Los cient¨ªficos de EE UU quieren investigar c¨®mo alterar el clima

Los cient¨ªficos de EE UU quieren que su gobierno apoye la investigaci¨®n para trastear con el clima de la Tierra. Un informe recuerda que el objetivo principal a¨²n debe ser reducir las emisiones, pero que ser¨ªa irresponsable no estudiar alternativas como la captura de CO₂ o experimentar con las nubes para enfriar el planeta por si los efectos del calentamiento se agravan.

La Administraci¨®n Obama pidi¨® en 2012 a la Academia Nacional de Ciencias, la principal instituci¨®n cient¨ªfica de EE UU, que elaborara un informe con las ¨²ltimas ideas de los cient¨ªficos, ingenieros y tecn¨®logos para modificar deliberadamente el clima, es decir, para hacer geoingenier¨ªa. Hasta ahora, la ingenier¨ªa clim¨¢tica era casi un tema tab¨² porque podr¨ªa distraer a los cient¨ªficos y a los pol¨ªticos del objetivo fundamental: reducir las emisiones. Ese miedo parece que est¨¢ desapareciendo.

El informe de la NAS, publicado esta semana, detalla dos grandes bloques de tecnolog¨ªas. Por un lado, las distintas opciones que hay para capturar el CO₂, principal gas de efecto invernadero (GEI) y almacenarlo de forma segura y duradera. Por el otro, lo que la ciencia sabe de c¨®mo gestionar la radiaci¨®n solar, aumentando por ejemplo la capacidad reflectora de las nubes. La gran diferencia entre ambas es que, mientras las primeras atacan a la fuente, retirando el CO₂ de la atm¨®sfera, las segundas mitigan sus consecuencias, enfriando el planeta pero sin tocar el balance de GEI.

El objetivo de mantener el calentamiento por debajo de los 2? respecto a las temperaturas de finales del XX parece casi imposible

"El Comit¨¦ sostiene que, como sociedad, hemos alcanzado un punto donde la severidad de los riesgos potenciales del cambio clim¨¢tico parecen superar a los posibles peligros del dilema moral asociado a un programa adecuadamente dise?ado", dice una de las recomendaciones de la NAS. Aunque no hay sustituto a una reducci¨®n dr¨¢stica de las emisiones de CO₂, este comit¨¦ s¨ª considera que la investigaci¨®n en geoingenier¨ªa debe acelerarse.

Antes de la Revoluci¨®n Industrial, la concentraci¨®n de CO₂ en la atm¨®sfera era de unas 280 partes por mill¨®n de aire (ppm). En mayo de 2013, un observatorio de las islas Haw¨¢i registr¨® una acumulaci¨®n de 400,03 ppm. Era la primera vez que se superaba ese umbral. Al a?o siguiente, todo el hemisferio norte registraba concentraciones mensuales por encima de esa cifra, seg¨²n al Organizaci¨®n Meteorol¨®gica Mundial. Algunos estiman que en dos d¨¦cadas se podr¨ªa llegar hasta las 450 ppm. A este ritmo, el objetivo de mantener el calentamiento por debajo de los 2? respecto a las temperaturas de finales del XX parece casi imposible. De hecho, como recuerda la NAS, ya hay escenarios donde la temperatura podr¨ªa aumentar casi en 5?.

La opci¨®n menos radical ser¨ªa reducir la cantidad de CO₂ en la atm¨®sfera. En la ¨²ltima d¨¦cada, se han emitido 34.000 millones de toneladas m¨¦tricas de CO₂ anuales (GtCO₂), seg¨²n datos del Global Carbon Project. Los oc¨¦anos y la cubierta forestal retiran 16 gigatoneladas en un proceso natural. El resto se va acumulando. Se podr¨ªa agrandar y acelerar estos procesos naturales de captura mediante la reforestaci¨®n de enormes extensiones de tierra. Tambi¨¦n se podr¨ªa fertilizar los oc¨¦anos con hierro u otros minerales que promovieran la proliferaci¨®n de microplancton, que necesita del CO₂ para desarrollarse.

Sin embargo, la gesti¨®n de la tierra y los oc¨¦anos apenas retirar¨ªa unas 600 GtCO₂ de aqu¨ª a 2100. Seg¨²n estima el informe de la NAS, para rebajar la concentraci¨®n de CO₂ hasta las 300 ppm habr¨ªa que retirar 1.800 GtCO₂ y esa es la cantidad de m¨¢s acumulada en la atm¨®sfera desde 1750. Por eso, har¨ªan falta otros sistemas como la captura por biomasa o directamente del aire y enterrarlo en el subsuelo.

Tras revisar todas las tecnolog¨ªas propuestas, la NAS reconoce que la captura y secuestro del CO₂ a gran escala es, con la tecnolog¨ªa actual, poco factible. Adem¨¢s, algunas propuestas, como la reforestaci¨®n, podr¨ªan desatar una competencia por la tierra con la agricultura. Sin embargo, apuesta porque se implanten programas de captura a medio plazo. Aunque no ser¨ªa la soluci¨®n, estas t¨¦cnicas deber¨ªan formar parte del mix de medidas contra el cambio clim¨¢tico.

