemos, para dejarse los sesos en cada frase que escribimos, en cada titular que maquinamos, en cada carta, en cada denuncia, en cada informe.

Este ha sido un a?o dif¨ªcil para los que creemos en la justicia y la equidad. Un a?o de retrocesos como patadas, como zarpazos a la historia de los logros sociales basados en derechos fundamentales, la sanidad p¨²blica, la educaci¨®n y la justicia para todos o la cooperaci¨®n para el desarrollo. Pero ha sido tambi¨¦n el a?o en que supimos que no somos zombis. El a?o en que nos manifestamos, elevamos la voz y las denuncias y no perdimos de vista la l¨ªnea del horizonte ¨¦tico de la humanidad. Hay miles de ejemplos, basta con hacer un repaso a las entradas de este blog a lo largo de 2012 para hacerse una idea.

Ahora sabemos que no estamos locos. A m¨ª me lo hizo ver, el pasado 19 de diciembre, una mujer menuda y fort¨ªsima que atraves¨® media Espa?a para contarme su historia, decirme que le hab¨ªa devuelto la esperanza y darme todos los motivos del mundo para empezar el nuevo a?o con la cabeza bien alta y muchas ganas de seguir trabajando.

Si quieren, aqu¨ª seguiremos encontr¨¢ndonos y reconoci¨¦ndonos. Y ojal¨¢ que en 2013 seamos muchos, muchos m¨¢s.