El visionario de la sostenibilidad

Marc Jacobs, Gwyneth Paltrow y Will.i.am tienen dos cosas en com¨²n. Tres, si incluimos el pasaporte. Son estadounidenses, iconos de estilo y clientes de una marca espa?ola: Ecoalf. Especializada en prendas y complementos fabricados con materiales reciclados, en cinco a?os ha conseguido situarse a la vanguardia de la moda sostenible y hacerse un hueco dentro de la industria general. Sin adjetivos ni etiquetas. Y todo gracias a una botella de PET (un tipo de pl¨¢stico), el primer residuo que su fundador, Javier Goyeneche (Madrid, 1970) consigui¨® convertir en tejido y luego en bolso. Despu¨¦s llegar¨ªa toda una gama textil elaborada a partir de redes de pesca, neum¨¢ticos, algod¨®n posindustrial y caf¨¦. Piezas que ya se venden en 11 pa¨ªses y que comienzan a distribuirse ahora en Espa?a. Porque, en este y otros aspectos, Ecoalf ha demostrado que salirse de la norma no solo es posible sino necesario.

La facturaci¨®n en Espa?a supone el 9% del volumen de negocio de la compa?¨ªa. Su primer mercado es Estados Unidos, donde solo en un a?o y medio ha cerrado siete alianzas estrat¨¦gicas. Entre ellas, una con Gwyneth Paltrow, junto a la que han dise?ado un anorak que se agot¨® dos d¨ªas despu¨¦s de ponerse a la venta en la web de la actriz, Goop. Tambi¨¦n han realizado un tejido sostenible para Marc Jacobs, y parte de la primera colecci¨®n de Ekocycle, una marca participada al 50% por el rapero Will.i.am y Coca Cola, que busca concienciar a la sociedad sobre las bondades de lo sostenible. Este proyecto se presentar¨¢ el pr¨®ximo 5 de febrero en Harrod¡¯s, los grandes almacenes londinenses, donde el vestuario creado por Ecoalf permanecer¨¢ a la venta durante dos a?os en un espacio exclusivo de 750 metros cuadrados.

Su primer socio en EE UU no tiene nada que envidiar al gigante de los refrescos. La directora de distribuci¨®n de Apple se puso en contacto con ellos tras descubrir la marca en una p¨¢gina japonesa de coolhunters [cazadores de tendencias]. ¡°No pod¨ªamos creerlo. Nos encarg¨® una l¨ªnea de fundas para sus ordenadores, que hoy pueden encontrarse en 250 tiendas estadounidenses de la compa?¨ªa inform¨¢tica¡±, recuerda Goyeneche.

Esta colaboraci¨®n no solo les abri¨® las puertas del mercado internacional, sino que lo hizo en el momento adecuado. Era mayo de 2012 y un mes antes el empresario madrile?o hab¨ªa terminado de reunir el capital necesario para poder dar a la compa?¨ªa el impulso que exig¨ªa. ¡°En 2009, pensamos que encontrar¨ªamos tejidos sostenibles en el mercado para empezar a desarrollar nuestro concepto. Pero solo hab¨ªa telas recicladas en un 15% y con un tacto p¨¦simo. As¨ª que tuvimos que fabricar las nuestras: tres variedades de PET 100% reciclado con las que elaboramos una colecci¨®n de bolsos que nunca dejamos de vender¡±, apunta.

Despu¨¦s, Goyeneche pasar¨ªa casi tres a?os buscando proveedores, productores e inversores. Tambi¨¦n gestionando la liquidaci¨®n y venta de Fun & Basics, la marca que fund¨® con 24 a?os, y que en aquel momento atravesaba su segundo concurso de acreedores. ¡°En 2006 empezamos una expansi¨®n demasiado r¨¢pida, abriendo tiendas en locales con un alquiler de miles de euros al mes. Entr¨® un fondo de capital riesgo. Lleg¨® la crisis. Los bancos cortaron las l¨ªneas de importaci¨®n. Las ventas bajaron y nos vimos con un problema de circulante enorme¡±, resume. Lecci¨®n aprendida. Ecoalf solo cuenta con una boutique propia en Madrid, aunque est¨¢ presente en m¨¢s de 330 comercios multimarca.

