As¨ª es la 'drag queen' que se enfrent¨® a Facebook y gan¨®
La travesti m¨¢s famosa de San Francisco ha forzado a la mayor red social a cambiar su pol¨ªtica para el mundo entero
Sister Roma tiene un nombre como directora de arte de porno gay y como monja de la peleona Hermandad de la Perpetua Indulgencia. Tiene un nombre como presentadora de su propio programa de testimonios en Internet y como activista a favor de la libertad sexual. Es el nombre de la drag queen que lleva siendo 30 a?os y de una de las cabezas m¨¢s visibles de la comunidad LGTB de California. Pero para Facebook, la carism¨¢tica Sister Roma seguir¨¢ llam¨¢ndose Michael Williams porque eso es lo que figura en su carnet de conducir. La red social le notific¨® a mediados de septiembre que su cuenta ser¨ªa suspendida si no utilizaba su nombre legal, bas¨¢ndose en su pol¨ªtica de privacidad. Y Facebook no ten¨ªa ni idea entonces de con qui¨¦n se hab¨ªa topado. ¡°Si le preguntas a alguien c¨®mo me llamo, dentro o fuera del mundo de las drags, te dir¨¢ que soy Roma. As¨ª es c¨®mo me identifico. Roma es mi nombre REAL¡±, responde Roma por correo electr¨®nico, as¨ª, con may¨²sculas incluidas.
Cuando Facebook le oblig¨® a identificarse en la red social con su nombre legal, Roma inici¨® una cruzada que comenz¨® con el hashtag #myrealnameis
Cuando recibi¨® el formulario, Roma inici¨® una cruzada que comenz¨® con el hashtag #myrealnameis y que en poco tiempo dio la vuelta al mundo. Asegura que ha recibido cientos de correos de usuarios de la red que tienen miedo. ¡°Me dicen que si se ven obligados a revelar su identidad, tendr¨¢n que hacer frente a la discriminaci¨®n, violencia o acoso¡±. Su voz ha sonado tan alto, que Facebook acept¨® reunirse con una representaci¨®n de la comunidad LGTB y uno de los city supervisors de San Francisco, David Campos. ¡°No es solo una cuesti¨®n de la comunidad gay. Llevo semanas escuchando todo tipo de quejas¡±, explica el supervisor en conversaci¨®n telef¨®nica. ¡°Desde mujeres maltratadas, hasta profesores que no quieren que les vean sus alumnos o transexuales que est¨¢n en proceso de cambiar de sexo y a¨²n no han legalizado su nueva identidad¡±.
Pues bien, tras solo unas semanas de protestas y dos encuentros, el propio jefe de producto de Facebook, Chris Cox, compareci¨® a principios de mes ante los medios para pedir disculpas por los fallos de su sistema y anunci¨® un cambio para comprobar la autenticidad de las identidades. ¡°Esa pol¨ªtica no se corresponde con la realidad. A Charlie Sheen (cuyo verdadero nombre es Carlos Irwin Est¨¦vez), no le cierran la cuenta¡±, apunta Campos.
Si le preguntas a alguien c¨®mo me llamo, dentro o fuera del mundo de las drags, te dir¨¢ que soy Roma. As¨ª es c¨®mo me identifico. Roma es mi nombre REAL Sister Roma, por e-mail (may¨²sculas incluidas)
?Qui¨¦n es esta drag que ha hecho dar un paso atr¨¢s al todopoderoso Facebook? Un car¨¢cter rotundo y determinante, un profundo sentido del humor y una arrolladora seguridad en s¨ª misma son las cualidades que le han permitido convertirse en una de las figuras clave de la comunidad LGTB. Roma, de 51 a?os, lleg¨® a San Francisco en 1985, reci¨¦n licenciada, o licenciado en aquella ¨¦poca, cuando todav¨ªa era solamente Michael. Una noche de copas una figura ¨C¡°una mezcla entre una monja y un payaso¡±, seg¨²n Roma¨C entr¨® en el bar y deslumbr¨® a todo el personal. Se acerc¨® a saludar al amigo de Roma y tras una breve conversaci¨®n le invit¨® a unirse a la hermandad de la Perpetua Indulgencia.
?Qui¨¦n es esta drag que ha hecho dar un paso atr¨¢s al todopoderoso Facebook? Un car¨¢cter rotundo y determinante, un profundo sentido del humor y una seguridad arrolladora en s¨ª misma
La susodicha hermandad lucha por ¡°el derecho de la gente a expresar su propia belleza, usando un sentido del humor irreverente para desenmascarar las fuerzas de culpa que encadenan el esp¨ªritu humano¡±. Naci¨® hace casi 40 a?os como una asociaci¨®n l¨²dica, pero con el tiempo fue tomando un cariz reivindicativo y social. Esta organizaci¨®n ha protagonizado otras protestas como la realizada hace un a?o frente a la embajada de Rusia en San Francisco contra la pol¨ªtica hom¨®foba de aquel pa¨ªs. En esta ocasi¨®n su blanco es el gigante de las redes sociales. ¡°Este no es el fin del mundo para m¨ª, no tengo miedo de que la gente sepa mi nombre legal. Pero este asunto es mucho m¨¢s grande que yo. Lucho por aquellos que no se pueden defender por s¨ª mismos¡±, asegura. Roma se curti¨® en las mieles del liderazgo desde muy joven, como delegada de clase en el instituto.
Esa pol¨ªtica [de privacidad] no se corresponde con la realidad. A Charlie Sheen (cuyo verdadero nombre es Carlos Irwin Est¨¦vez), no le cierran la cuenta David Campos, supervisor en Ayuntamiento de San Francisco
La elecci¨®n de su nombre es un particular homenaje a la pel¨ªcula El mago de Oz porque juega con la frase there's no place like home (no hay nada como el hogar), solo que ella cambi¨® la ¨²ltima palabra por Rome. Las sisters est¨¢n presentes, con Roma a la cabeza, en todos los actos de la vida social de San Francisco y organizan numerosas galas ben¨¦ficas para recaudar fondos para asociaciones de enfermos de sida y de c¨¢ncer de mama, entre otras. En esa ciudad son unas 70, pero hay unas mil monjas en todo el mundo.
Michael creci¨® en Michigan y confiesa que desde peque?o se sinti¨® especial por ser adoptado. ¡°Hab¨ªa un ni?o que siempre se met¨ªa conmigo en la escuela, as¨ª que un d¨ªa la profesora lo puso frente a la clase y le solt¨®: ¡®Michael es especial, porque su madre lo escogi¨®. La tuya se tuvo que conformar con lo que le lleg¨®¡±. Y a?ade: ¡°Best teacher ever¡± (la mejor profesora de la historia).
Roma est¨¢ acostumbrada a ganar batallas. Un veintea?ero Michael apost¨® un verano que podr¨ªa acostarse con m¨¢s hombres que uno de sus amigos. Su tozudez y determinaci¨®n le hizo apuntar en un diario todos los encuentros sexuales de los que disfrut¨® esos tres meses. Unos relatos que su madre ley¨® l¨ªnea a l¨ªnea cuando descubri¨® aquella libreta, en la que hab¨ªa muchos detalles. La seguridad de su hijo consigui¨® que tras el sobresalto inicial de leer en primera persona m¨¢s de lo que la mayor¨ªa de los progenitores querr¨ªa leer sobre las intimidades de sus hijos, con el tiempo se convirtiera en su mayor defensora. Por cierto, ese verano gan¨® la apuesta.
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