El mundo virtual de Piqu¨¦

Las partidas eran tan animadas como largas, de horas y hasta d¨ªas, con abundantes risas y alguna que otra pelea. Los hermanos, refugiados en el altillo de casa, se apropiaban del ordenador de su padre y escog¨ªan al Bar?a para hacerlo campe¨®n de todo en el entonces revolucionario PC F¨²tbol. ¡°A veces hac¨ªa trampas, como guardar la partida antes de una final y, si perd¨ªamos, volv¨ªamos a jugarla¡±, cuenta Gerard Piqu¨¦, futbolista del Barcelona; ¡°o compraba a Koeman y lo vend¨ªa por el dinero que quer¨ªa; era una tara del juego¡±. Toma la palabra Marc, su hermano peque?o. ¡°Ya por entonces Geri ¨Ccomo le conocen sus allegados- dec¨ªa que crear¨ªa un juego as¨ª. Siempre lo tuvo en la cabeza¡±. Y, a?os despu¨¦s, no ha faltado a su palabra. ¡°?Amigos! ?Sab¨¦is que he creado una compa?¨ªa de videojuegos llamada Kerard Games? Necesitamos Game designers, Q&A, Scrum Masters, programadores¡­ si quieres aportar tu talento y entusiasmo, env¨ªame tu CV¡±, public¨® en su cuenta de Facebook hace menos de dos semanas. Previendo el aluvi¨®n de respuestas ¨C¡°en unas horas llegamos a casi 10.000¡±, cuenta Alberto Guerrero, el director general de Kerard Games-, delegaron la tarea en Talent Search People, una compa?¨ªa especializada en selecci¨®n de personal. Un paso m¨¢s en el ambicioso e universal proyecto de Piqu¨¦, en el videojuego Golden Manager, aventura on-line y bajo el marco de Facebook donde el internauta es el m¨¢nager de un equipo de f¨²tbol.

La ra¨ªz del proyecto fueron 40 p¨¢ginas escritas por el propio jugador

¡°Cuando me contaron que Piqu¨¦ quer¨ªa contactar conmigo para un proyecto tecnol¨®gico, no sab¨ªa que pensar. Me dije: ¡®futbolista, con Shakira¡­ a ver qu¨¦ me cuenta¡±, explica Guerrero. Pero ese mismo d¨ªa, un correo electr¨®nico le hizo cambiar de parecer. ¡°?Me envi¨® 40 p¨¢ginas de Word hechas por ¨¦l donde describ¨ªa la mec¨¢nica del juego entremezclada con im¨¢genes y ejemplos! Me di cuenta de que no era normal¡±, desvela. Y, despu¨¦s de colaborar un tiempo como externo, se meti¨® en el ajo, convencido de que se pod¨ªa hacer un gran proyecto. ¡°Ten¨ªamos talento, capacidad econ¨®mica y voluntad de trabajo¡±, ahonda Guerrero. As¨ª, despu¨¦s de invertir algo m¨¢s de un mill¨®n de euros entre los socios capitalistas ¨Cse cuentan su padre y su hermano, entre otros-, en septiembre de 2012 montaron la oficina. ¡°El paso definitivo para tirar hacia delante¡±, conviene Ferran Punt¨ª, director de marketing.

Una moqueta verde que representa el c¨¦sped de un campo de f¨²tbol saluda al personal cuando entra en las oficinas de Kerard Games, dentro del imperial edificio de Bayer. No falta detalle en los adornos, como un banquillo de f¨²tbol, una pared pintada que representa un pantallazo del juego donde est¨¢ la alineaci¨®n de los impulsores del proyecto, una gran televisi¨®n donde se contabilizan los usuarios totales (403.226 hasta el viernes), los que est¨¢n conectados en ese momento, la edad media de los mismos¡­ y el despacho de Gerard, donde acumula trofeos y recuerdos como la red del Mundial, r¨¦plicas de la Champions y Ligas, balones de las finales¡­ ¡°?Qu¨¦ pasa maqui?¡±, le dice a uno. ¡°?Has visto la lista de altas de ayer, crack?¡±, le pregunta a otro. ¡°?C¨®mo est¨¢ tu ni?o?¡±, se preocupa por un tercero. Es Piqu¨¦, que saluda a cada empleado de su empresa. ¡°Hay que crear buen ambiente. Me gusta conocer a todos y no me cuesta nada saludarlos¡±, se?ala. Y as¨ª lo hace casi cada d¨ªa, implicado como est¨¢ en el proyecto. ¡°Esto es como un vestuario; somos trabajadores y debemos sacar buenos resultados¡±. Recoge el testigo Punt¨ª. ¡°Gerard est¨¢ presente en todo y alguna vez nos ha tumbado ideas de la que est¨¢bamos convencidos. Aporta su experiencia en el mundo del f¨²tbol, como incluir entrenamientos individualizados para darle un toque personal al equipo¡±. Replica Piqu¨¦: ¡°Pero muchas veces me corrigen porque quiz¨¢ mi estrategia no es la adecuada para la recaptaci¨®n, por lo que reculo. Aqu¨ª las decisiones las tomamos entre todos¡±. ¡°S¨ª¡±, interviene Guerrero; ¡°lo bueno es que participa en todo y no se molesta si hay alguna decisi¨®n err¨®nea porque tambi¨¦n es suya¡±.

