Los m¨¢rtires de la polio

La semana pasada, dos hombres armados montados en una motocicleta ametrallaban una furgoneta de la iniciativa contra la polio en Pakist¨¢n matando a cuatro de sus trabajadores. No es un ataque aislado, sino un episodio m¨¢s de la violenta oposici¨®n que sufren las campa?as para combatir esta terrible enfermedad que sigue torturando a ni?os en un pu?ado de pa¨ªses por culpa ¡ªen buena medida¡ª de esta sangrienta guerra que grupos armados le declararon a los vacunadores: en menos de dos a?os y medio han muerto asesinadas 67 personas implicadas en las campa?as contra la polio (enfermeras, empleados de la OMS, funcionarios, polic¨ªas, etc.) en Pakist¨¢n y otras 10 en Nigeria en parecidas circunstancias.

En 2012, mataron a 11 personas; en 2013, a 21; y en lo que va de 2014 ya han fallecido, generalmente a tiros, 34 trabajadores implicados en estas tareas. "Los ataques a los equipos y m¨¦dicos asociados a los trabajos contra la polio han tenido lugar con varios niveles de gravedad en el pasado. Sin embargo, los ataques organizados m¨¢s serios comenzaron en julio de 2012 y desde entonces los equipos que combaten la polio han sido v¨ªctimas de ataques violentos con regularidad", explica Ayesha Raza, responsable de la erradicaci¨®n de esta enfermedad del Ministerio de Sanidad de Pakist¨¢n. En sus documentos de trabajo, el Gobierno habla de "m¨¢rtires" de la causa.

La mayor parte de los casos que polio registrados en todo el mundo se dan en dos provincias de Pakist¨¢n

Como consecuencia, Pakist¨¢n es el ¨²nico pa¨ªs en el que el n¨²mero de casos no para de crecer: en 2013 se hab¨ªan registrado 63 a estas alturas del a?o y en 2014 ya son 260. Este pa¨ªs ha pasado de contar con uno de cada cuatro enfermos del mundo a representar m¨¢s del 80% de los casos globales. Y la mayor¨ªa se dan en dos provincias, FATA (administraci¨®n tribal) y Khyber Pakthunkhwa, lim¨ªtrofes con Afganist¨¢n, el tercer pa¨ªs junto a Nigeria en el que el virus es end¨¦mico (cuando una epidemia se mantiene a lo largo de mucho tiempo en una regi¨®n). En esas dos regiones se da el 84% de los casos pakistan¨ªes y el 82% de los asesinatos contra la vacunaci¨®n. All¨ª, casi 300.000 ni?os de menos de cinco a?os que no han recibido la vacuna est¨¢n amenazados de contagiarse.

El atentado de la semana pasada ha llevado a la huelga a los trabajadores dedicados a las campa?as de vacunaci¨®n, que son empleados por cada pa¨ªs con el apoyo de UNICEF ¡ª que suministra las vacunas, la formaci¨®n, las herramientas de las campa?as, la cadena de fr¨ªo¡ª y la OMS, que realiza el seguimiento y apoya con log¨ªstica. En total, unas 200.000 personas est¨¢n implicadas en esta iniciativa en Pakist¨¢n. Sin ellos, los planes se estancan: hace solo diez d¨ªas se hab¨ªa lanzado el objetivo de acabar con la polio al terminar 2015 y se hab¨ªa alcanzado un acuerdo con Afganist¨¢n para colaborar en la eliminaci¨®n de esta amenaza para la vida de los ni?os.

Pakist¨¢n ha exportado el virus a China, Afganist¨¢n, Siria, Irak, Israel, Gaza y Egipto. Ya est¨¢ a las puertas de Europa

El objetivo de acabar con la poliomelitis est¨¢ muy cerca desde hace tiempo: la OMS consider¨® que podr¨ªa erradicarse en 2000, luego retras¨® el objetivo a 2005 y m¨¢s tarde a 2008 y 2015. En la actualidad, sus planes pasan por librar a los ni?os de esta amenaza en 2018. Si se piensa en los 350.000 casos de 1988 que se repart¨ªan por 125 pa¨ªses, los 416 casos de 2013 parecen un peque?¨ªsimo paso hacia la erradicaci¨®n. Basta con vacunar a los ni?os para evitar que se contagien. "Claramente Pakist¨¢n es el ¨²nico pa¨ªs que en la actualidad se considera desencaminado para cumplir con los plazos. Esto se debe esencialmente a que la vacunaci¨®n a¨²n no se ha reiniciado en algunos rincones de ese pa¨ªs", explicaba Bruce Aylward, responsable de polio en la OMS, al anunciar en mayo que se declaraba una alerta mundial por el aumento de n¨²mero de casos.

