Ra¨²l Ar¨¦valo: divino comediante
Vers¨¢til en la gran pantalla, quiere mostrar sus otras caras fuera de ella. Ya prepara el salto a la direcci¨®n y la producci¨®n de su primer largometraje.
"?Ra¨²l? Fue un descubrimiento ins¨®lito. En dos sentidos: porque es un actor capaz de hacer cualquier personaje que le ofrezcas, con verdad; y porque es un pegamento que une a los grupos. Es un t¨ªo de puta madre. No s¨¦ muy bien c¨®mo definirlo m¨¢s all¨¢ de decirte que me gustar¨ªa volver a trabajar con ¨¦l¡±. Quien habla as¨ª de Ra¨²l Ar¨¦valo (M¨®stoles, Madrid, 1979) no es su director fetiche, Daniel S¨¢nchez Ar¨¦valo ¨Csin relaci¨®n familiar, a pesar de la coincidencia del apellido¨C, con el que ha trabajado en los cuatro largometrajes del realizador; ni su (pen)¨²l??timo director, Alberto Rodr¨ªguez, con el que ha hecho una obra maestra, La isla m¨ªnima; ni alguno de sus amigos del alma, como Antonio de la Torre, otro int¨¦rprete del clan S¨¢nchez Ar¨¦valo que tambi¨¦n trabaja en el nuevo thriller de Rodr¨ªguez¡ Ni es su abuela o sus padres.
No. Es el mism¨ªsimo Antonio Banderas, que le dirigi¨® en El camino de los ingleses y que recuerda a Ar¨¦valo con much¨ªsimo cari?o. ¡°Creo mucho en ¨¦l. Lo escog¨ª sin saber qui¨¦n era, mont¨® tal pollo en la prueba que inmediatamente lo fichamos. No me extra?a que quiera dirigir, porque tiene vista y porque le tiene mucho cari?o a la actuaci¨®n, algo fundamental para un realizador¡±. Ar¨¦valo no solo tiene tres pel¨ªculas en el pr¨®ximo festival de San Sebasti¨¢n (al cierre de esta edici¨®n se planteaba la posibilidad de una cuarta), es para muchos cr¨ªticos el Sean Penn espa?ol ¨Cpor parecido f¨ªsico y por talento¨C y ya ha ganado casi todos los premios posibles como actor. Es que desde hace unos a?os le ha picado el gusanillo de la escritura y la direcci¨®n y est¨¢ intentando levantar la producci¨®n de su primer largometraje. De ah¨ª la respuesta de Banderas, otro actor que se pas¨® detr¨¢s de las c¨¢maras, que sabe bien de la dureza del reto de ese paso. Ar¨¦valo idolatra a Banderas, pero el malague?o no se queda atr¨¢s en su cari?o al madrile?o.
A Ar¨¦valo es complicado encontrarle alg¨²n enemigo. Y ha conocido su profesi¨®n en todos los niveles. Como ¨¦l mismo recuerda, tras debutar al final de la serie televisiva Compa?eros, se tuvo que ganar la vida trabajando en un Ikea o promocionando zumos en grandes superficies: ¡°Era extra?¨ªsimo. Tuve diez meses de trabajo, empec¨¦ a firmar aut¨®grafos, y cuando se acab¨® volv¨ª al d¨ªa a d¨ªa de currito. Me hab¨ªa independizado y como quer¨ªa hacer teatro experimental, cosas distintas, me toc¨® apechugar mientras con trabajos temporales. En fin, que me ve¨ªas diciendo a los clientes: ¡®?Usted conoce el zumo de fibras? Es que tiene estas ventajas, bla, bla, bla¡¯, y las chicas me respond¨ªan: ¡®Eres el de Compa?eros. ?Me puedes firmar un aut¨®grafo?¡¯. Me hac¨ªa la cabeza cortocircuito¡±. Cuatro a?os y medio m¨¢s tarde, lleg¨® AzulOscuroCasiNegro. ¡°Sin que nadie la viera film¨¦ El camino de los ingleses y ?Por qu¨¦ se frotan las patitas?, y de repente ten¨ªa tres estrenos seguidos. Fue un golpe de suerte¡±.
Antonio Banderas: "No me extra?a que quiera dirigir, porque tiene vista y le tiene mucho cari?o a la actuaci¨®n, fundamental para un realizador".
