Reforma fiscal, mujeres y familias
El cambio tributario favorece a personas con empleo, no a las m¨¢s necesitadas
La reforma fiscal de 2014 supondr¨¢ una p¨¦rdida de recaudaci¨®n de 9.000 millones de euros, que se distribuir¨¢n entre todas las personas actualmente contribuyentes para ¡°aumentar su renta disponible¡±. Un aumento generalizado, y por tanto peque?o, que no cambiar¨¢ la vida de las personas actualmente contribuyentes, pero que s¨ª supondr¨¢ una merma en los recursos disponibles para atender a las personas que m¨¢s lo necesitan: familias sin ning¨²n ingreso, personas dependientes que ahora no acceden a los servicios p¨²blicos, personas sin atenci¨®n sanitaria, criaturas sin acceso a una escuela de educaci¨®n infantil, etc.
Como siempre que disminuyen los recursos disponibles para protecci¨®n social, las mujeres saldr¨¢n especialmente malparadas por varias razones: en primer lugar porque son un alto porcentaje de las personas sin ingresos suficientes y de otros colectivos desfavorecidos, como familias monoparentales o personas mayores que viven solas. En segundo lugar porque son mujeres las personas que suplen en la familia la falta de atenci¨®n p¨²blica de las necesidades de cuidado. En tercer lugar porque la mayor¨ªa de las personas empleadas en los servicios p¨²blicos son mujeres, por lo que los recortes implican siempre una gran p¨¦rdida de empleo femenino.
Todos estos factores de mayor pobreza y precariedad femenina son consecuencia de la actual estructura social vertebrada por la familia ¡°sustentador masculino/esposa dependiente¡±, en la que las mujeres se especializan en el cuidado familiar y los hombres en el empleo. Esta es la ¡°tradici¨®n¡± pero familias hay muchas m¨¢s y todas deber¨ªan importar. As¨ª que la pregunta es: ?qu¨¦ hay espec¨ªficamente de pol¨ªtica familiar en esta reforma fiscal? ?Qu¨¦ familias se atienden y qu¨¦ tipo de familia se promueve? ?Cu¨¢les son las consecuencias para las personas, y en particular para las mujeres?
Ser¨ªa m¨¢s simple y justo establecer prestaciones universales por descendientes con independencia del nivel de renta
Las novedades anunciadas en pol¨ªtica familiar son dos. La primera ¡°un fuerte aumento de los m¨ªnimos familiares por hijos, ascendientes y personas con discapacidad a cargo¡±, que en su mayor¨ªa ¡°tendr¨¢n un aumento superior al 25%¡±, seg¨²n la Nota de Prensa de Moncloa. Pues bien, haciendo los c¨¢lculos no se ve ese incremento. Por ejemplo el m¨ªnimo por el primer descendiente aumenta de 1.836 a 2.400 euros, efectivamente un 31%. Pero esa no es la desgravaci¨®n real: teniendo en cuenta que el tipo impositivo que se aplica a esas cantidades es de un 24,75% en 2014 y pasar¨¢ a ser de un 19% en 2016, la desgravaci¨®n real, o disminuci¨®n de la cuota a pagar por la persona contribuyente, aumentar¨¢ en 1,6 euros (de 454,41 a 456 euros).
Tengamos en cuenta tambi¨¦n que la franja inferior de rentas excluidas de estas desgravaciones se ensancha, precisamente porque el m¨ªnimo exento ser¨¢ mayor; y para esas rentas excluidas no se prev¨¦n prestaciones por descendientes. En lugar de estas desgravaciones que cada vez excluyen a m¨¢s personas, precisamente a las m¨¢s necesitadas, ?cu¨¢nto m¨¢s simple y justo ser¨ªa establecer prestaciones universales por descendientes independientes del nivel de renta! Esta no es ninguna propuesta novedosa sino la pr¨¢ctica habitual en los pa¨ªses m¨¢s avanzados en pol¨ªtica social, por ejemplo todos los pa¨ªses n¨®rdicos.
La segunda novedad en pol¨ªtica familiar, que tendr¨¢ m¨¢s importancia cuantitativa para las familias afectadas, es que se crean tres nuevas deducciones: para familias con hijos dependientes con discapacidad; para familias con ascendientes dependientes; y para familias numerosas. Cada una de estas desgravaciones ascender¨¢ a 100 euros al mes o, si esta segunda cantidad es inferior, al total de las cotizaciones a la Seguridad Social del contribuyente y de su empleador; y tambi¨¦n se podr¨¢ cobrar como prestaci¨®n. O sea, funcionar¨¢ como la actual desgravaci¨®n/prestaci¨®n para las madres trabajadoras con hijos menores de tres a?os, con la diferencia de que en este caso el contribuyente no tendr¨¢ que ser mujer.
Desgravar por la declaraci¨®n conjunta perjudica el empleo femenino
?A quienes se aplicar¨¢n estas nuevas deducciones y qu¨¦ efectos tendr¨¢n? Dar¨¢n derecho a estas deducciones dos tipos de contribuyentes: personas empleadas que tengan a su cargo una familia numerosa; y personas empleadas que acojan a una persona dependiente (ascendiente o descendiente), siempre que los ingresos de la persona dependiente sean inferiores a 8.000 euros anuales. No afectar¨¢n, pues, a las personas dependientes que vivan solas o con familiares desempleados, ni a las familias numerosas cuyo progenitor o progenitores est¨¦n desempleados.
En resumen, estas nuevas desgravaciones/prestaciones no son precisamente para las personas m¨¢s necesitadas de atenci¨®n a la dependencia o de un ingreso m¨ªnimo. Si aumentamos el zoom e imaginamos qu¨¦ tipo de familia se beneficiar¨¢, veremos una familia con m¨¢s de dos criaturas o con al menos una persona dependiente (o con las dos condiciones). Veremos tambi¨¦n a una persona con empleo. ?Qu¨¦ m¨¢s? O bien veremos mucho dinero para comprar servicios de cuidado en el mercado, que no se compran con esos 100 euros mensuales por cada una de las circunstancias citadas, o inevitablemente nos encontraremos con una cuidadora familiar informal, o sea una mujer cuidando las 24 horas.
Hasta aqu¨ª las novedades de la reforma fiscal respecto a la familia. Pero hay m¨¢s: la reforma mantiene la desgravaci¨®n por declaraci¨®n conjunta. Curiosamente, tanto el Anteproyecto como el Gobierno y la Comisi¨®n de Expertos se han cuidado de no aludir a la existencia de esta desgravaci¨®n a pesar de que, con la reducci¨®n de la desgravaci¨®n por rendimientos del trabajo, pasar¨¢ a ser el mayor gasto fiscal del IRPF. Si es una desgravaci¨®n a la familia, ?c¨®mo es posible este olvido? Muy sencillo: porque nadie contradice hoy en d¨ªa que esta desgravaci¨®n es regresiva y proporciona un incentivo adverso a la participaci¨®n laboral de las mujeres casadas. Es decir, otro incentivo m¨¢s al mismo tipo de familia ¡°sustentador masculino/esposa dependiente¡±.
En resumen, ni Hacienda somos todos y todas ni por esta reforma nos aproximamos a serlo.
Mar¨ªa Pazos Mor¨¢n es investigadora del Instituto de Estudios Fiscales, autora del libro Desiguales Por Ley y una de las promotoras del Llamamiento urgente ante la reforma fiscal que prepara el Gobierno
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.