Pakist¨¢n se ha convertido en un problema global porque est¨¢ exportando el virus: los ni?os que no se vacunan all¨ª han terminado llevando el problema hasta la puerta de Europa. Los casos que se dan en Afganist¨¢n provienen en su mayor¨ªa del pa¨ªs vecino. Pero Pakist¨¢n tambi¨¦n es el origen de los casos (o presencia del virus) registrados en China, Egipto, Israel, Gaza, Irak y Siria. Y cualquiera que se contagie en estos pa¨ªses puede llevar a la polio Europa, donde esta enfermedad parece una mala pesadilla del pasado, pero en la que viven 12 millones de ni?os y j¨®venes sin vacunar (80.000 menores de cinco a?os en Espa?a).

Los cinco atentados que mataron a 30 personas entre enero y marzo de este a?o obligaron a replantearse las cosas. Medidas dirigidas a garantizar la seguridad de los vacunadores, como impedir el tr¨¢fico de motocicletas en el entorno de trabajo de estas campa?as, lograron frenar las muertes durante varios meses. En su mayor¨ªa, de trata de a?adir m¨¢s efectivos policiales y militarizar m¨¢s estas vacunaciones, que muchas veces se realizan casi por la fuerza, casa por casa, en regiones en las que el uso de la fuerza por parte del Gobierno es especialmente discutido. El viernes pasado, dos de estos vacunadores recibieron una paliza en Lahore tras visitar por segunda vez una casa en busca de ni?os a los que vacunar.

En Nigeria la situaci¨®n era muy similar a la de Pakist¨¢n pero el Gobierno ha logrado atraer para la causa, con gran ¨¦xito, a los l¨ªderes religiosos y tribales

En este contexto, conviene fijarse en el caso de Nigeria, donde el virus tambi¨¦n es end¨¦mico pero en visible retroceso: han logrado reducir los 53 casos de 2013 hasta los 6 de este a?o. Y eso a pesar de una gran resistencia de l¨ªderes militares y religiosos de las incontrolables zonas del norte del pa¨ªs: en 2013, murieron 10 vacunadoras en dos ataques atribuidos al grupo fundamentalista Boko Haram. Y todo gracias a un planteamiento mucho m¨¢s sibilino: si no puedes con tu enemigo, haz que se sume a tu campa?a.

En Nigeria, las campa?as de vacunaci¨®n se enfrentaban a los mismos recelos, prejuicios, malos entendidos y da?inos bulos que en Pakist¨¢n. Uno de los m¨¢s extendidos considera que la vacuna que se deja caer en la boca de los ni?os forma parte, en realidad, de un plan para esterilizarles. Sin embargo, un astuto programa lanzado en 2010 por el Ministerio de Sanidad ha logrado tumbar muchos prejuicios. Se cre¨® un equipo de expertos, la mayor¨ªa cient¨ªficos musulmanes, para tratar de identificar los problemas para llegar a las comunidades m¨¢s recelosas. La clave estaba en los l¨ªderes tribales.

"Acercarse a los l¨ªderes religiosos a trav¨¦s de un grupo humano en el que ellos conf¨ªan y respetan result¨® ser el eslab¨®n perdido en la campa?a para la erradicaci¨®n de la polio en Nigeria", explican los responsables de esta campa?a en un estudio cient¨ªfico publicado en agosto. Ese eslab¨®n perdido era los jefes tribales, a los que ganaron para la causa. Con su apoyo, vencieron las resistencias de los m¨¢s fan¨¢ticos l¨ªderes religiosos, que pasaron de ser el mayor obst¨¢culo a un aliado inmejorable: "La influencia de los l¨ªderes religiosos en el norte de Nigeria fue enorme. En las comunidades musulmanas de Nigeria, las cu?as de radio y televisi¨®n, e incluso una pel¨ªcula usadas para la campa?a, no fueron tan poderosas como los sermones del viernes y las conversaciones posteriores a la oraci¨®n para la movilizaci¨®n de la comunidad", explican los l¨ªderes de esta campa?a.

Los l¨ªderes religiosos del norte de Nigeria han pasado de condenar las vacunas a recomendarlas en sus sermones de los viernes

En Pakist¨¢n, la situaci¨®n es m¨¢s compleja desde que la CIA decidi¨® fingir campa?as de vacunaci¨®n para dar con Osama bin Laden en?Khyber Pakthunkhwa, la misma regi¨®n que ahora sufre buena parte de los ataques contra los vacunadores. Unos meses despu¨¦s de su muerte, comenzaron los atentados, despu¨¦s de saberse que un esp¨ªa de EEUU se hizo pasar por m¨¦dico, montando una vacunaci¨®n falsa para conseguir ADN de alg¨²n familiar de Bin Laden que pudiera probar que estaba en la zona.

Este episodio complic¨® terriblemente el trabajo de los sanitarios, pero el Gobierno ha decidido seguir el ejemplo nigeriano. La v¨ªspera del atentado mortal contra esos cuatro vacunadores, el Ministerio de Sanidad anunci¨® que comenzar¨ªan las conversaciones con los l¨ªderes religiosos para tratar de atraerlos para la causa de la salud, para lograr vacunar a esos casi 300.000 ni?os sin inmunizar, seg¨²n explic¨® un responsable ministerial: "Se est¨¢ esbozando un programa integral para involucrar a los religiosos notables de las zonas rurales de forma que puedan hacer frente al rechazo", anunci¨®.