Chagas, paradigma de la inequidad en salud

La enfermedad de Chagas es una enfermedad originaria de Latinoam¨¦rica provocada por el par¨¢sito Trypanosoma cruzi (T.cruzi), que sin tratamiento se cronifica. Afecta a 10 millones de personas y alrededor de 90-100 millones m¨¢s est¨¢n en riesgo de contraerla. La enfermedad tiene un impacto econ¨®mico importante. Un estudio lo cifra en m¨¢s de 7.000 millones de d¨®lares por a?o, cifra similar o incluso m¨¢s alta que la de otras patolog¨ªas como el rotavirus o el c¨¢ncer cervical.

Enfermedad silenciosa y silenciada. Silenciosa porque la transmisi¨®n a trav¨¦s de un insecto, mayormente en ¨¢reas rurales, pasa desapercibida, ya que la mayor¨ªa de sus s¨ªntomas cl¨ªnicos iniciales son inespec¨ªficos y se confunden con otras enfermedades m¨¢s banales. Silenciosa porque cuando surgen complicaciones (card¨ªacas, digestivas, neurol¨®gicas), ¨¦stas se confunden tambi¨¦n con otras enfermedades. Silenciosa tambi¨¦n, porque en las zonas rurales los servicios de salud de muchos pa¨ªses tienen carencias. Silenciada, porque es una enfermedad ligada a la pobreza, y la pobreza se esconde, no se muestra. Silenciada incluso por la ciencia, que ha mantenido durante a?os hip¨®tesis equivocadas sobre el porqu¨¦ de la enfermedad. Silenciada porque los pobres interesan poco, est¨¢n al margen. ?Y qui¨¦n asigna recursos en los m¨¢rgenes de nuestra opulencia?

La globalizaci¨®n ha cambiado la epidemiolog¨ªa de la enfermedad de Chagas. Las migraciones han llevado a esta enfermedad a las grandes ciudades de Am¨¦rica Latina, pero tambi¨¦n a Europa y Am¨¦rica del Norte. En Espa?a se calcula que hay alrededor de 70.000 personas afectadas.

La emergencia de la enfermedad en Espa?a y Europa ha posibilitado que se hable un poco m¨¢s de ella. Sabemos que la enfermedad de Chagas es un problema de salud p¨²blica, sabemos que adem¨¢s de transmitirse a trav¨¦s de un insecto vector que no existe en Europa, el par¨¢sito tambi¨¦n puede transmitirse a trav¨¦s de la donaci¨®n de sangre, trasplante de ¨®rganos y de madres a hijos durante el embarazo o el parto.

Hist¨®ricamente se han dedicado escasos recursos para estudiar esta enfermedad o para proveer atenci¨®n m¨¦dica a los afectados. En el a?o 2012, la financiaci¨®n dedicada a la I+D en enfermedad de Chagas fue de 31,7 millones de d¨®lares, que representa solo el 1% de los fondos dedicados al conjunto de enfermedades llamadas "olvidadas".

En los pa¨ªses end¨¦micos de Am¨¦rica Latina, se han dedicado esfuerzos para el control del insecto vector. Estos programas han sido exitosos en muchas zonas. Pero requieren esfuerzos mantenidos para evitar la recolonizaci¨®n ¡ªya detectada en muchos lugares¡ª de las casas por los insectos. Sin embargo, pocos recursos se dirigen a las personas. Bastante menos del 1% de los afectados recibe atenci¨®n sanitaria y tratamiento. Para aquellos que tienen la suerte de ser diagnosticados, estamos utilizando medicamentos de hace 50 a?os, con un nivel de eficacia y tolerabilidad mediocres. S¨®lo recientemente se han iniciado ensayos cl¨ªnicos con nuevos f¨¢rmacos.

Y en Espa?a, tenemos buen control en bancos de sangre y en trasplantes; la sensibilizaci¨®n de muchos profesionales est¨¢ dando oportunidades a muchos pacientes, pero s¨®lo unas pocas comunidades disponen de programas oficiales de control de la transmisi¨®n durante el embarazo. En Espa?a y en Europa de forma silenciosa nacen ni?os infectados por el T.cruzi. La enfermedad de Chagas sigue arraig¨¢ndose en las personas a trav¨¦s de las grietas de la inequidad.

Joaquim Gascon es director de la Iniciativa contra la enfermedad de Chagas de ISGlobal y jefe de la Secci¨®n de Medicina Tropical del Hospital Cl¨ªnic de Barcelona.