El mercado es la plaza

FOTO: H¨¦ctor Santos-D¨ªez/ Bis Images 

Ver, y hacer ver, el mercado como lo que siempre ha sido, un lugar de encuentro e intercambio, fue lo que los arquitectos del estudio OLA, capitaneado por ?scar L¨®pez Alba, se plantearon para abordar la reforma del viejo mercado de Lugo. Por eso, en el centro de esa ciudad, optaron por ampliar la definici¨®n tipol¨®gica del edificio y trataron el espacio como una plaza p¨²blica cubierta.

¡°El mercado pod¨ªa y deb¨ªa ser m¨¢s que un mercado para no desaparecer¡±, sentencia el arquitecto ?scar L¨®pez con convencimiento casi pol¨ªtico. Por eso para construir el nuevo espacio los arquitectos se plantearon levantar m¨¢s una atm¨®sfera que una tipolog¨ªa, m¨¢s una mezcla ¨Cde nuevos elementos con la antigua estructura- que una definici¨®n.

As¨ª, los casetones de la cubierta han sido coloreados. ¡°El color busca hacer m¨¢s amable la arquitectura y sacar partido a la luz oeste que ba?a el conjunto gracias a la arquer¨ªa¡±, explican los proyectistas.

Con ese mismo ¨¢nimo de acercar y dar nueva vida, los arquitectos forraron los pilares de c¨¦sped artificial o los alicataron a la manera n¨®rdica. El objetivo era que el mercado ¨Creconvertido en plaza cubierta- fuera atractivo y funcional a cualquier hora del d¨ªa, con o sin luz natural, con m¨¢s o con menos usuarios.

Con esa voluntad de arropar visual y f¨ªsicamente, un biombo ac¨²stico pintado en naranja forra el per¨ªmetro. Y los toldos, microperforados y retroiluminados, fueron dise?ados por los arquitectos para enviar mensajes desde los puestos de venta ¡°la idea era que incluso cerrados contribuyeran a arropar el espacio evitando la imagen fr¨ªa de los puestos cerrados o sin ocupar¡±.

L¨®pez ten¨ªa claro que los muebles deb¨ªan hacer honor a su nombre y ser m¨®viles y articulados para ser vers¨¢tiles y permitir varios usos. La empresa Undo-Redo se encarg¨® de rescatar y adaptar los muebles. As¨ª, de martes a viernes mandan los puestos del mercado. Luego este mercado- plaza p¨²blica se reinventa. Desde que se inaugur¨® esta nueva intervenci¨®n, el viejo mercado ha acogido conciertos, desfiles de moda, presentaciones de coches, de libros o de partidos pol¨ªticos. Tambi¨¦n una obra de teatro y alguna fiesta. Esa reinvenci¨®n continua le da vida. Los vecinos acuden una y otra vez m¨¢s por curiosidad que para comprar, seguros de que nunca van a encontrar lo mismo.

Precio de la intervenci¨®n por metro cuadrado seg¨²n arquitecto: 380,96 euros.