Marmato, oro en 35 mil¨ªmetros
Un documental relata la lucha de una comunidad colombiana contra una multinacional minera que amenaza con destruir sus hogares
En Marmato, el oro se desliza por las calles. Los 9.000 habitantes de este pueblo colombiano ¡ªubicado sobre una monta?a que esconde alrededor de 15 mil millones de euros de este mineral precioso seg¨²n la compa?¨ªa en litigio en la zona, Gran Colombia Gold¡ª lo ven rodar en una mezcla de barro l¨ªquido y brillante. Como no se saca del cerro en lingotes sino en una mezcla de piedra, tierra, plata, plomo y arena, en el proceso de filtraci¨®n adquiere la apariencia de un lodo de tonalidades tornasoladas que, muchas veces, se escapa entre las grietas de las m¨¢quinas. As¨ª llega, fugitivo, a pasear por los empinados senderos de este peque?o municipio de Caldas. Para el distra¨ªdo puede parecer cemento. Para el curioso ¡ªque se agacha y se acerca y observa con atenci¨®n¡ª es un tesoro en el que se alcanzan a ver diminutas part¨ªculas que resplandecen. El trabajo del minero exige paciencia, mucha paciencia. Pasan d¨ªas antes de que pueda ver ese revuelto de materiales que saca del socav¨®n convertido en el polvo luminoso que permite que cientos de personas en el mundo brillen con la luz prestada de sus joyas.
Todo gira en torno al oro en Marmato. Las minas quedan a unos metros de las casas de los mineros. Los molinos ¡ªdonde se hacen los procesos de filtraci¨®n del mineral¡ª se ubican, redundantes, uno al lado del otro y trabajan las 24 horas del d¨ªa. Y los locales de joyer¨ªas y de compraventa de polvo dorado se encuentran aqu¨ª y all¨¢. Deber¨ªa ser una regi¨®n pr¨®spera, pero no lo es. Hay polvo por todas partes, de tantos senderos destapados. Se respira, se saborea, se mete en los ojos y enceguece. Al final del d¨ªa, todos llegan a casa con las u?as negras de tierra, como si no hubieran salido de una mina. Pero no, la tierra esta en el aire. Como la corrupci¨®n, la fragilidad de la legislaci¨®n, el poder de las grandes empresas mineras y la desidia de los pol¨ªticos.
Se trata de un pueblo en el que solo hay una panader¨ªa, una droguer¨ªa y dos restaurantes. Nada tiene este territorio de la opulencia que circula por los eventos en los que se lucen las lujosas joyas que surgen de estas monta?as. "Si quiere tocar el oro de Marmato ¡ªdice el minero tradicional Johan Bola?os¡ª, t¨®queme a m¨ª. La riqueza de este pueblo est¨¢ en su gente". Y s¨ª. Aparte de la calidez y la valent¨ªa de las personas que lo habitan, y de un paisaje de monta?as alucinantes, este pueblo es humilde y gris.
El cineasta independiente y reportero gr¨¢fico norteamericano Mark Grieco lleg¨® a este pueblo minero acunado en una monta?a, tambi¨¦n conocido como el "Pesebre de Oro", en el a?o 2006. Por los azares del destino, Mark toc¨® suelo marmate?o justo cuando la empresa Medoro Resources ¡ªfundada con capital canadiense y luego llamada Gran Colombia Gold¡ª apareci¨® en el pueblo con la amenaza de comprar t¨ªtulos mineros para luego desalojar la monta?a y as¨ª poder explotar el oro a cielo abierto: rompiendo la roca por capas, de arriba para abajo. Esta situaci¨®n pendular de los marmate?os en el precipicio de la oportunidad y la destrucci¨®n ante los intereses de una enorme empresa minera motiv¨® a Grieco para realizar un retrato ¨ªntimo de este lugar y su gente, Marmato. El documental graba la vida de una serie de habitantes del pueblo y su lucha por preservar la vieja manera de vida y hacer frente a la llegada de las operaciones de miner¨ªa a gran escala.
Y as¨ª, el documental Marmato de Mark Grieco ¡ªestrenado en el Festival de Sundance de 2014¡ª y la organizaci¨®n sin fines de lucro Ambulante se cruzaron en el camino. Fundada en 2005 por Gael Garc¨ªa Bernal, Diego Luna, Pablo Cruz y Elena Fortes, se dedica a apoyar y difundir el cine documental como una herramienta de transformaci¨®n cultural y social. Ambulante viaja a lugares que cuentan con poca oferta de exhibici¨®n y formaci¨®n en cine documental con el fin de crear una audiencia participativa, cr¨ªtica e informada, y abrir nuevos canales de expresi¨®n y reflexi¨®n. "Nos guiaba la idea de poder devolver las historias a sus protagonistas, a los lugares que las inspiraron, y generar puntos de encuentro y reflexi¨®n con ese p¨²blico", explica Elena Fortes, directora general de Ambulante.
Los premios de Marmato
- Reconocido por el Festival de Cine Ambiental de Yale como ganador del premio a mejor historia ambiental.
- En el Festival Internacional de Cine de Ashland 2014 gan¨® el premio a mejor edici¨®n.
- En el Festival Internacional de Cine de Seattle 2014 se le otorg¨® el gran premio del jurado al mejor documental.
- Ha sido reconocido en el FICCI 2014 como mejor documental, mejor pel¨ªcula Colombiana y ganador del premio del p¨²blico a la mejor pel¨ªcula.
