Esclavos desde la cuna
Ibrahim Ag Idbaltanat, presidente de Temedt. / Foto: J.N.
En Mal¨ª hay unos 300.000 esclavos. S¨ª, han le¨ªdo bien. Esclavos. Personas despose¨ªdas de todos sus derechos que son un bien material, propiedad de su se?or, intercambiables en una transacci¨®n comercial, que trabajan por un plato de comida, que son castigados y golpeados al antojo del amo o, si se trata de mujeres, que son usadas como un mero objeto sexual sin capacidad de decidir sobre los hijos de esa relaci¨®n, que son a su vez esclavos desde que nacen. Apenas se habla de ellos, pero existen. Una asociaci¨®n llamada Temedt presidida por Ibrahim Ag Idbaltanat, un tuareg negro descendiente de esclavos, lucha contra esta pr¨¢ctica a trav¨¦s de la sensibilizaci¨®n y aboga por la aprobaci¨®n de una ley que proh¨ªba la esclavitud.
En 1988, Tallewate Wallet Litni era una ni?a de solo nueve a?os que se hab¨ªa quedado hu¨¦rfana de madre y padre. Como dicta la costumbre, fue recogida por su t¨ªo, Zilly Ag Choukka, tambi¨¦n residente en Rharous (regi¨®n de Tombuct¨²). Sin embargo, al poco tiempo, Hamad Aguissa Ag Khaharno se present¨® en la casa alegando ser el propietario de los padres de la ni?a y, por tanto, tambi¨¦n de Tallewate. As¨ª que se la lleva y la pone a su servicio. Veinte a?os m¨¢s tarde, la joven se fuga, harta de sufrir malos tratos y abusos de todo tipo, dejando atr¨¢s a un hijo fruto de las violaciones repetidas por parte de su se?or. ?ste le encuentra y se la vuelve a llevar al desierto, argumentando que es de su propiedad. A los pocos meses, un equipo de Temedt la localiza y logra liberarla.
Campamento de desplazados de Sevar¨¦. / Foto: J.N.
Pese a estar oficialmente abolida en todo el Planeta, Mal¨ª no es el ¨²nico pa¨ªs donde persisten pr¨¢cticas esclavistas, se calcula que unos 27 millones de personas en el mundo trabajan sin salario y bajo la amenaza de la violencia, pero en este pa¨ªs africano, al igual que en Mauritania, N¨ªger o Sud¨¢n, la esclavitud es algo muy arraigado. Seg¨²n Ibrahim Ag Idbaltanat, ¡°durante la ¨¦poca de la colonizaci¨®n, los franceses escribieron que era un crimen contra la Humanidad y, tras la independencia, la Constituci¨®n recoge esto mismo. Sin embargo, no fue un proceso interno de la sociedad maliense, no fue algo propio, sino una norma que vino de fuera. Para esta sociedad, la esclavitud es algo normal que viene del pasado, una pr¨¢ctica con la que no ha habido una ruptura, una revoluci¨®n que la extirpe¡±.
Son varias las comunidades que practican la esclavitud. En primer lugar est¨¢n los tuaregs y los maures, "blancos" que esclavizan a negros, pero tambi¨¦n existe entre songhays, peuls y sonink¨¦s, sobre todo en el norte del pa¨ªs. ¡°En otras etnias la esclavitud persiste tambi¨¦n, pero bajo formas m¨¢s sutiles¡±, asegura el presidente de Temedt. El esclavo en Mal¨ª suele proceder de familia de esclavos durante generaciones y generaciones. Es propiedad del se?or, tratado como un bien material y heredado por los hijos del amo si ¨¦ste muere. Adem¨¢s, no decide sobre la vida de sus hijos, que son tambi¨¦n esclavos. Es lo que se llama esclavitud por ascendencia, muy diferente de la trata de personas que existe en otras latitudes y que existi¨® durante siglos.
Los hombres normalmente se dedican a la ganader¨ªa y a la agricultura, trabajan en los campos del amo o cuidan sus animales. Las mujeres, al servicio dom¨¦stico. Los horarios no est¨¢n en absoluto regulados, apenas hay tiempo para el descanso. Los castigos corporales son habituales. "Son vistos con normalidad tanto por el se?or como por el siervo", asegura Soumaguel Oyahit, secretario permanente de Temedt, "el esclavo piensa que esos golpes le ayudar¨¢n a ir al Para¨ªso cuando muera". Les suelen poner nombres de ¨¢rboles o de animales, en una muestra m¨¢s de su "cosificaci¨®n". Por ejemplo Intamat (que significa acacia en tamashek) es un t¨ªpico nombre de esclavo.
Ibrahim Ag Idbaltanat tambi¨¦n se refiere a otros dos tipos de esclavitud muy en boga en Mal¨ª. En primer lugar, lo que ¨¦l denomina esclavitud moderada, ¡°cuando el esclavo no vive con su se?or, pero ¨¦ste puede aparecer en cualquier momento para coger ni?os y llev¨¢rselos como esclavos¡±. En segundo lugar, la esclavitud pol¨ªtica, ¡°un se?or que vive en Bamako por ejemplo y se re¨²ne con un partido pol¨ªtico y le dice que tiene 150 ¨® 200 personas que votar¨¢n por este partido a cambio de algo. Por eso tambi¨¦n existe una gran complicidad pasiva con estas pr¨¢cticas feudales¡±. Si bien se calcula que unas 300.000 personas sufren la esclavitud de manera directa, la cifra aumenta a 800.000 si hablamos de estas otras formas de dominaci¨®n.
Temedt naci¨® hace tres a?os durante un f¨®rum celebrado en Menaka (regi¨®n de Gao) y en la actualidad cuenta con 31.000 miembros. Sin embargo, los comienzos no fueron f¨¢ciles. De un lado, una sociedad que tolera estas pr¨¢cticas; de otro una clase pol¨ªtica que se beneficia de las mismas; y, finalmente, unas autoridades que consideraban que airear este problema era un descr¨¦dito para Mal¨ª. ¡°Hemos crecido mucho desde entonces, ahora aceptan que gritemos sin tener mucho en cuenta lo que decimos. Pero nosotros no nos desmoralizamos¡±, asegura el presidente.
Mediante las campa?as de sensibilizaci¨®n y educaci¨®n dirigidas tanto a esclavos como a se?ores, ¡°ambos son v¨ªctimas de una pr¨¢ctica que se encontraron ya establecida¡±, han logrado la liberaci¨®n de una treintena de personas. Y ahora Temedt est¨¢ empe?ada en promover la aprobaci¨®n de una ley contra la esclavitud porque, pese a estar recogido en la Constituci¨®n, no existe una norma que establezca la prohibici¨®n de esta pr¨¢ctica. Para ello cuenta con el apoyo de organizaciones internacionales como la Fundaci¨®n Rosa Luxemburgo o Antislavery International y la complicidad de colectivos hermanos como Timidria (N¨ªger) y SOS Esclaves (Mauritania) con los que Temedt colabora habitualmente. De hecho, este fin de semana las tres organizaciones han celebrado una conferencia en Bamako bajo el t¨ªtulo de "La persistencia de la pr¨¢ctica de la esclavitud en el Sahel, qu¨¦ impacto sobre la actuaci¨®n del Estado de Derecho".
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