Hay que evitar la brecha digital
Algunos pa¨ªses, como Espa?a, no sacan el fruto posible a las nuevas tecnolog¨ªas
La tecnolog¨ªa de la informaci¨®n y las comunicaciones (TIC) ha revolucionado el funcionamiento de la econom¨ªa. Se han redefinido los modelos de negocio, se han globalizado las cadenas de suministro, se ha transformado el dise?o del lugar de trabajo, peque?as empresas reci¨¦n nacidas se han convertido en monstruos multimillonarios y la sanidad y la educaci¨®n han sufrido cambios profundos.
Adem¨¢s de hacer m¨¢s eficientes las empresas y los servicios, la TIC tiene enormes posibilidades de aumentar las innovaciones, impulsar el crecimiento econ¨®mico y crear un empleo cualificado que es muy necesario. Dados los esfuerzos del mundo desarrollado para mejorar su competitividad y el inter¨¦s del mundo en v¨ªas de desarrollo en mantener su ritmo de crecimiento, ning¨²n pa¨ªs puede permitirse el lujo de ignorar estas oportunidades. Sin embargo, como muestra el Informe Global sobre Tecnolog¨ªas de la Informaci¨®n 2013 del Foro Econ¨®mico Mundial, ha surgido una nueva brecha digital que est¨¢ obstaculizando el camino.
Mientras algunos pa¨ªses han consolidado su liderazgo en el panorama digital, otros siguen muy atrasados y con pocos o ning¨²n s¨ªntoma de mejor¨ªa. Los pa¨ªses n¨®rdicos, los tigres asi¨¢ticos y varias econom¨ªas avanzadas de Norteam¨¦rica y Europa occidental, como Holanda y Reino Unido, siguen siendo los que tienen mejores ¨ªndices de conectividad y, gracias a ello, unas tasas de innovaci¨®n muy elevadas que contribuyen a impulsar su competitividad.
En estos pa¨ªses, aproximadamente el 90% de los hogares poseen un ordenador y una conexi¨®n de Internet. Como consecuencia, el uso de la Red, tanto por parte de las empresas como de los consumidores, es alto. Y ello repercute en la econom¨ªa en general, por ejemplo en las solicitudes de patentes, que, aunque no reflejan m¨¢s que un aspecto de los muchos de la innovaci¨®n, son muy numerosas, hasta m¨¢s de 100 solicitudes por mill¨®n de habitantes en la mayor¨ªa de estos pa¨ªses.
Por el contrario, varios pa¨ªses en v¨ªas de desarrollo ¡ªsobre todo en ?frica, pero tambi¨¦n en Latinoam¨¦rica y el sureste asi¨¢tico¡ª siguen teniendo escasos niveles de conectividad y, por tanto, poco empleo de Internet y un desarrollo limitado del comercio electr¨®nico. Sus dificultades para mejorar la conectividad digital hacen que est¨¦n desaprovechando todas las ventajas sociales y econ¨®micas que entra?a una buena infraestructura de TIC.
Es imprescindible un umbral m¨ªnimo de inversiones y desarrollo de aptitudes para que cualquier pa¨ªs obtenga buenos resultados
La divisi¨®n no es tajante. Algunas econom¨ªas desarrolladas, en especial varias del sur de Europa ¡ªEspa?a, Portugal, Italia y Grecia¡ª, no est¨¢n sacando todo el fruto posible a la TIC. En estos pa¨ªses se han hecho grandes esfuerzos para mejorar la conectividad, y se han conseguido s¨®lidas infraestructuras de TIC y buenos niveles de utilizaci¨®n. En Espa?a, por ejemplo, m¨¢s del 40% de la poblaci¨®n posee Internet de banda ancha, una proporci¨®n superior a la de Suiza o Francia. Sin embargo, los fallos de los sistemas de innovaci¨®n ¡ªentre otros, una integraci¨®n insuficiente e ineficaz de la TIC con otras tecnolog¨ªas¡ª y la baja calidad de sus sistemas educativos limitan la capacidad de innovar de las empresas y dificultan la necesaria transformaci¨®n econ¨®mica de estos pa¨ªses hacia actividades basadas en el conocimiento m¨¢s especializado.
Por otra parte, varias econom¨ªas en v¨ªas de desarrollo del ?frica subsahariana, Latinoam¨¦rica y Asia ¡ªRuanda, Kenia, Brasil, El Salvador, India y Bangladesh¡ª han experimentado enormes mejoras en la implantaci¨®n de la telefon¨ªa digital. Aplicaciones como MPesa, muy popular en ?frica oriental, aportan inmensos beneficios sociales y econ¨®micos. No obstante, otras inversiones en infraestructuras de TIC, para mejorar el ancho de banda o el n¨²mero de abonados a Internet de alta velocidad, siguen siendo escasas.
Pero existe otro factor que tal vez cuenta a¨²n m¨¢s a la hora de hacer realidad todas las posibilidades de la TIC: las mejoras en infraestructuras, tecnolog¨ªas y aptitudes deben hacerse de manera coordinada. Las innovaciones se producen muchas veces cuando un trabajador bien preparado experimenta con las ¨²ltimas tecnolog¨ªas y los materiales m¨¢s nuevos. Y aqu¨ª reside una de las mayores dificultades que tienen varias econom¨ªas en v¨ªas de desarrollo, porque crear el entorno apropiado para la innovaci¨®n es costoso, y para lograr unos resultados m¨ªnimos hace falta mucho tiempo.
Como muestra el Informe Global, el desarrollo de una mano de obra cualificada y una infraestructura de TIC de calidad no tiene una reacci¨®n perfecta ni lineal con el logro de resultados econ¨®micos y sociales positivos, en absoluto. Los resultados indican que quiz¨¢ hay un umbral m¨ªnimo de inversiones y desarrollo de aptitudes que es imprescindible para que cualquier pa¨ªs obtenga buenos resultados. Ahora bien, una vez superado ese umbral, los r¨¦ditos de esa inversi¨®n crecen de forma desproporcionada, a medida que la econom¨ªa se orienta cada vez m¨¢s hacia actividades con mayor valor a?adido.
Es preciso animar a los pa¨ªses a que tomen las decisiones inversoras y adopten las pol¨ªticas adecuadas para desarrollar sus TIC, sin olvidar que pueden tardar tiempo en dar fruto. Se necesita un marco estrat¨¦gico coherente para fomentar unas innovaciones capaces de ayudarnos a salir de la crisis econ¨®mica.
Be?at Bilbao-Osorio es director asociado y economista del Centro de Competitividad y Rendimiento Global, Foro Econ¨®mico Mundial.
Traducci¨®n de Mar¨ªa Luisa Rodr¨ªguez Tapia.
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