La acci¨®n migratoria ejecutiva
Y lleg¨® el primer obst¨¢culo a la regularizaci¨®n temporal de cinco millones de migrantes sin documentos en el sue?o norteamericano, decretada por unos poderes presidenciales inimaginables para los constituyentes m¨¢s de dos siglos atr¨¢s. Las constituciones son contratos sociales cuya interpretaci¨®n va cambiando con los tiempos y los valores sociales. Si el trabajo legislativo no produce frutos concretos, el presidente puede y debe gobernar por decreto. Uno de los jueces m¨¢s conservadores de EE?UU ha logrado, con la inestimable ayuda republicana, que 26 Estados le presenten un recurso contra estas acciones, bloqueando temporalmente su ejecuci¨®n. Alguien que compara a los migrantes con una de las siete plagas b¨ªblicas, a esta acci¨®n con una invitaci¨®n abierta a los peores criminales, se presta gustoso a bloquear la puesta en marcha de regularizaciones por tres a?os de migrantes trabajadores, pagadores de impuestos y que no utilizan masivamente el servicio de salud.
La desilusi¨®n entre los migrantes es rampante cuando ya acariciaban el sue?o americano, no de enriquecerse, sino de vivir sin miedo en un pa¨ªs que los acoge porque los necesita. La disputa judicial podr¨ªa escalar hasta el Tribunal Supremo, que podr¨ªa emitir una sentencia sin valor alguno si a esta presidencia le sucediera una republicana.¡ª Luis Peraza Parga.
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