Hace no demasiado calor en Madrid a finales de julio. El actor ha llegado a la entrevista preparado para irse por la tarde a la piscina, aunque las nubes le empujan a la duda. Est¨¢ fibroso, musculado. ¡°He perdido peso y se nota el gimnasio, ?eh?¡±. D¨ªas m¨¢s tarde se fue de vacaciones antes de encarar un septiembre de promoci¨®n intensa, tras un rodaje ultrarr¨¢pido. La filmaci¨®n es Hablar, de Joaqu¨ªn Oristrell, un reto may¨²sculo en el cine espa?ol, un largometraje rodado en un ¨²nico plano secuencia a finales de agosto en el barrio madrile?o de Lavapi¨¦s, con multitud de actores ¨CJuan Diego Botto, Antonio de la Torre, Marta Etura, Secun de la Rosa, ?lex Garc¨ªa, Sergio Peris-Menchetta y as¨ª hasta cuarenta¨C, y que al cierre de esta edici¨®n no ten¨ªa confirmada su presencia en el festival de San Sebasti¨¢n. Y despu¨¦s del certamen de Donostia, donde el primer fin de semana, el del domingo 21, presentar¨¢ La isla m¨ªnima, el thriller de Alberto Rodr¨ªguez en el que encarna a uno de los dos polic¨ªas enviados desde Madrid a investigar en los meandros del Guadalquivir los asesinatos de un pederasta, y todo esto en el posfranquismo, cuando algunos agentes de la ley no eran virtuosos justicieros y ocultaban siniestros pasados¡ como el resto de la sociedad. A mitad del festival se le podr¨¢ ver en Negociador, de Borja Cobeaga, donde aparece en un peque?o papel, y mientras ese viernes 26 llega a las salas La isla m¨ªnima, Ar¨¦valo retornar¨¢ a San Sebasti¨¢n con Murieron por encima de sus posibilidades, el filme que Isaki Lacuesta ha estado rodando estos dos ¨²ltimos a?os. ¡°Tengo much¨ªsimas ganas de ir a San Sebasti¨¢n, porque nunca he estado en el festival¡±. Pues se va a hartar, acabar¨¢ levantando un campamento base en una suite del hotel Mar¨ªa Cristina, epicentro glamuroso del evento. Aunque su ulterior deseo, poder salir a disfrutar de la gastronom¨ªa, lo tiene m¨¢s complicado: la promoci¨®n no da tanto respiro como para op¨ªparas comidas. ¡°Pues ser¨¢ en las cenas¡±, responde tajante. Parece dif¨ªcil llevarle la contraria cuando algo se le cruza por la cabeza.
Todo esto parte de alguien que se define como t¨ªmido, casi de forma patol¨®gica en su infancia. De padres que nada tienen que ver con la profesi¨®n, sino que poseen un bar en el barrio madrile?o de Chamber¨ª, el Krug, una cervecer¨ªa alemana con comedor en dos plantas, que ofrece comida germana y espa?ola, y en el que nada recuerda al actor. ¡°Si estreno pel¨ªcula, mi padre me pide alg¨²n p¨®ster para colgarlo all¨ª, pero no, no hay una urna con premios o algo as¨ª [risas]. Tambi¨¦n se nota ah¨ª la crisis, toma claro. Yo este a?o he hecho dos pel¨ªculas en cooperativa, con las gordas ya no se cobra ni la mitad que antes, as¨ª que imag¨ªnate en la barra. El cine que m¨¢s me gusta a m¨ª, el de autor o de versi¨®n original, ser¨¢ cada vez m¨¢s minoritario, con lo que se har¨¢ menos, se cobrar¨¢ menos participando en ¨¦l. Este proceso extra?o de crowdfunding y cooperativas, que a veces est¨¢ bien y a veces no tan bien [volveremos a este reproche m¨¢s tarde], empujar¨¢ a que el cine no sea tan negocio como pod¨ªa ser hace d¨¦cadas. En el bar hablo con gente que a¨²n se cree que nos lo llevamos crudo en subvenciones, que un actor como yo ya se ha comprado dos casas ¨Cni una¨C. S¨ª soy consciente de que yo en los ¨²ltimos a?os sigo ah¨ª, que he rodado con Almod¨®var [Los amantes pasajeros], que he hecho una serie de televisi¨®n [Con el culo al aire], que puedo hacer esas pel¨ªculas sin casi cobrar porque gano lo suficiente con otras. O que puedo compaginar todo eso con teatro¡±.