Documentales que transforman
La pregunta que viene a colaci¨®n es ?por qu¨¦ el g¨¦nero documental? "Los documentales retratan las pesadillas y sue?os de los protagonistas de ciertos hechos, pero se trata de un espectro en el cual los hechos no pueden describir lo que verdaderamente sucede", responde Gael Garc¨ªa Bernal. En cuanto a los objetivos, Camilo Corredor, codirector de Ambulante Colombia, apunta que la meta es "promover la integraci¨®n social y la generaci¨®n de escenarios de reflexi¨®n y sensibilizaci¨®n frente al mundo que nos rodea a trav¨¦s del cine". Como la propia organizaci¨®n comenta, "en Ambulante nos dedicamos a difundir el cine documental como una herramienta de transformaci¨®n cultural y social; dentro de nuestros objetivos esta poder llevar pel¨ªculas a diferentes contextos y a diversos p¨²blicos".
Para la realizaci¨®n de Marmato, Grieco iba y ven¨ªa. Hac¨ªa de tripas coraz¨®n y aceptaba frustrantes proyectos publicitarios en Nueva York para reunir el dinero para regresar a Colombia. "Hasta que un d¨ªa supe que ten¨ªa que quedarme en Marmato ¡ªcuenta el director con un espa?ol impecable¡ª. No pod¨ªa perderme de nada, ten¨ªa que estar presente en lo que vendr¨ªa, as¨ª que lo dej¨¦ todo y me vine". Lleg¨® solo con su c¨¢mara y un desaf¨ªo.
"La gente en un principio se sinti¨® recelosa ¡ªcuenta Ruby Ardila, vecina de Marmato¡ª. Ten¨ªan miedo de que Mark formara parte de la compa?¨ªa. Estaba en todas partes y no sab¨ªamos para qui¨¦n filmaba. Luego supimos que no ten¨ªa malas intenciones". Mark comenta al respecto: "No quer¨ªa que fuera un documental demasiado pol¨ªtico ni demasiado dram¨¢tico. Quer¨ªa, adem¨¢s, que tuviera im¨¢genes bellas y una fuerza simb¨®lica". As¨ª logr¨® una producci¨®n equilibrada, cercana y humana, en la que los mineros dan a conocer c¨®mo defienden su dignidad y su medio de subsistencia.
Un cambio de conciencia
Con las u?as negras llegaron los organizadores del festival cinematogr¨¢fico Ambulante Colombia a descansar, despu¨¦s de pasar el d¨ªa montando una sala de cine en Marmato, donde la ¨²nica diversi¨®n que se encuentra a la mano consiste en darles a unas bolas de billar y brindar con unas cervezas. Adecuaron una pantalla gigante en medio de la cancha de Montecarlo y llenaron el espacio con sillas de pl¨¢stico para que la mayor cantidad de habitantes asistiera a la proyecci¨®n del documental.
A los organizadores del festival les faltaban manos, pero les sobraban ganas as¨ª que, despu¨¦s de tener listo ese cine improvisado, recorrieron el pueblo ¡ªde arriba para abajo y de abajo para arriba¡ª anunciando que la funci¨®n empezar¨ªa a las siete y media de la tarde. Esperaban que los 9.000 marmate?os se enteraran del evento y que todos fueran. Los fondos para financiar el festival vinieron del sector p¨²blico, la empresa privada e intercambios con otras compa?¨ªas. "Las embajadas han sido un apoyo fundamental a la hora de financiar las invitaciones a los directores y productores que acompa?an la gira", indica Camila Guti¨¦rrez, coordinadora de comunicaci¨®n de Ambulante Colombia.
Cuando lleg¨® el gran d¨ªa de la proyecci¨®n, las familias de los protagonistas hicieron acto de presencia con sus atuendos m¨¢s elegantes. Empezaron a o¨ªrse comentarios. Hubo debate ¡ªy esa era la idea¡ª. "A m¨ª me gust¨® mucho, pero siento que al documental le falt¨® mostrar m¨¢s detalles de nuestra lucha y nuestros derechos, alega Mario Tangarife, l¨ªder de la Asociaci¨®n de Mineros Tradicionales de Marmato. "Hemos vivido momentos muy complejos y violentos, y Marcos estuvo ah¨ª. Hay abusos de Gran Colombia Gold que no mencion¨®". A lo cual Camilo Pach¨®n ¡ªuno de los organizadores de Ambulante¡ª respondi¨®: "Si lo hubieran hecho as¨ª, no lo habr¨ªan presentado en muchos lugares. Una de las cosas m¨¢s valiosas que tiene el documental es que no est¨¢ en pro de los mineros ni en pro de la compa?¨ªa, no tiene una visi¨®n sesgada".
"No creo que la sociedad se transforme por ver una pel¨ªcula pero, definitivamente, enriquece su percepci¨®n y eso ya es un primer paso para generar un cambio de conciencia. A trav¨¦s de los contenidos que exhibimos buscamos entretener, cambiar percepciones y colocar sobre la mesa algunos temas que consideramos muy relevantes y que, probablemente, no ocupan un lugar prioritario en la agenda pol¨ªtica o medi¨¢tica", coment¨® Elena Fortes.
Despu¨¦s de ver el documental, el pueblo era otro. M¨¢s unido, m¨¢s l¨²cido, m¨¢s despierto. Eso buscaban Grieco y Ambulante Colombia: abrir los ojos de la gente, llamar la atenci¨®n, estimular la acci¨®n.
Festival de documentales Ambulante Colombia:
Bogot¨¢ (hasta el 31 de agosto), Medell¨ªn (3 al 7 de septiembre), Barranquilla (9 al 12) y Cartagena (17 al 21).
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