M¨¢s respeto muestra el informe de los cient¨ªficos sobre la gesti¨®n de radiaci¨®n solar. De primeras, prefieren llamarla modificaci¨®n del albedo. Les parece presuntuoso y hasta pol¨ªticamente incorrecto hablar de manejar la radiaci¨®n solar. El punto de partida de este conjunto de tecnolog¨ªas es sencillo: reducir la cantidad de radiaci¨®n que recibe el planeta o aumentar su capacidad de reflejarla para as¨ª enfriarlo. El problema es que entra?a riesgos e incertidumbres.

El informe rechaza el despliegue de sistemas de gesti¨®n de radiaci¨®n solar pero no experimentos a peque?a escala

"Si el mundo no puede frenar las emisiones o los efectos del cambio clim¨¢tico son m¨¢s extremos o aparecen antes de lo esperado, puede haber exigencias de buscar tecnolog¨ªas de intervenci¨®n clim¨¢tica adicionales sobre las que los cient¨ªficos necesitamos saber m¨¢s", dice en una nota el presidente de la NAS, Ralph J. Cicerone. "Aunque las ideas m¨¢s arriesgadas para reducir la cantidad de energ¨ªa absorbida del Sol no deben ser consideradas para un posible despliegue, tenemos que estudiarlas para que podamos dar respuestas si alg¨²n d¨ªa estas ideas se plantean en un intento de evitar la cat¨¢strofe", a?ade.

Inyectar di¨®xido de azufre o ¨¢cido sulf¨²rico en las nubes para hacerlas m¨¢s reflectantes, elevar sales marinas hasta las capas altas de la atm¨®sfera o blanquear los estratoc¨²mulos que cubren entre el 20 % y el 40 % de los oc¨¦anos son algunas de las ideas propuestas para gestionar la radiaci¨®n solar. El principio ya se ha observado en la naturaleza. La erupci¨®n del volc¨¢n Pinatubo en Filipinas en 1991, por ejemplo, eyect¨® 20 millones de toneladas de sulfuros que alcanzaron la estratosfera. Durante los tres a?os siguientes, la temperatura media global se redujo en 0,3?.

Volcanes para bajar la temperatura

El informe de la NAS reconoce que el recurso a pinatubos artificiales ser¨ªa hasta 10 veces m¨¢s barato que descarbonizar la econom¨ªa, es decir, que la transici¨®n a una sociedad sin combustibles f¨®siles. Adem¨¢s, su despliegue a gran escala ser¨ªa m¨¢s f¨¢cil que en el caso del secuestro del carbono y sus efectos ser¨ªan inmediatos. Sin embargo, jugar con las nubes conlleva tantos riesgos que la NAS rechaza, por ahora, que se use.

El gran problema es que a¨²n no se sabe todo de los mecanismos que regulan el clima y alterarlo podr¨ªa tener graves consecuencias. En algunos modelos se ha comprobado que afectar¨ªa al patr¨®n regional de lluvias. Adem¨¢s, no se podr¨ªa detener la gesti¨®n a riesgo de un aumento repentino de la temperatura. Con todo, la NAS recomienda al gobierno estadounidense que cree un programa para investigar estas tecnolog¨ªas aunque solo sea para saber qu¨¦ hacer si otro gobierno experimenta por su cuenta.

"Teniendo en cuenta quienes forman el comit¨¦, muchos de los cuales est¨¢n fuertemente en contra de estos experimentos, es bastante significativo que digan que pueden ser ¨²tiles, seguros y que pueden ser regulados", dice el investigador de la Universidad de Harvard, David Keith. Este ingeniero clim¨¢tico es un firme defensor de la geoingenier¨ªa. Aunque revis¨® el informe de la NAS antes de su publicaci¨®n, no ha participado en su redacci¨®n ni recomendaciones finales.

Uno de los experimentos analizados por la NAS ha sido propuesto por Keith. Si consigue el visto bueno de las autoridades y financiaci¨®n, en 2017 pondr¨¢ en marcha el experimento SCoPEx. Pretenden inyectar unos centenares de gramos de ¨¢cido sulf¨²rico en la estratosfera para ver si funciona la gesti¨®n de la radiaci¨®n solar sin da?ar la capa de ozono. Pero Keith ha puesto sus huevos en varias cestas. Es tambi¨¦n el impulsor de Carbon Engineering, una empresa que pretende capturar el CO₂ directamente del aire. Como ¨¦l dice: "Por supuesto, el comit¨¦ apoya m¨¢s la eliminaci¨®n de carbono que la geoingenier¨ªa solar. Supongo que todo el mundo prefiere la captura de CO₂ debido a su mayor simplicidad al mismo coste. Pero ese es un dilema al que nosotros no nos enfrentamos".