El Europarlamento: ?reloj suizo o monstruo?
La instituci¨®n, que ha ganado poder desde el Tratado de Lisboa, se enfrenta a nuevos retos
La sede del Parlamento europeo en Bruselas ¡ªcuyos diputados son elegidos cada cinco a?os en las segundas mayores elecciones democr¨¢ticas del mundo, despu¨¦s de India¡ª entra en ebullici¨®n por la ma?ana, con el ir y venir de funcionarios, asistentes, miembros, algunos periodistas, visitantes y trabajadores varios, a un ritmo que contrasta con la reputaci¨®n de lentitud que persigue a las instituciones de la Uni¨®n Europea.
Las cifras de este espacio que se asemeja a una peque?a ciudad son vertiginosas: 754 eurodiputados que representan a 500 millones de europeos de 27 Estados ¡ª28 con la adhesi¨®n de Croacia en 2013¡ª. Son 23 los idiomas oficiales. Este ¨®rgano, descrito como un monstruo por algunos y como un reloj suizo por otros, sigue siendo el gran desconocido. Y muy criticado.
Mantener Estrasburgo como una de las dos sedes cuesta 122,8 millones de euros al a?o
Desde que en 1992 los Estados decidieran por unanimidad fijar la sede en dos ciudades, el Parlamento reparte su actividad entre Bruselas ¡ªtres semanas al mes¡ª y Estrasburgo ¡ªdonde se celebran la mayor¨ªa de las sesiones plenarias, una semana al mes¡ª. En febrero de 2012, esta bicefalia fue puesta en cuesti¨®n por los eurodiputados debido a su coste: 329 votaron a favor de una sola sede y 223 en contra. Los traslados mensuales a Estrasburgo cuestan 89,3 millones cada a?o. Si se suman 33,5 millones en infraestructuras ¡ªseguridad, alquiler de aparcamientos, equipamiento, etc.¡ª, sale por m¨¢s de 122 millones anuales. El coste adicional de esta segunda sede es una cifra similar a la que RTVE prev¨¦ recortar en 2013: 51,5 millones. En Luxemburgo est¨¢n las oficinas administrativas.
En 2012, el Europarlamento dispuso de 1.718 millones, de los cuales el 41% se destin¨® a personal ¡ªa los 6.000 empleados que trabajan en la administraci¨®n y en los grupos pol¨ªticos¡ª. Alrededor del 24% fue para los eurodiputados. El 11%, a los edificios ¡ªalquiler, mantenimiento¡ª y a las sedes del Parlamento en los 27 Estados miembros. A telecomunicaciones e informaci¨®n se destin¨® el 23%.? El presupuesto del conjunto de la Uni¨®n en 2012 fue de 129.100 millones ¡ªun 1,86% m¨¢s? con respecto a 2011¡ª en cr¨¦ditos de pago y 147.200 millones en compromisos.?
?Qu¨¦ legislaci¨®n se debate en la Euroc¨¢mara? El Tratado de Lisboa ha ampliado los poderes de la instituci¨®n, al establecer que ahora puede colegislar junto con el Consejo Europeo en m¨¢s de 40 nuevos temas, entre ellos pol¨ªtica energ¨¦tica, fondos de la Uni¨®n, agricultura e inmigraci¨®n. Del voto favorable del Europarlamento depende adem¨¢s la aprobaci¨®n del presupuesto de la UE y la adhesi¨®n de nuevos miembros.?
Los eurodiputados cifran en un 75% el porcentaje de las leyes que llegan de Bruselas. Carlos Iturgaiz (PP) es miembro de la comisi¨®n de Peticiones, de la que destaca la Ley de Costas y el intento de homogeneizar los colores de clasificaci¨®n de la basura en la UE. Carmen Romero (PSOE) y Juan Fernando L¨®pez Aguilar, jefe de la delegaci¨®n socialista en Bruselas, trabajan en la comisi¨®n de Libertades, de la que depende inmigraci¨®n, fronteras, lucha contra la criminalidad organizada, asilo y refugio, cooperaci¨®n policial, trata de mujeres y el intento de comunitarizar una pol¨ªtica que reaccione a crisis como la de Lampedusa. L¨®pez Aguilar considera injusta la fama de burocr¨¢tico que hostiga al Parlamento europeo. "Tiene una dimensi¨®n administrativa proporcional a su escala".
Ciudadanos m¨¢s desafectos
La conexi¨®n de los europeos con su Parlamento se debilita, a tenor de los ¨ªndices de participaci¨®n en las elecciones, que fue de un 43% en 2009 ¡ªel 42,94% en Espa?a¡ª. El Eurobar¨®metro de la primavera de 2012 mostr¨® por primera vez insatisfacci¨®n y contento a partes iguales ¡ªel 44%¡ª hacia el funcionamiento de la democracia en la UE.
En oto?o de 2011, 19 pa¨ªses ten¨ªan una opini¨®n mayoritariamente favorable, mientras que en la primavera de 2012 eran 16. La bajada fue m¨¢s fuerte en Hungr¨ªa (ocho puntos menos) y en Suecia (siete puntos menos). El Estado m¨¢s satisfecho con la UE fue Dinamarca (64%). La mayor disconformidad se registr¨® en Grecia (70%), Portugal (77%) y en Italia (57%).
Un 46% de los ciudadanos europeos dijo no sentir confianza hacia el Parlamento, frente al 62% de los espa?oles. El 40% de la UE en su conjunto sigue confiando en esta instituci¨®n. Dinamarca (62%), Luxemburgo (59%) y Suecia (58%) son los Estados que m¨¢s creen en en Europarlamento. Grecia (70%), Reino Unido (65%) y Eslovenia (52%) son los que menos.
La percepci¨®n de los espa?oles respecto a la Uni¨®n en su conjunto tambi¨¦n empeora. El 58% piensa que va mal ¡ªnueve puntos menos que en 2011¡ª y el 52% se muestra insatisfecho con la democracia de las instituciones europeas ¡ªocho puntos menos que en el Bar¨®metro anterior¡ª. La confianza de los espa?oles en la UE se ha descalabrado 19 puntos.
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