Orgullo de poder ser diferentes
Cinco razones para participar en las fiestas del movimiento homosexual
Como cada a?o, el 28 de junio se celebra mundialmente el D¨ªa del Orgullo LGTB (lesbianas, gais, transexuales y bisexuales). Las principales ciudades espa?olas engalanan sus calles con los colores de la bandera arco¨ªris y durante horas la m¨²sica, los disfraces, la reivindicaci¨®n, las risas, las pancartas, protagonizan la jornada. La marcha del Orgullo m¨¢s importante de Europa es la que se celebra en Madrid ¡ªeste a?o ser¨¢ el s¨¢bado 5 de julio¡ª con m¨¢s de un mill¨®n y medio de participantes.
Las fiestas del Orgullo LGTB son controvertidas. A algunos les gustan, a otros no. Incluso tiene detractores dentro del mismo colectivo LGTB, que alegan que no ayuda a la normalizaci¨®n, que no se sienten identificados entre las plumas, disfraces y desnudos. Pero la verdad es que la fiesta del Orgullo es mucho m¨¢s que eso. Aqu¨ª tenemos cinco razones por las que debemos seguir celebr¨¢ndolo:
1.?Porque tenemos mala memoria. Porque es una fiesta que conmemora la consecuci¨®n de unos derechos que hemos debido luchar uno por uno. A las lesbianas, a los gais, a los bisexuales y a los transexuales, nada se nos ha dado de manera gratuita.
El que no estemos encerrados en una cl¨ªnica psiqui¨¢trica, ni recibiendo descargas el¨¦ctricas en la cabeza, el que no estemos obligados a casarnos con alguien de otro sexo en contra de nuestra voluntad, el que podamos ser no heterosexuales practicantes y no seamos condenadas a pasar a?os en la c¨¢rcel, el que podamos leer libros y ver pel¨ªculas de tem¨¢tica l¨¦sbica y gay sin que est¨¦n prohibidos, el que estemos legalmente protegidos si somos discriminados, el que podamos casarnos con la persona de la que estamos enamorados y tener hijos, el que no seamos inhabilitadas para ocupar cargos p¨²blicos ni diversos trabajos. El que podamos vivir como vivimos parece obvio pero no lo es.
Ha costado a?os de manifestaciones, creatividad, esfuerzo y visibilidad. Vidas y malos momentos. Para dar gracias, y no a Dios, sino que a todas esas y esos activistas que siguen intentando que nuestra vida sea mejor, m¨¢s completa y m¨¢s justa.
2. Porque tenemos que estar orgullosos. Y no solo por ser lesbiana, ser gay, bisexual o transexual, sino por la forma en que hemos llevado la vida. No es f¨¢cil ser diferente. No es f¨¢cil sentir que lo que pasa dentro de ti no se parece a lo que le sucede a las ni?as y ni?os que te rodean. Mirar a todos lados y no encontrar referentes. Ver que la mayor¨ªa de los libros y de las pel¨ªculas acaban con el amor de un hombre y una mujer. No es f¨¢cil crecer y aguantar la presi¨®n. La forma en que te vistes, la forma en que llevas el pelo. Los novios, las conquistas, el sexo, el amor. No es f¨¢cil ser diferente, ser un adolescente que piensa que quiz¨¢s no hay nadie como ¨¦l y, aun as¨ª, atreverse a declarar su amor a otro chico. Tampoco es f¨¢cil decir a tus padres y a tu familia que no ser¨¢s lo que ellos esperaban que fueras.
Es necesario sentirse orgulloso. Porque a veces ha sido dif¨ªcil. Ha dolido. En ocasiones no te han entendido, te han acusado de decepcionar, incluso han llorado por ti. Has visto gente alejarse, volver.
No es f¨¢cil ser diferente. Sentir a¨²n las miradas en el metro, en la calle, cuando besas a tu pareja o le das la mano. Porque ser lesbiana, gay, bisexual o transexual no es solo un aspecto m¨¢s de tu vida. Es algo que ha condicionado tus peque?as batallas y tus grandes victorias.
3. Porque a¨²n se criminaliza la homosexualidad en 77 pa¨ªses del mundo, con leyes que van desde la reclusi¨®n, la cadena perpetua, hasta la pena de muerte. Porque muchos j¨®venes LGTB siguen quit¨¢ndose la vida por miedo. Porque el lema 2014 del Orgullo en Espa?a es ¡°Nos manifestamos por todos aquellos que no pueden¡±.
4. Porque todos los que estamos en Espa?a, y sobre todo en Madrid, tenemos la oportunidad de asistir a la marcha del Orgullo LGTB m¨¢s importante de Europa y una de las m¨¢s importantes del mundo. Y esto tampoco ha sido f¨¢cil de conseguir. La de 1993 cont¨® con algo m¨¢s de 500 participantes. Al a?o siguiente casi se lleg¨® a los mil, muchos de ellos disfrazados para evitar ser reconocidos. En 1996, cuando el C¨®digo Penal ya proteg¨ªa como un derecho fundamental la orientaci¨®n sexual, la marcha del Orgullo congreg¨® a m¨¢s de 3.000 personas que gritaban ¡°visibilidad¡±. Apareci¨® la primera carroza y se sumaron otras ciudades como Barcelona, Sevilla, Bilbao y Valencia.
Las victorias pol¨ªticas fueron sumando asistentes. Hasta que en 2005, con el derecho al matrimonio reci¨¦n aprobado, las calles de Madrid vieron desfilar a m¨¢s de un mill¨®n y medio de personas.
5.?Porque en estos tiempos de tantos recortes y derechos truncados, de injusticias y p¨¦rdida de libertades, es bueno celebrar y festejar los derechos que a¨²n tenemos y que defendemos d¨ªa a d¨ªa. Es bueno demostrar que nada ni nadie nos har¨¢ retroceder, que hay armarios que se han cerrado y lo han hecho para siempre.
Mar¨ªa Jes¨²s M¨¦ndez es directora de M¨ªraLES Magazine y de Oveja Rosa.
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