Por qu¨¦ James Rodr¨ªguez es el modelo del nuevo jugador del Real Madrid
Independientemente de sus valores futbol¨ªsticos, el colombiano encarna todo lo que Florentino quiere en los gal¨¢cticos del futuro
En alg¨²n momento entre sus dos mandatos como presidente del Real Madrid, Florentino P¨¦rez debi¨® pararse a pensar qu¨¦ hab¨ªa hecho mal y qu¨¦ hab¨ªa hecho bien. Mir¨® a su ¨ªntimo Zinedine Zidane y lleg¨® a la conclusi¨®n que, en un colectivo tan entregado a las personalidades volubles como es el de los futbolistas, lo mejor era gastarse los cuartos en fichajes lo m¨¢s parecidos a Zizou posible: talentosos, s¨ª, pero con la discreci¨®n por bandera. A partir de ahora, debi¨® pensar, fichar¨ªa gal¨¢cticos, pero con los pies en la Tierra. A partir de ahora, dicho de otra forma, James Rodr¨ªguez (C¨²cuta, 1991) es el modelo perfecto del neogal¨¢ctico merengue que se nos viene encima.
Elegancia sin estridencias
Entre el Beckham que se present¨® en el palco del Real Madrid en 2003 como escapado de un cap¨ªtulo de Corrupci¨®n en Miami, con una bl¨¦iser azul pastel, la camisa desabotanada y su rubia melena a mechas recogida en una coleta, y la de ayer de James Rodr¨ªguez, con su riguroso negro y corbata estrecha, hay todo un cambio est¨¦tico. En un genial art¨ªculo en este diario, el paisano de James Santiago Roncagliolo se despachaba a gusto con los diferentes peinados de Cristiano durante el Mundial: ¨¦l (y Sergio Ramos, que va por libre), parecen ser los ¨²nicos que tienen el pl¨¢cet para arriesgar estil¨ªsticamente. El resto de estrellas de la plantilla fichadas recientemente (Modric, Bale, Carvajal, Kroos o el mismo James), destacan por sus escasas ganas de llamar la atenci¨®n fuera de los terrenos de juego. La personalidad de James, t¨ªmido por naturaleza y por la tartamudez que sufri¨® de peque?o, se adapta como un guante a esta categor¨ªa de futbolista en la que englobar¨ªamos a glorias merengues como Butrague?o o Zizou.
Buen entallado
Vale que Gareth Bale tal vez tenga las orejas demasiado grandes para seg¨²n qu¨¦ gusto, pero es considerado un icono de la elegancia t¨ªpico de Saville Row en las Islas. La belleza siempre es algo subjetivo y discutible pero, cuando una actriz como Sof¨ªa Vergara y una estrella del pop como Rihanna te piropean, es que tienes ese algo que ayuda a vender m¨¢s camisetas. La primera colg¨® una foto del muchacho con siete corazoncitos (ni uno m¨¢s ni uno menos); la segunda, desatada durante todo el campeonato escribi¨® ¡°Colombiaaaa. Cuadrado y Rodr¨ªguez. Murdaahh¡±, y posteriormente: ¡°???Rodr¨ªguez!!! ?Solo es un beb¨¦!¡±. M¨¢s all¨¢ de las cosas de RiRi, Florentino necesitaba a James porque James viste Adidas, la misma marca que el Real Madrid y que uno de sus m¨¢ximos competidores, el Manchester United. En el equilibrio de poder entre los gallitos del f¨²tbol internacional, hacerse con la principal estrella emergente de tu firma deportiva importa, y mucho.
