Small, the new big

Por Sonia Felipe Larios

El mundo postmoderno ha multiplicado el n¨²mero de agentes sociales y ha relevado de su atalaya a las grandes empresas y las instituciones tradicionales, alumbrando as¨ª un nuevo modelo de actor global: la sociedad civil. La desconfianza hacia nuestros pol¨ªticos y nuestras instituciones va acompa?ada de nuevas formas de colaboraci¨®n, m¨¢s locales pero, a su vez, de inspiraci¨®n y enfoque globales, gracias al impulso de las nuevas tecnolog¨ªas y las redes sociales.

Es como si nos hubi¨¦ramos ca¨ªdo en un c¨®modo estado de sue?o y nos hubieran zarandeado para despertarnos. La falta de una respuesta eficaz por parte de las instituciones pol¨ªticas o de las grandes empresas ante los retos de nuestro tiempo nos ha hecho abrir los ojos y tomar en nuestras manos, por fin, el poder de cambiar las cosas.

Cada vez somos m¨¢s conscientes del impacto que nuestras acciones tienen en el mundo, no s¨®lo por parte de peque?as empresas, organizaciones sociales o movimientos ciudadanos m¨¢s o menos formales, sino a trav¨¦s de nuestros propios actos cotidianos, los peque?os gestos. Desde replantearnos por qu¨¦, d¨®nde y c¨®mo compramos, eligiendo alimentos de proximidad y ecol¨®gicos, hasta participando en iniciativas de consumo locales, colaborando con ONG o contratando a proveedores de energ¨ªa verde. Tambi¨¦n hay muchos emprendedores que optan por impulsar empresas sostenibles, a su vez financiadas por una red de bancos con valores. Vivimos en una ¨¦poca en que cada uno de nosotros podemos hacer algo para cambiar la econom¨ªa y la sociedad, y orientarlas hacia un modelo m¨¢s sostenible, humano e innovador.

Como se?alaba Gisela Genebat, responsable de relaciones con donantes, empresas y fundaciones de Interm¨®n Oxfam, en un reportaje sobre consumo responsable: "Cuando compras productos de comercio justo, o alimentos de cultivo ecol¨®gico, cuando utilizas el transporte p¨²blico o la bici, cuando usas bombillas de bajo consumo, cuando apuestas por empresas responsables o decides invertir tu dinero en la banca ¨¦tica, est¨¢s actuando como un consumidor responsable y, por ende, como un ciudadano responsable.

Otra iniciativa interesante son los movimientos de transici¨®n, presentes en m¨¢s de una treintena de pa¨ªses y formados por grupos de personas que buscan una forma de vida m¨¢s ecol¨®gica y sencilla. No hace falta abandonarlo todo y echarse al monte sino que se parte de peque?as iniciativas grupales como el cultivo de un huerto urbano, la organizaci¨®n de mercados de intercambio o la producci¨®n de energ¨ªa a peque?a escala.

El cambio no es f¨¢cil pero hoy m¨¢s que nunca tenemos la posibilidad de que nuestras peque?as acciones tengan un impacto global. De hacer que lo peque?o sea el nuevo grande. El acceso a esta informaci¨®n, unido al poder de las redes sociales y las nuevas iniciativas de colaboraci¨®n ciudadana pueden mover monta?as. Eso si a?adimos el ingrediente estrella: el compromiso. Como le gusta decir a Joan Antoni Mel¨¦, autor del libro y el blog Dinero y conciencia: "Todo aquello que parece imposible, cuando nos comprometemos, se convierte en posible."