El gigol¨® que le abri¨® la puerta del cine a Armani

En una secuencia del documental Made in Milan (Martin Scorsese, 1991) Giorgio Armani (Piacenza, 1934) declara: ¡°El cine ha sido mi primer y verdadero amor¡±. El creador italiano revelaba su pasi¨®n por aquel estilo que el cine de Hollywood forj¨® entre los a?os treinta y cuarenta en las figuras de Cary Grant, Gary Cooper o Montgomery Clift. El descubrimiento de esa elegancia interior que ha vertebrado su estilo y su mirada creativa a lo largo de estas cuatro d¨¦cadas.

Frustrado director de cine ¡ªcomo el mismo ha confesado¡ª Armani celebra sus 40 a?os como creador de moda y abanderado de eso que se ha dado en llamar el Made in Italy. Una trayectoria profesional que ha sabido construir una potente alianza entre el sal¨®n de la moda y de la fama. Desde que Richard Gere en el papel del gigol¨® Julian Kaye dispusiera sobre la cama de su apartamento californiano su colecci¨®n de prendas del creador italiano, las chaquetas, esm¨®quines, vestidos y otros complementos no han dejado de iluminar la alfombra roja o la pantalla como imagen del nuevo glamur de la meca del cine.

En 1992 Jodie Foster recog¨ªa su Oscar como mejor actriz por El silencio de los corderos (Jonathan Demme, 1991) enfundada en un traje chaqueta de Armani. La actriz se quitaba la espina de su anterior victoria cuando gan¨® su primer oscar por Acusados (Jonathan Kaplan, 1988) y fue nominada como una de las peores vestidas de la gala. Hab¨ªa aprendido la lecci¨®n: Un Armani nunca te falla. Como Foster, otras actrices y actores han sucumbido al ¡°toque Armani¡± a la hora de presentarse bajo los flashes y las c¨¢maras. Una larga lista donde aparecen nombres como Glenn Close, Harrison Ford, Michelle Pfeiffer, Robert de Niro, Sophia Loren, Clint Eastwood, Claudia Cardinale, Jack Nicholson, Jeremy Irons, entre otros; o figuras de la m¨²sica como Tina Turner, Eric Clapton en la agenda de incondicionales.

Cuando en 1982 Giorgio Armani ocup¨® la portada de la revista Time se?alaba el cambio de rumbo en el imperio de la moda hasta entonces monopolizado por Paris como epicentro. Armani suced¨ªa en el ¨¢lbum de honor a los nombres de Christian Dior, Coco Chanel e Yves Saint Laurent. Lejanos quedaban en el tiempo los a?os en que la firma Dior detentaba la elegancia sin apenas oposici¨®n en el mundo del cine. Con muy buena visi¨®n la marca Armani y sus promotores comenzaban a construir una poderosa relaci¨®n con el cine y sus estrellas. Una estrategia de marketing que no ha dejado de funcionar en todos estos a?os en esa comuni¨®n perfecta de moda, cine y glamur. En el a?o 2013 la hoy oscarizada actriz australiana Cate Blanchett firmaba un contrato por la suma de 10 millones de d¨®lares como embajadora de su nuevo perfume Si. La actriz renovaba los poderosos y seductores lazos que hace veinticinco a?os se forjaron entre creador italiano y el cine. Una historia de amor que comenz¨® en el guardarropa de un gigol¨® con un excelente gusto.