Espa?a-Palestina. Et tu Brute?
La resoluci¨®n aprobada por el Congreso espa?ol es contraproducente
El pleno del Congreso espa?ol vot¨® este martes 18 de noviembre la iniciativa del Gobierno para reconocer al Estado palestino. ?Qu¨¦ desilusi¨®n! ?Qu¨¦ frustraci¨®n! Sobre todo para aquellos que consideramos que Espa?a e Israel mantienen "relaciones especiales¡±, v¨ªnculos hist¨®ricos de mayor peso y envergadura que hacen que las relaciones entre nuestros dos pa¨ªses no sean como las que mantenemos con ¨C digamos- Suecia (que acaba de reconocer al Estado palestino). Mencionemos solamente la iniciativa espa?ola de otorgar ciudadan¨ªa a los sefaraditas que fue tan alabada y acogida con entusiasmo por cientos de israel¨ªes. Mir¨¢ndolo desde Jerusal¨¦n, nos preguntamos: ?No comprenden all¨¢ en Madrid el da?o que crea dicha resoluci¨®n? ?Es posible que un Gobierno que aparentaba al comienzo de su mandato sostener posiciones de amistad y comprensi¨®n a Israel y al pueblo jud¨ªo, tome una iniciativa completamente pro palestina que finalmente va tambi¨¦n en detrimento del proceso de paz?
La resoluci¨®n es contraproducente, impone posiciones que solo las partes del conflicto deben adoptar y presionan injustamente solo a Israel. Reconocer el "Estado palestino" implica t¨¢citamente reconocer a Hamas -declarado por la Uni¨®n Europea "grupo terrorista"- que sigue siendo due?o y se?or en la Franja de Gaza. ?Es esa la intenci¨®n de los legisladores espa?oles? ?D¨®nde queda el frente internacional contra el terrorismo isl¨¢mico?
Espa?a, despu¨¦s de aprobar dicha resoluci¨®n pierde toda eficacia, peso pol¨ªtico e influencia internacional a ojos de Israel y se descalifica autom¨¢ticamente de cualquier rol de mediaci¨®n en nuestro conflicto. Quien adopta posiciones propalestinas -que, por tanto, impiden las negociaciones directas entre nosotros y nuestros vecinos palestinos--no puede ser tomado en cuenta por Israel como "mediador honesto¡±, con o sin asiento en el Consejo de Seguridad de la ONU.
Sepamos todos que pasos como el que acaba de dar Espa?a en nuestro conflicto -dolorosos como nos resultan- tienen un efecto pura y exclusivamente simb¨®lico. La realidad sobre el terreno no cambia en absoluto por m¨¢s "resoluciones" que se adopten.
Mientras los palestinos no abandonen la v¨ªa del terror (Ham¨¢s y sus miles de misiles sobre nuestra poblaci¨®n civil) y no acepten la presencia y existencia de un Estado Jud¨ªo viviendo al lado de un futuro Estado palestino (esto es aplicable a Mahmoud Abbas) desafortunadamente no habr¨¢ progreso real en el proceso de paz tan imprescindible para el futuro de nuestra convulsionada regi¨®n. ¡°Dos Estados para dos naciones" sigue vigente como ¨²nica soluci¨®n al conflicto pero son imprescindibles actitudes equidistantes, no prematuras, que respeten los acuerdos existentes y que traten a ambas partes con la misma medida de comprensi¨®n y ecuanimidad.
De la Espa?a de hoy esper¨¢bamos algo diferente y de ah¨ª nuestra desilusi¨®n y frustraci¨®n.
Victor Harel? es exEmbajador de Israel en Espa?a
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