Pero ya hay dos frases que definen a Piqu¨¦ en su oficina y que los trabajadores digieren para orientarse. ¡°Molt b¨¦ nanus [muy bien chicos]¡¯ es que va bien la cosa; ¡®Quiero esto para el pr¨®ximo sprint¡¯ ¨Cporque trabajamos con objetivos (sprints) cada 15 d¨ªas- es que hay que apretar¡±, explica Punt¨ª. ¡°Y bien que aprieta¡±, bromea Marc Piqu¨¦, en tercero de ADE; ¡°pero es que ¨¦l tambi¨¦n es muy exigente consigo mismo¡±. As¨ª lo ve Punt¨ª: ¡°Nos contagia su acentuada competitividad¡±.

Resulta que Piqu¨¦ se rige por una frase que ley¨® una vez del empresario y multimillonario Warren Buffet. ¡°Era algo as¨ª como nunca inviertas en un negocio que no puedes entender, pero ves hasta el final en lo que creas¡­¡±, cuenta. Y a?ade: ¡°Es una ¨¦poca en que los bancos no dan cr¨¦ditos y la gente con iniciativa se acerca a los futbolistas que, por fortuna, cobramos grandes sueldos. Yo soy emprendedor, pero soy precavido en lo que invierto¡±. De hecho, cada semana le llueven varias ofertas que las estudia su s¨¦quito, compuesto por su representante, su padre y Guerrero. Tiene, sin embargo, Kerard holding (inversiones inmobiliarias); Kerard Project (de inversiones e imagen) y Kerard Games, la ¨²ltima y revolucionaria empresa. ¡°?Y no veas lo que juego a esto!¡±, exclama entusiasmado.

¡°Hay que superar los 10 millones de usuarios, cifra de la competencia¡±, dice el futbolista

No es raro que llame a Guerrero a altas horas de la noche para contarle una idea o, como el jueves pasado, para felicitar al grupo de WhatsAap que han creado por lograr el r¨¦cord de altas en un d¨ªa, que se cifr¨® en 6.000. ¡°El juego est¨¢ a¨²n en fase BETA (se presupone que la versi¨®n oficial saldr¨¢ sobre marzo), al 40% de lo que debe, pero queremos ser los l¨ªderes de nuestro segmento¡±, se?ala Punt¨ª. ¡°Nuestra misi¨®n es estar por encima de los 10 millones de usuarios¡±, ahonda Guerrero. ¡°Esa es la cifra de la competencia y hay que mejorarla¡±, corrige Piqu¨¦. ¡°De momento, ya se juega en 200 pa¨ªses y se han vendido ingots ¨Cque son como unos lingotes de oro que da beneficios y privilegios en el juego y en la vida de m¨¢nager- en 160¡±, apostilla Guerrero. Y tienen por el momento como compa?eros de viaje a Nike (patrocinador del futbolista) y Coca-Cola, dos de las mayores multinacionales.

Con la receta del c¨®ctel lista, la startup de Piqu¨¦ tiene como objetivo que en el primer semestre de 2014 la partida de ingresos sea mayor que la de gastos. ¡°Aunque en tres meses debemos crecer un 25% la plantilla¡±, subraya Guerrero. ¡°Por eso lanzamos el mensaje en Facebook, porque necesitamos gente y porque s¨¦ que puedo llegar a mucha gente a trav¨¦s de las redes sociales¡±, cuenta Piqu¨¦. Un proyecto, en cualquier caso, que ya ha tenido tres tanteos de compra. ¡°Pero no he creado la empresa para sac¨¢rmela de encima, sino que quiero aprender m¨¢s y saber todo el proceso¡±, reflexiona Piqu¨¦; ¡°soy un culo inquieto y no puedo estar todo el d¨ªa tirado en el sof¨¢ viendo la tele. Mi talento es el f¨²tbol y gracias al Bar?a puedo expresarme, pero s¨¦ que la carrera solo dura unos a?os¡±. As¨ª que no pierde detalle de las estad¨ªsticas y cifras que arroja la pantalla digital de usuarios. Y cuando se contabilizan 100.000 nuevos, trae una botella de cava para sus empleados. ¡°Cuando alcancemos el mill¨®n habr¨¢ que hacer algo grande¡±, susurra Gerard. Nada raro. Todo lo hace a lo grande.