Finalmente, el grupo propietario de la firma El Ni?o adquiri¨® Fun & Basics. Y el reconvertido, en esta ocasi¨®n, fue Goyeneche. Decidi¨® centrarse en la marca que hab¨ªa ideado para llevar su primera compa?¨ªa ¡°al mundo verde¡±. Su objetivo: ¡°Crear el Ferrari del reciclado¡±.

El empresario confiesa que le ¡°encantan las complicaciones¡±. Imposible negar la evidencia. Tras las botellas PET, firm¨® dos acuerdos con sendos puertos de Corea para utilizar sus redes de pesca, tejidas en nailon 6,6 ¨C¡°el mejor del mercado¡±¨C. Un material que les permiti¨® desarrollar mayor variedad de texturas para sus productos. Porque el fundador de Ecoalf insiste en que el dise?o es igual de importante que la sostenibilidad para el futuro del proyecto. ¡°Por muy bonita que sea la historia que les cuentes, la gente no va a comprar ese traje de ba?o si no les queda bien o no les gusta el color. El patr¨®n y la calidad son lo primero. Nuestra filosof¨ªa va por debajo, porque queremos competir en igualdad de condiciones con las marcas de moda, digamos, normales¡±, aclara.

Ecoalf elabora prendas a partir de redes de pesca y botellas de pl¨¢stico. Ha desarrollado tejidos reciclados para Marc Jacobs y LVMH, y el rapero Will.i.am

Para conseguirlo, ha convertido la investigaci¨®n en materiales en el motor de la compa?¨ªa. Despu¨¦s de las redes, llegar¨ªa el tratamiento del algod¨®n posindustrial ¨Cel excedente de las manufacturas¨C, y una alianza con la cadena de tiendas 7-Eleven de Taiw¨¢n para recuperar, tratar y transformar los posos de caf¨¦. Por si todo el proceso de obtenci¨®n de recursos no fuera lo suficientemente dif¨ªcil, Goyeneche ha impuesto una regla de oro que hace de la log¨ªstica otro gran reto: Ecoalf fabrica donde recicla. Y ahora lo hace en 14 pa¨ªses. De Portugal a Jap¨®n, pasando por India y M¨¦xico. Tambi¨¦n en Espa?a. En sus costas toma forma la ¨²ltima ¡°aventura¡± del empresario: recoger, clasificar y transformar los residuos del mar. M¨¢s exactamente, los restos de polipropileno (el material del que est¨¢n hechas, por ejemplo, las bandejas de fruta), PET y poletileno (bolsas) que quedan enganchados en las redes de arrastre. De momento, ya ha firmado una alianza con las cofrad¨ªas de pescadores de Levante.

¡°La nuestra no es una empresa financiera. Si analizas este ¨²ltimo plan desde un punto de vista puramente mercantil resulta obvio que no es rentable. ?Por qu¨¦ sacar el PET del mar si lo tienes en tierra? Porque nadie lo hace. Eso es Ecoalf¡±, analiza Goyeneche.

Resulta muy dif¨ªcil encontrar otra firma de moda en Espa?a ¡°que est¨¦ involucrada e invierta tanto en I+D+i¡±, seg¨²n asegura Marta Calvo Robles, miembro del departamento medioambiental del Centro Tecnol¨®gico del Calzado de La Rioja. Sabe bien de lo que habla. Ella ha sido la responsable del proyecto que Ecoalf emprendi¨® en 2012 junto a Signus, la organizaci¨®n de referencia en Espa?a dentro de la gesti¨®n de neum¨¢ticos usados. La misi¨®n consist¨ªa en fabricar chanclas a partir de ruedas viejas. Un encargo que puede parecer asequible, pero que ejemplifica el nivel de exigencia inherente a la marca . El m¨¢s dif¨ªcil todav¨ªa como lema vital y empresarial. Si hasta ese momento lo com¨²n era recuperar polvo de neum¨¢tico en un 40%, su primera meta fue hacerlo en un 75%. El modelo final de flip flops que sali¨® del centro alcanzaba el 100% y no inclu¨ªa ning¨²n tipo de aglutinante ni pegamento.