Entre sus ¨²ltimas experiencias divertidas est¨¢ la improvisaci¨®n sobre un escenario, en concreto en el teatro Capitol. ¡°Carlos Areces [su compa?ero en Los amantes pasajeros] me pregunt¨® si hab¨ªa posibilidades de que hiciese el rid¨ªculo, yo le contest¨¦ que muchas, y claro, all¨¢ que se present¨® a re¨ªrse de m¨ª¡±. La obra, #FirstTeatroTuits, oblig¨® al actor a improvisar el 11 de julio sobre tuits publicados en tiempo real, y se grab¨® para emitirse en la cadena Comedy Central. En el teatro ya hab¨ªa trabajado con Animalario. ¡°Pero esto me ha enganchado, es curioso, he repetido. Me gusta contar historias¡±.
Ar¨¦valo es de enlazar frase tras frase. Va hilando su discurso sin importarle incluso meterse con algunos productores, a los que les reprocha ¡°aprovecharse de la crisis¡±. ¡°Como muchos otros empresarios de otros sectores, algunos ¨Cinsisto en algunos, no todos, porque por suerte yo trabajo con los buenos¨C se agarran a la crisis para bajarte el sueldo aunque ellos sigan con los mismos beneficios. Te piden que te aprietes el cintur¨®n mientras ves c¨®mo en su caso no cambian su ritmo de vida. Pues o todos o ninguno¡±. Curiosamente, para alguien de M¨®stoles, sin relaci¨®n familiar con el cine, que veraneaba en el peque?o pueblo natal segoviano de sus padres, casi todas sus relaciones actuales est¨¢n imbricadas en esta industria. Su novia es la tambi¨¦n actriz Alicia Rubio, y su hermana, Tamara, es sonidista (Promoci¨®n fantasma, [REC] 4, El Ni?o). ¡°Curioso, porque ninguno apunt¨¢bamos de peque?o eso. A mi padre le gusta el cine ¨Ces cin¨¦filo medio, no de Truffaut pero s¨ª de cl¨¢sicos americanos¨C y nos llevaba de peque?os. No me acuerdo de mi primera pel¨ªcula, que ¨¦l dice que es Superman II, porque la vi con tres a?os, pero s¨ª recuerdo ya E. T., el extraterrestre, que fue un par de a?os despu¨¦s. Y en casa, Conan el b¨¢rbaro y Cocodrilo Dundee. Yo era el socio 131 del videoclub Iris, un fan de las pelis de Bruce Lee. Con el tiempo empec¨¦ a ver otras cosas, me engancharon otros cines. Y acab¨¦ estudiando, tras un a?o en la carrera de Historia, en la escuela de Cristina Rota¡±. Ahora todo lo ve en la distancia, tras un goya por Gordos y otras tres candidaturas, confiando ciegamente en Daniel S¨¢nchez Ar¨¦valo, ¡°mi apoyo, el primero al que le paso mis cosas, le consulto todo¡±.