Estabilidad sentimental
Se acab¨® el m¨ªtico priv¨¦ del Buddha Bar y las ni?eras a lo Rebeca Loos de turno. Claro est¨¢ que, alguna vez, pillan a un Benzema a toda pastilla, pero no es la norma y ya ni siquiera Cristiano revienta Ferraris minutos despu¨¦s de haberlos comprado como hac¨ªa en Manchester. Quiz¨¢s por la muerte de su esposa Pitina (Mari ?ngeles Sandoval) hace dos a?os, Florentino P¨¦rez valora cada vez m¨¢s que los jugadores que aterrizan en el Real Madrid tengan pareja y fuertes v¨ªnculos familiares. Cierto es que, hoy en d¨ªa, cualquier club de f¨²tbol tiene en cuenta la vida fuera de los terrenos de juego a la hora de realizar una inversi¨®n tan importante por un jugador, pero no lo es menos que en el Real Madrid es algo que se valora especialmente. No es casualidad que, ayer, una de las instant¨¢neas fuera la del presidente con James¡ y su se?ora, a la que pidi¨® en matrimonio con solo 17 a?os y que, para m¨¢s inri, es hermana del guardameta de la selecci¨®n colombiana, David Ospina.
Religiosidad
Uno de los primeros gal¨¢cticos de la segunda etapa del florentinato fue Kak¨¤. Aunque desesperaba a los aficionados y no estuvo a la altura de lo que se pag¨® por ¨¦l, siempre fue uno de los ni?os mimados de la zona noble del Bernab¨¦u. El dirigente blanco apreciaba en ¨¦l, especialmente, esa religiosidad por la cual afirmaba haber llegado virgen al matrimonio y que era tan del agrado de una persona con fuertes v¨ªnculos con los jesuitas. James, en ese sentido, parece clavadito al brasile?o: afirma que todo lo que ha conseguido en la vida se lo debe al alt¨ªsimo y reconoce siempre que puede su devoci¨®n cat¨®lica y eso, claro, a Florentino le pone (y mucho).
Expansi¨®n internacional
Como empresa multinacional que se precie, Florentino tiene claro que el Real Madrid siempre debe estar atento a cuidar nuevos mercados. Si en su nuevo mandato lleg¨® con la m¨¢xima de ¡°la espa?olizaci¨®n de la plantilla¡±, esta temporada, posiblemente, toca ¡°la sudamericanizaci¨®n¡± de la misma, con James Rodr¨ªguez y Keylor Navas. Perdidas Brasil y Argentina, entregadas como est¨¢n a las estrellas del Barcelona Neymar y Messi, buenas son Colombia y Costa Rica, especialmente si tenemos en cuenta que se trata de econom¨ªas emergentes¡ y la cantidad de ¡°cafeteros¡± que habitan en Espa?a, alrededor de unos 800.000 seg¨²n Colombia Dane.
Expansi¨®n mercantil
Los cr¨ªticos de Florentino siempre dicen, a sus espaldas, que sus fichajes gal¨¢cticos responden a intereses m¨¢s all¨¢ del terreno de juego. O lo que es lo mismo: que el club y la empresa del presidente se retroalimentan de manera poco clara. As¨ª, seg¨²n las malas lenguas, el dinero desembolsado por Illarramendi se justificar¨ªa por las futuras obras de remodelaci¨®n del Estadio de Anoeta y el del d¨ªscolo traga-donuts Cassano, por los intereses de ACS en Italia (una versi¨®n m¨¢s rocambolesca de esta ¨²ltima operaci¨®n afirma que se realiz¨® por consejo de su amiga Raffaella Carr¨¤). La presencia del Embajador de Colombia en la presentaci¨®n de James parece corroborar esta intuici¨®n: si James no viene con un par de contratas debajo del brazo, ayudar¨¢ a conseguirlas.
La guinda
?Qu¨¦ puede resultar m¨¢s interesante para un ingeniero que tener tema de conversaci¨®n¡ con otro ingeniero? Una de las facetas m¨¢s desconocidas de James reside, precisamente, en que realiza estudios de ingenier¨ªa en la universidad a distancia. El detalle que necesitaba para convertirse, desde el primer momento en la ni?a bonita del todopoderoso mandatario merengue.
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