Alejandro Sanz: ¡°Las empresas deben tener un compromiso social importante¡±

Que Alejandro Sanz es uno de los cantantes espa?oles de mayor ¨¦xito internacional es bien sabido. Lo demuestran sus m¨¢s de 20 millones de ¨¢lbumes vendidos a lo largo de su carrera. Tambi¨¦n es conocido su compromiso con el medioambiente, una conciencia verde que le llev¨® el pasado verano hasta el ?rtico con Greenpeace para denunciar el deterioro de la zona glacial e incluso hasta la Casa Blanca, donde le arranc¨® al presidente estadounidense Barack Obama un compromiso para su conservaci¨®n. Ahora el cantante ha querido unir la m¨²sica y el compromiso social en su nueva firma de moda.

Alejandro Sanz y su esposa, Raquel Perera, han citado este lunes a los medios en Madrid para presentar su ¨²ltimo proyecto: una colecci¨®n de ropa. ¡°Hemos tardado dos a?os en prepararla. La idea surgi¨® a ra¨ªz de mi ¨²ltima gira [La m¨²sica no se toca]. En el escenario quieres estar c¨®modo, sentirte bien¡­ as¨ª que apostamos por dise?ar el vestuario nosotros¡±, cuenta el cantante a EL PA?S. La primera colecci¨®n de Rosas&Beats la componen 25 camisetas para hombre y mujer en las que no faltan los motivos musicales. Y alguna incluye la leyenda ¡°Mr.Sanz¡±, algo que al cantante le resulta gracioso.

La pareja no ha estado sola en su nueva iniciativa. En la creaci¨®n han contado con el asesoramiento de un director creativo y algunos amigos como Iker Casillas, Sara Carbonero, Neymar o Paco Le¨®n que se han puesto tambi¨¦n a dise?ar camisetas, que saldr¨¢n a la venta pr¨®ximamente.

¡°Hemos apostado por el dise?o y la moda. Es m¨¢s serio de lo que parece. No es solo un cantante que se lanza a dise?ar camisetas, est¨¢ hecho por profesionales¡±, matiza Alejandro Sanz. ¡°La colecci¨®n ha surgido de la propia creatividad de Alejandro, ya que, a pesar de los cientos de camisetas que le ofrecen los estilistas, ninguna le termina de gustar; a todas les sobraba o faltaba algo¡±, explic¨® Raquel Perera.

Esta primera colecci¨®n se ha fabricado completamente entre Espa?a y Portugal. ¡°En estos momentos las empresas deben tener un compromiso social importante, y por eso nos hemos querido comprometer con la industria textil espa?ola y con los derechos de los trabajadores¡±, asegura el cantante.

Con la idea del ¡°cumplir la cuota siempre con el compromiso con los dem¨¢s¡±, el 20% de los beneficios de la venta de las camisetas ser¨¢n destinados a la ONG Save the Children y a sus programas para combatir la pobreza y la exclusi¨®n infantil en Espa?a. ¡°M¨¢s adelante queremos trabajar con otras ONG y llevar a cabo otros proyectos, como por ejemplo dar ropa en los colegios que lo necesiten¡±, anuncia el artista, que est¨¢ compaginando su trabajo en la industria de la moda con la composici¨®n de un nuevo disco. ¡°Tengo ya 40 canciones¡±, dice.

Las camisetas (que se venden por 49,95 euros) podr¨¢n adquirirse en Europa, Estados Unidos, Canad¨¢, Australia y 19 pa¨ªses de Am¨¦rica Latina solo a trav¨¦s del portal de compras online eBay. La manera m¨¢s econ¨®mica y f¨¢cil de llegar al mayor n¨²mero de posibles compradores asegura el artista.

Esta primera entrega es solo el aperitivo de una colecci¨®n mayor que saldr¨¢ a la venta en oto?o/invierno. ¡°Ser¨¢ cien por cien artesanal y vanguardista. No se parece a esta primera colecci¨®n¡±, describe Perera sobre la futura l¨ªnea, que incluir¨¢, tambi¨¦n, zapatos y joyas.

A punto de ser padre por segunda vez junto a Raquel Perera ¡ªuna de las camisetas de la colecci¨®n dejaba ver a la perfecci¨®n su avanzado estado de gestaci¨®n¡ª, su firma tambi¨¦n planea lanzar en los pr¨®ximos meses prendas para ni?os. Con la llegada al mundo de Alma, que nacer¨¢ en Madrid, donde la pareja reside la mayor parte del tiempo tras pasar varios a?os instalada en Miami, el cantante se convertir¨¢ en padre por cuarta vez ¡ªtiene dos hijos de otras relaciones¡ª. La pareja ya tiene experiencia como compa?eros de trabajo. Ella fue su ayudante antes que su esposa. ¡°El matrimonio en s¨ª ya es un trabajo de dos¡±, dice el camtante dejando escapar una carcajada. ¡°Lo cierto es que estamos acostumbrados a trabajar juntos, y sabemos d¨®nde empiezan y acaban las responsabilidades de cada uno¡±.