"Un actor puede que opine alguna vez, pero un pol¨ªtico te representa, est¨¢ ah¨ª todos los d¨ªas. Nos las cuelan a todos. Somos muy est¨²pidos"
Alberto Rodr¨ªguez cree que Ar¨¦valo ¡°aporta energ¨ªa, porque encima tiene sus aspiraciones ulteriores, lo que le hace ser muy muy atento, en el rodaje me planteaba preguntas de nota¡±. El sevillano apunta: ¡°Tiene algo que contar, y eso es mucho cuando te planteas la direcci¨®n, y creo que sabe c¨®mo contarlo¡±. Ambos han llevado carreras paralelas, y se conocen desde hace tiempo, aunque no hab¨ªan trabajado juntos. Hasta La isla m¨ªnima. As¨ª responde el aludido: ¡°Alberto Rodr¨ªguez ha hecho algo muy especial. Porque es un thriller de atm¨®sferas cargadas, que coge un guion estupendo, que otros directores hubieran resuelto bien y hubieran hecho algo result¨®n, y le da su vuelta. Y suma, y sin perder entretenimiento rueda un thriller de autor. Yo creo mucho en eso, en que tenemos que ofrecer algo local para venderlo universal. A los estadounidenses les compramos True detective y eso que m¨¢s del Misisipi, m¨¢s americana, no se puede ser. Y la gente de la calle insiste en que el tr¨¢iler de La isla m¨ªnima mola porque parece americana. Creo que se enga?an, que les gusta ver cosas en las que se reconoce, y pienso en las series espa?olas de la tele, en el ¨¦xito de El tiempo entre costuras o El pr¨ªncipe o en pel¨ªculas como Ocho apellidos vascos, en que se enganchar¨¢n a La isla m¨ªnima porque tambi¨¦n habla de c¨®mo ¨¦ramos y a¨²n somos como sociedad¡±. A Ar¨¦valo le entristece cierta involuci¨®n audiovisual en Espa?a. ¡°F¨ªjate en el taquillazo en 1984 que fue Los santos inocentes, una de mis pel¨ªculas favoritas. Recuerdo a mis padres, a mis t¨ªos, hablando de este drama como un filme popular. Ahora cuando les recomiendo alguna pel¨ªcula, tras verlas me sueltan: ¡®S¨ª, estaba bien, pero un poco lenta, ?no?¡±. Si hoy recuperaran los t¨ªtulos que tanto idolatran, no s¨¦ yo qu¨¦ dir¨ªan [risas]. Estoy convencido de que Los santos inocentes hoy ganar¨ªa los mismos premios en Cannes, tendr¨ªa las mismas buenas cr¨ªticas merecidas¡ y no la ver¨ªa ni dios. Pues todo eso hay que aceptarlo, luchar por cambiarlo en la medida de lo posible, pero saber que es as¨ª. Hay muchos debates que plantearse en la educaci¨®n¡±.
Ar¨¦valo vuelve al Krug, al bar familiar que lleva 18 a?os abierto, y que a ¨¦l le sirve para charlar con gente muy distinta. ¡°Hubo un tiempo en que mi padre me prohibi¨® ir. Porque yo me encend¨ªa cuando alguien me soltaba que si los goya por aqu¨ª, que si el cine espa?ol por all¨¢. Casi he llegado a pegarme. Se me ha pasado, lo miro m¨¢s relajado. Ahora me dicen: ¡®Los actorcillos esos, bla, bla, bla, las pel¨ªculas espa?olas, bla, bla, bla¡¯, aguanto tres minutos y s¨¦ hacia d¨®nde van a ir: ¡®Oye, ?no conocer¨¢s t¨² al Luisma o a sus compis de A¨ªda? Es que me parto con ellos¡¯. ?Pues chaval, si es que son los mismos los del cine y los de la tele! Me fascina lo que emboba la tele. Respeto las cr¨ªticas, pero esos comentarios que nacen de personas de cualquier clase social, son fruto de campa?as medi¨¢ticas manipuladoras y no de reflexiones serias. Yo en la barra del Krug testo a la gente, veo que atacan a, por ejemplo, los vestidos de las actrices en las galas ¨Ccasi siempre, prestados¨C cuando en cambio votan a pol¨ªticos que viven en sus chalets, que se mueven en la clase alta, que ni siquiera huelen el sufrimiento econ¨®mico, lo jodido que es llegar a fin de mes para ese que habla. Y un actor puede que opine alguna vez, pero un pol¨ªtico te representa, est¨¢ ah¨ª todos los d¨ªas. Es tremendo. Nos las cuelan a todos. Somos muy est¨²pidos¡±.
Su futuro pasa por la direcci¨®n, es m¨¢s, su calendario est¨¢ subordinado a ese salto. ¡°Cuando yo era cr¨ªo, mi padre se compr¨® una c¨¢mara y casi la us¨¦ yo m¨¢s. Imag¨ªnate: gore, explosiones¡ Mi pasi¨®n por la actuaci¨®n en realidad se basa en contar historias, en dirigir¡±. No quiere avanzar mucho de ese guion, que est¨¢ en fase de encontrar apoyo televisivo para levantar la producci¨®n y que si puede rodar¨¢ en oto?o. ¡°Es un drama con algo de thriller, muy madrile?o. ?Protagonistas? Luis Callejo y Antonio de la Torre. Personajes adultos, porque me cuesta escribir papeles de mi edad. Ah¨ª estoy, esperando. Es mi gran sue?o¡±.
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