La Casa Blanca se sube a la pasarela
Michelle Obama re¨²ne en la residencia presidencial a dise?adores y estudiantes
De icono a icono, Anna Wintour entreg¨® el podio a Michelle Obama tras declarar que la mujer del presidente de EE UU era una fuente de inspiraci¨®n para ella, la gran dama de la moda en t¨¦rminos period¨ªsticos. Sin sus cl¨¢sicas gafas oscuras pero su inconfundible melena, Wintour dijo que ¡°la moda era un poderoso instrumento de cambio social¡± y lo dijo en la Casa Blanca, no en la Semana de la Moda de Nueva York, de Par¨ªs o Mil¨¢n.
La primera dama se convirti¨® ayer en la primera dama de la moda y por primera vez abri¨® las puertas de la residencia presidencial a un taller de dise?o al que asistieron 150 estudiantes de instituto y que fue impartido por algunas de las figuras m¨¢s destacadas del firmamento de la moda, desde la consagrada Digane Von Furstenber o Mar¨ªa Cornejo hasta Prabal Gurung o Jason Wu.
¡°Lo que hace la gente de ¨¦xito es no dejarse amedrentar por los miedos, no dejar que les gu¨ªe el temor a fracasar¡±.
Mostrando unos b¨ªceps que ya son famosos en las cr¨®nicas period¨ªsticas, Michelle Obama abandon¨® por un d¨ªa el eterno tema del que ha hecho su bandera y dej¨® de un lado la alimentaci¨®n y el sobrepeso ¨Ca pesar de que se sirvi¨® una comida durante el taller- para poner el foco en una industria que mueve al a?o miles de millones de d¨®lares.
Obama, como hizo Wintour, despoj¨® a la moda de su lado ¡°poco serio¡± o fr¨ªvolo para declarar ante la audiencia que asisti¨® al taller educacional, que el proceso de crear un vestido o unos zapatos es algo m¨¢s importante y profundo que las alfombras rojas por las que se pasean luciendo modelos los famosos o las pasarelas a las que solo acceden los grandes nombres ¨Cya sean dise?adores o modelos-. ¡°Lo que vemos es el fruto de un largo y dif¨ªcil proceso que embarca muchos aspectos de una industria que incluso incluye a la agricultura¡±, explic¨® la primera dama en referencia a los tejidos y materiales necesarios para crear vestimentas y calzados.
En su habitual tono distendido y did¨¢ctico, la se?ora Obama dio la bienvenida a los estudiantes que asistieron al taller y les habl¨® de los desaf¨ªos que encontraran en el camino que han decidido emprender, una senda que estar¨¢ plagada de esfuerzo, dedicaci¨®n e incluso fracaso antes que de ¨¦xitos. ¡°La f¨®rmula para triunfar es bien simple: educaci¨®n y trabajo duro¡±, declar¨® Obama.
¡°Prepararos para fracasar¡±, advirti¨® la primera dama, ¡°no tem¨¢is los riesgos ni los fallos¡±, prosigui¨®. ¡°Lo que hace la gente de ¨¦xito es no dejarse amedrentar por los miedos, no dejar que les gu¨ªe el temor a fracasar¡±, explic¨®. As¨ª fue como la chilena Mar¨ªa Cornejo o la norteamericana Sara Blakely lograron triunfar, ¡°sin importarles que les rechazaran o las pusieran en duda¡±. Si Cornejo se sinti¨® ¡°una excluida¡± por ser una emigrante cuya familia se exili¨® en Inglaterra durante la dictadura de Pinochet, Blakely no tir¨® la toalla mientras trabajaba para una empresa de fax y las compa?¨ªas rechazaban su idea, la famosa ¡®faja m¨¢gica¡¯ conocida como Spanx. ¡°Faja que todas llevamos¡±, introdujo en un gui?o de complicidad Michelle Obama.
¡°Todos vosotros pertenec¨¦is a este lugar, a la Casa Blanca, recordar este d¨ªa cuando teng¨¢is un rev¨¦s, cuando fracas¨¦is, porque todo el mundo se ha puesto en duda a s¨ª mismo alguna vez, incluyendo yo misma¡±, reconoci¨® una mujer de ¨¦xito, que creci¨® en uno de los barrios m¨¢s pobres de Chicago y hoy es m¨¢s popular que su marido, el presidente de EE UU.
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