El ¡®Gran Hermano¡¯ entre rejas

El ingreso de Isabel Pantoja en prisi¨®n ha supuesto tal revuelo medi¨¢tico que ni siquiera la muerte de la duquesa de Alba ha despistado la atenci¨®n de la prensa. Los periodistas han esperado pacientes durante toda la noche para ver c¨®mo la cantante entraba en la c¨¢rcel y poder as¨ª capturar las mejores im¨¢genes o instant¨¢neas, que llenen los peri¨®dicos y revistas del d¨ªa siguiente.

Cual reality show, las televisiones han mostrado im¨¢genes reales de la celda que va a ocupar durante su estancia en prisi¨®n. Sin duda, ser¨ªa un gran ¨¦xito televisivo ver como Pantoja se desenvuelve entre rejas. Verla dormir, llorar, relacionarse..., incluso podr¨ªamos nominarla o darle la inmunidad. Quiz¨¢s as¨ª nuestro morbo consiguiera saciarse.

Nos pasamos la vida quej¨¢ndonos por el trato de favor que reciben los famosos y autoridades en casos de corrupci¨®n. Y cuando por fin parece que la justicia espa?ola empieza a juzgarnos a todos con la misma ¡°varita de medir¡±, son los medios de comunicaci¨®n, impulsados por la curiosidad sin limites del p¨²blico, los que con la cobertura exagerada de la noticia resaltan, m¨¢s que nunca, las diferencias entres ellos ¡ªlos famosos¡ª y nosotros ¡ªlos mortales¡ª. Edilia P¨¦rez Guerra.