Durante m¨¢s de un a?o y medio, el equipo dirigido por Calvo y compuesto por tres personas test¨® decenas de tipos de neum¨¢ticos e implement¨® complejos procesos qu¨ªmicos hasta conseguir un producto que satisficiese los est¨¢ndares de calidad de Ecoalf y se pudiese industrializar. ¡°Una de sus premisas fue que no se notara que era reciclado: nada de grano grueso en los acabados, lo cual nos dio m¨¢s de un quebradero de cabeza. Adem¨¢s, buscaban que no pesara mucho y que no oliera a neum¨¢tico. Despu¨¦s de mucho buscar, encontramos un absorbente de aromas que incorporamos en micropart¨ªculas¡±, recuerda la investigadora. Mirando esas sencillas chanclas, nadie podr¨ªa imaginar que encierran tanto esfuerzo.

A Goyeneche le gusta decir que su m¨¦todo de trabajo es exactamente el opuesto al de Zara. Los 51 tejidos reciclados que ha creado hasta la fecha no solo tardan tiempo en desarrollarse, como las flip flops, sino en fabricarse. Mientras que para preparar la colecci¨®n de oto?o/invierno, que se presenta entre enero y febrero, un dise?ador normal no necesita comprar las telas antes de junio, en Ecoalf empiezan a trabajar en ellas con casi un a?o de antelaci¨®n.

Pero el resultado merece la pena. Su apariencia es pr¨¢cticamente imposible de diferenciar de las est¨¢ndar y compiten con las de los grandes productores ecol¨®gicos internacionales. Por ejemplo, el tejido elaborado a partir de redes de pesca tiene 20 puntadas por mil¨ªmetro, ¡°las mismas que el nailon m¨¢s fino¡±, seg¨²n el empresario. Luego no es de extra?ar que los materiales hayan terminado convirti¨¦ndose en una nueva divisi¨®n de negocio de la firma. Adem¨¢s de a Marc Jacobs, ya han vendido pa?os a la espa?ola Hoss Intropia. Incluso Louis Vuitton Mo?t Hennessy les ha encargado un tejido de botellas 100% recicladas para fabricar los saquitos que envuelven sus bolsos y zapatos. Y cuando el grupo m¨¢s grande del mundo del lujo se convierte en tu cliente, esto no puede interpretarse sino en clave positiva.

Aunque para Goyeneche siempre hay margen de mejora. Empezando por el precio. Recoger los envases de PET, almacenarlos, tratarlos, convertirlos en virutas, luego en hilo y despu¨¦s en tela, transportarla, desarrollar procesos personalizados y poner de acuerdo a los distintos actores que participan en el proyecto resulta m¨¢s caro que acudir a mayorista y comprar unos metros de algod¨®n. Los bolsos de Ecoalf cuestan en torno a 200 euros y sus abrigos, cerca de 350. ¡°Lo ecol¨®gico ha sido hist¨®ricamente caro: lo es el coche el¨¦ctrico y tambi¨¦n la comida bio. Este es uno de nuestros grandes retos¡±. Otro, producir cremalleras recicladas. ¡°Si hici¨¦semos un pedido lo suficientemente voluminoso su coste ser¨ªa asumible. Cuando una gran compa?¨ªa exija a los proveedores productos sostenibles se cuadrar¨¢n y todos nos beneficiaremos¡±.