Frente al cambio clim¨¢tico, corazones verdes
La autora relata c¨®mo ha llegado a convertirse en una activista contra el cambio clim¨¢tico Hoy, prepara varias acciones para el d¨ªa Mundial del Medio Ambiente el 5 de junio
Era la ma?ana del 21 de septiembre del 2014 en el Moll de la Marina (Barcelona) y estaba nerviosa y emocionada, junto a una veintena de personas de diversas nacionalidades, edades y perfiles. No ¨¦ramos activistas ni personas expertas en medio ambiente, y aunque nos hab¨ªamos conocido hac¨ªa s¨®lo un mes, conseguimos organizar la versi¨®n local de la People¡¯s Climate March, la Marcha ciudadana por el clima, que se esperaba que fuera la m¨¢s grande movilizaci¨®n por el cambio clim¨¢tico de todos los tiempos. Fue convocada porque en Nueva York, l¨ªderes mundiales estaban reunidos en una cumbre de la ONU con la misi¨®n de trazar acuerdos efectivos contra el cambio clim¨¢tico.
Comenzaron a llegar personas vestidas de blanco y mostrando corazones verdes, s¨ªmbolo internacional de la acci¨®n. Algunas ven¨ªan con hojas de papel porque quer¨ªan aprender a hacer el coraz¨®n de origami que utilizamos en nuestra convocatoria. Es incre¨ªble. Finalmente nos acompa?aron unas 2.000 personas en un recorrido frente al mar. Una estampa que me salta a la memoria cada vez que regreso a la Barceloneta.
Ese mismo d¨ªa, un total de 700.000 ciudadanos en casi 3.000 ciudades alzaron sus voces pac¨ªficamente en un mismo canto. En Barcelona, podr¨ªamos haber sido muchos m¨¢s, pero jam¨¢s imaginamos que conseguir¨ªamos tanto con tan poco. D¨ªas despu¨¦s, compartiendo an¨¦cdotas y reconociendo errores, vimos claro que unidos pod¨ªamos hacer mucho, y decidimos seguir adelante, sin saber bien hacia d¨®nde ni c¨®mo, pero teniendo muy claro el por qu¨¦.
Desde entonces, nos reunimos cada tres o cuatro semanas, y hemos participado en eventos tan variados como el Festival de econom¨ªa solidaria Esperanzah, la presentaci¨®n del libro Esto lo cambia todo. El capitalismo contra el clima, de Naomi Klein, o la Fira per la Terra, donde montamos una instalaci¨®n con apoyo del Paperformances.
Con esos inicios, adherirnos a 350.org fue un paso f¨¢cil y natural, porque nos identificamos desde el comienzo con el esp¨ªritu participativo de la organizaci¨®n y su forma creativa de abordar el cambio clim¨¢tico. Su manifiesto parec¨ªa hecho para nosotros.
El camino institucional
Un mes despu¨¦s de la marcha, en un ambiente muy informal, registramos en el Parlament las 32.435 firmas recogidas en Catalu?a por una campa?a global(m¨¢s de 2.300.000 firmas en todo el mundo) que reclama energ¨ªas 100% limpias para el a?o 2050.
Con la intenci¨®n de impulsar un cambio legislativo, en marzo de este a?o entregamos una propuesta de resoluci¨®n al Parlament, producto de muchas horas de estudio y redactada con el respaldo de diputados de ICV y de EQUO, que ser¨¢ sometida pronto a votaci¨®n. Pedimos establecer objetivos de reducci¨®n de emisiones de CO2 m¨¢s ambiciosos en Catalu?a mediante cambios concretos en materia de transporte, agricultura y eficiencia energ¨¦tica. Adem¨¢s, lanzamos una petici¨®n de firmas, dirigida esta vez al Ayuntamiento de Barcelona y en la misma l¨ªnea que la propuesta de resoluci¨®n.
Tejiendo redes
Estamos convencidos de que los colectivos que trabajamos por el medio ambiente tenemos que unir nuestros esfuerzos y, por eso, a finales del a?o pasado organizamos un encuentro entre entidades diversas como Espai Ambiental, Xarxa per la Sobirania Energ¨¨tica, Fracking Ez y una variedad de start-ups sostenibles. Organizarlo fue todo un reto, pero vali¨® la pena porque nos permiti¨® crear v¨ªnculos y conocer a expertos que nos han aportado much¨ªsimos conocimientos y apoyo.
Con la misma intenci¨®n, este a?o viaj¨¦ con un par de compa?eros a encuentros internacionales en Bruselas y en Zurich, que reunieron cada uno a un centenar de representantes de movimientos por el clima. Me asombraron el trato fraternal, de confianza y compromiso, que hubo en estos encuentros, y fue fant¨¢stico compartir ideas con veteranos de Greenpeace, 350.org, Amigos de la Tierra, Global Campaign for Climate Action y otros grupos internacionales, as¨ª como participar en el trazado de una l¨ªnea de acci¨®n global con meta en la Cumbre por el Clima de la ONU que se celebrar¨¢ a finales de este a?o en Par¨ªs, la COP21.
El arte como lenguaje
El arte es nuestro leitmotiv, y una de mis acciones preferidas fue el 14 de febrero pasado, cuando nos unimos al Global Divestment Day, el d¨ªa de acci¨®n global por la desinversi¨®n en combustibles f¨®siles. Nos plantamos en el CaixaForum con un wall-e hecho en casa (el robot que protagoniza una pel¨ªcula de ciencia ficci¨®n de Pixar), otro personaje mitad estrella de la Caixa, mitad antih¨¦roe de Repsol y, adem¨¢s, un elenco de pintorescos ¡°ejecutivos¡±.
Hicimos este flashmob para explicar que tener el dinero en La Caixa es, en cierta forma, tenerlo en Repsol, porque CaixaBank es el principal accionista en esta compa?¨ªa. Nuestro mensaje de fondo: preg¨²ntate a d¨®nde va tu dinero y busca opciones que respondan a tus ideales. El mejor momento fue cuando uno de los agentes de seguridad del centro, que intentaba disipar la acci¨®n ya concluida, se enfrent¨® a la sonrisa plena de uno de nuestros elegantes ejecutivos y no supo c¨®mo reaccionar.
Pr¨®ximos pasos
El mes de junio se perfila intenso y emocionante: estaremos en la Universidad Aut¨®noma de Barcelona y participaremos en el Congreso del Tercer Sector Ambiental. Por si fuera poco, el 5 de junio, D¨ªa Mundial del Medio Ambiente, presentaremos la campa?a mundial de desinversi¨®n en f¨®siles en el evento Divest from Fossils, invest in Green Business que organiza Ecopreneur.eu.
Cuando asist¨ª a nuestra primera reuni¨®n, una lejana tarde de agosto, no sospechaba que acabar¨ªa cambiando mi vida. Ah¨ª estaban, entre muchos otros, Carmelo y Laure, quienes hoy est¨¢n produciendo el documental Corazones Verdes, que esperamos financiar con una campa?a de crowdfunding. La idea es retratar los rostros de los corazones verdes que mueven esta historia y mostrar as¨ª la importancia de la gente com¨²n en la lucha contra el cambio clim¨¢tico. Una forma m¨¢s de desmitificar el activismo y mostrarlo como un deber ciudadano frente a la situaci¨®n de emergencia en la que nos encontramos. Porque aunque somos optimistas convencidos, sabemos que no hay tiempo que perder.
Yve Ram¨ªrez es coordinadora y miembro fundador de 350 BCN.
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