Herramientas para otra arquitectura
Asamblea exterior en el encuentro AACC en Pasaia en julio de 2010
?Est¨¢ usted contento con lo que pasa en su calle? ?Est¨¢ harto del ruido? ?De que se le atasque la rueda del cochecito al ir a cruzar? ?De no poder sentarse a la sombra? ?De que solo haya un tipo de comercio? ?Le preocupa que los ni?os no jueguen en la plaza? ?Que en un solar vecino se acumule la basura? Usted puede ayudar a que las cosas cambien. Muchos ciudadanos llevan tiempo contribuyendo a la mejora de sus vecindarios.
¡°Las transformaciones urbanas han sido durante mucho tiempo monopolio de poderes con intereses parciales, sean estos de tipo administrativo o privado¡±, cuenta el arquitecto David Ju¨¢rez, del colectivo Straddle3. Sin embargo, las ciudades las disfrutamos, padecemos y pagamos, entre todos. Un amplio grupo de ciudadanos de todo tipo -educadores, urbanistas, t¨¦cnicos, jardineros, artistas y agrupaciones de vecinos- se reuni¨® en C¨®rdoba en 2008, a propuesta de Santiago Cirugeda, para arrancar un proyecto llamado Red de Arquitecturas Colectivas. Buscaban facilitar a los ciudadanos herramientas y conocimientos para poder mejorar barrios, pueblos y ciudades. La idea era activar a la ciudadan¨ªa para mejorar su vida en el vecindario. De eso hace ahora cinco a?os y esa reivindicaci¨®n -que todos seamos capaces de imaginar y proponer mejores calles, plazas, parques, viviendas, centros sociales y culturales- empieza a tomar cuerpo ahora, con las herramientas para intentarlo. ?De qu¨¦ herramientas se trata?
En estos a?os, la actividad, y la actitud, de muchos ciudadanos ha recuperado edificios en desuso, levantado viviendas hechas con material reciclado, acondicionado solares vac¨ªos como espacios de convivencia y construido parques p¨²blicos a partir de la propuesta de un grupo de adolescentes. No son solo arquitectos lo que hay detr¨¢s de esas acciones, pero todos forman parte de Arquitecturas Colectivas: una red de personas y colectivos interesada en participar en la construcci¨®n de su entorno urbano.
La red es lo que impide la ca¨ªda libre: proporciona apoyo, referencias y colaboraci¨®n. Por eso existe una organizaci¨®n en red arquitecturas colectivas -en c¨®digo abierto: esto es para todos- que ha ido creciendo con aportaciones de ciudadanos, profesores, ecologistas, soci¨®logos, abogados, paisajistas o antrop¨®logos: cualquiera que considere que con lo que tenemos podemos hacer m¨¢s. Se trata de ejercer de vecino, de sentir la calle como propia, la quiera uno para tomar una cerveza con tranquilidad o para que sus hijos jueguen en ella.
Arquitecturas Colectivas existe, pero es tambi¨¦n un proyecto a largo plazo. Defiende una identidad colectiva, construida no con lo que sucede en la calle sino con lo que los ciudadanos creen que puede llegar a ocurrir en ella.
?Presentaci¨®n de Esto no es un solar?en el encuentro de Pasaia. La f¨¢brica de redes Ziriza se acondicion¨® para acoger el encuentro AACC 2010 en Pasaia, Gipuzkoa.?
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