La Iglesia, ante el espejo

Carta de la semana: La Iglesia, ante el espejo?

Desde mi punto de vista hay tres instituciones que no son democr¨¢ticas en su estructura y funcionamiento interno: los partidos pol¨ªticos, las federaciones deportivas y la Iglesia. Trabajo tiene el papa Francisco si quiere hacer una limpia en la jerarqu¨ªa eclesi¨¢stica espa?ola. Es imposible cambiar de la noche a la ma?ana una instituci¨®n tan anquilosada, tan conservadora, tan reaccionaria y tan politizada. Tiene buenas intenciones el Papa argentino. Que tenga suerte Bergoglio en su af¨¢n de modernizar esta antigualla. Trabajo le va a costar. Necesita imbuirse del esp¨ªritu del padre Casald¨¢liga, ir descalzo sobre la tierra roja.

Diego Moraleda Jim¨¦nez. Membrilla (Ciudad Real)

Pa¨ªs valiente

Me alegra ver que en un mismo ejemplar (21-12-2014), El Pa¨ªs Semanal publica un art¨ªculo de Ignacio Vidal-Folch lamentando que los nuevos ricos de Internet se apropien del mecenazgo de la seudociencia mientras se reduce la verdadera investigaci¨®n, otro de Jorge Carri¨®n relatando la org¨ªa de las subastas de arte mientras tanto artista malvive en el olvido y una valiente historieta de Paco Roca dejando claros los or¨ªgenes de la desigualdad econ¨®mica. En esta oscuridad de medios de comunicaci¨®n queda alguien con un peque?a lucecita que alumbra el camino.

Francisco Jorge Rodr¨ªguez Hurtado. Granada

Padres e hijos

Soy abogada de familia en ejercicio desde hace 30 a?os y desde hace 10 trabajo en un dispositivo de atenci¨®n a v¨ªctimas de violencia de g¨¦nero. He le¨ªdo con estupor la columna firmada por Berta Vias Mahou y titulada Padres e hijos (28-12-2014), aunque, lejos de referirse a esa cuesti¨®n, habla de lo malas y aprovechadas que somos las mujeres. A diferencia de la columnista, no conozco a ning¨²n hombre encarcelado por sentencia basada en falso testimonio. Con lo dif¨ªcil que es enviar a prisi¨®n a un maltratador real, tanto m¨¢s a un inocente. Las garant¨ªas del derecho penal est¨¢n basadas en que no vaya ninguna persona a la c¨¢rcel si no se ha destruido mediante pruebas fiables y contrastadas su presunci¨®n de inocencia. Le aseguro desde mi experiencia que el paso de una mujer v¨ªctima por las comisar¨ªas, cuarteles y juzgados tampoco es un camino de rosas y que, pese a las campa?as de publicidad, el sistema y el ordenamiento todav¨ªa no sirven para proteger a las v¨ªctimas.

Tampoco conozco una pensi¨®n de alimentos de 1.500 euros con unos ingresos del obligado a prestarla de 1.800. Ese dinero que establece el juez se supone que es para seguir atendiendo las necesidades de los hijos comunes y se establece de manera proporcional a los ingresos de los padres y madres. El divorcio es un remedio para una mala convivencia y lo habitual es que se multipliquen las dificultades econ¨®micas para ambos padres, no solo para uno de ellos.

Teresa Cavanna Benet. La Navata (Madrid)

¡®Micr¨®mano¡¯ Mill¨¢s

Ante el enorme desarrollo que ha tenido en las ¨²ltimas d¨¦cadas la llamada minificci¨®n literaria en nuestro pa¨ªs, es necesario valorar y situar en su justo contexto tanto las composiciones con las que Juan Jos¨¦ Mill¨¢s colabora desde hace tiempo con El Pa¨ªs Semanal como tambi¨¦n las columnas que desde los a?os noventa publica peri¨®dicamente en el diario EL PA?S. Estos microtextos, que el propio Mill¨¢s ha definido como articuentos, a veces no son ni m¨¢s ni menos que peque?os art¨ªculos period¨ªsticos o cuadros descriptivos, pero en otras ?ocasiones constituyen aut¨¦nticos microrrelatos, poemas en prosa o lo que se ha clasificado en la actualidad como microensayos. Sea cual sea el g¨¦nero breve en el que Mill¨¢s vierte su creaci¨®n literaria, lo cierto es que lo hace siempre con una genial agudeza que le permite penetrar en las m¨¢s rec¨®nditas zonas de lo social y de lo humano. Es uno de nuestros mejores representantes de la producci¨®n minificcional, que gran acogida tiene entre muchos de los lectores de la vertiginosa y ¡°tecnologizada¡± vida contempor¨¢nea.

Dar¨ªo Hern¨¢ndez. Puerto de la Cruz (Tenerife)

Bichos, bacterias y dem¨¢s

Un placer leer a Rosa Montero. Pero en Todos los besos y todas las bocas (21-12-2014), ?menudo dilema nos plantea! Dejarnos llevar por la pasi¨®n del momento o declinarla por el mero hecho de la existencia de bacterias. Yo soy de esas escrupulosas y no soporto la suciedad como norma y el contacto de unas manos sudorosas¡­ ?Pero lo del beso es otra cosa! ?Que los ¡°bichitos¡± van de boca en boca¡­? ?Pues que campen a sus anchas! Porque, bien mirado, ?tambi¨¦n puede uno morirse de asepsia!

Carmen Villar Perearnau. Barcelona