Pir¨¢mides hacia la extinci¨®n
WWF Adena muestra el tr¨¢fico ilegal de especies en extinci¨®n que existe tras algunos productos
Naci¨® en Australia, pero sirve para cualquier parte del mundo. En ingl¨¦s se llama Stop the trade: Stop one, stop them all (en castellano "Det¨¦n el comercio: si paras a uno, paras a todos") y se trata de una iniciativa de la organizaci¨®n ecologista WWF, que pretende mostrar a los consumidores qu¨¦ hay detr¨¢s de los productos que llegan a sus manos: una cadena de personas que de forma ilegal est¨¢n comerciando con especies y creando un impacto negativo sobre la biodiversidad. "Se trata de poner en valor la tremenda fuerza de la capacidad de decisi¨®n que tenemos a la hora de consumir", explica Luis Su¨¢rez, responsable del programa de especies de WWF Espa?a.
La idea ha sido materializada gracias a uno de los publicistas m¨¢s reconocidos internacionalmente: Leo Burnett. Juntos han ideado una escalofriante campa?a que tiene una doble misi¨®n: fomentar acuerdos entre los gobiernos de distintos pa¨ªses para que regulen el comercio de productos derivados de animales, como los cuernos de los rinocerontes, y presionar para que se tomen medidas contra los que hacen poco o nada para detener esta pr¨¢ctica ilegal. "Una gran parte de este comercio es legal y no da?a a las poblaciones silvestres", explica Darren Grover, gerente de especies de WWF Australia. "Sin embargo, una gran proporci¨®n es ilegal y amenaza la supervivencia de muchas especies en peligro de extinci¨®n como los rinocerontes, tigres, elefantes, orangutanes y otros".
La campa?a se ha limitado a la publicaci¨®n y difusi¨®n de tres montajes fotogr¨¢ficos. Cada una de ellos exhibe una pir¨¢mide humana que simboliza la cadena por la que pasa toda mercanc¨ªa ilegal. Se utilizan como ejemplo las pieles de tigre, los cuernos de rinoceronte y la carne de tibur¨®n.
En la que corresponde a los escualos, vemos a cuatro ejemplares abiertos en canal y muertos en el suelo de lo que parece ser un puerto mar¨ªtimo. Est¨¢n a los pies de otros cuatro pescadores, sus verdugos, que a¨²n portan machetes cubiertos de sangre. Sobre sus hombros, tres comerciantes de colmillos y huesos de tibur¨®n sostienen con orgullo las piezas obtenidas de estos animales. Sobre ellos, otra vez, un par de cocineros que sostienen ollas, presumiblemente con una sopa realizada con la aleta del animal que, en ¨²ltimo t¨¦rmino, arriba del todo, se come un se?or con total tranquilidad, quiz¨¢ ignorante de la cadena que termina en ¨¦l: el consumidor final.
Cada a?o, cientos de millones de animales son capturados en su medio natural y las distintas partes de su cuerpo son luego vendidas como alimento, art¨ªculo de lujo o de decoraci¨®n, remedio natural o souvenir. Incluso son vendidos vivos como animales dom¨¦sticos. WWF busca impactar en el consumidor final, explicarle que, si falla el ¨²ltimo eslab¨®n de la cadena, es decir, ¨¦l mismo, el resto de la pir¨¢mide caer¨¢. Si no hay demanda, se detendr¨¢n estas pr¨¢cticas.
El trabajo ha de realizarse en los tres pelda?os de la pir¨¢mide: punto de matanza, transporte y venta. La primera se refiere a aquellos pa¨ªses que no cuentan con una protecci¨®n efectiva para sus animales; en ellos se debe reforzar la protecci¨®n y la conservaci¨®n. Luego, esos animales son transportados a otros lugares; en ellos se deben controlar mejor las aduanas y la normativa existente para evitar el tr¨¢fico de mercanc¨ªa. En los pa¨ªses donde se compran estos productos, por ¨²ltimo, hay que intentar atajar la demanda, un elemento muy fuerte. "Si no se hubiera producido una demanda del cuerno de rinoceronte en Vietnam, donde se cree que puede curar el c¨¢ncer, no habr¨ªa ning¨²n problema con estos animales", asegura Su¨¢rez.
Los peor parados
- Tigres: WWF Adena denuncia que quedan 3.200 ejemplares en todo el mundo. Hay algunas subespecies muy amenazadas y la tendencia va a la baja. El consumo se produce sobre todo por la demanda que existe de pieles, cabeza y garras como elementos decorativos y tambi¨¦n porque algunas de sus partes internas son utilizadas como remedio en la medicina china.
- Tiburones: Hay un gran mercado porque la aleta de tibur¨®n es muy utilizada en la cocina japonesa. Las especies peque?as y medianas son las m¨¢s amenazadas: se pescan, se les corta la aleta y, en muchas ocasiones, el animal es devuelto al mar sin esa parte de su cuerpo.
- Rinocerontes: Viven una situaci¨®n dram¨¢tica desde hace dos a?os y medio, cuando se dispar¨® su mortalidad debido a la caza ilegal. Solo en 2013 fueron abatidos m¨¢s de mil ejemplares de manera furtiva, pero en WWF creen que podr¨ªan ser m¨¢s. Esta escalada se debe, sobre todo, a que hace un par de a?os se puso de moda en Vietnam la creencia de que el cuerno de rinoceronte cura el c¨¢ncer.
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