Un proyecto para saber de qu¨¦ se muere en el mundo
Las estad¨ªsticas de mortalidad son aproximaciones que se basan en datos poco fiables. Un nuevo protocolo liderado por investigadores espa?oles trata de solucionar el problema


Cada a?o mueren en el mundo 1,7 millones de personas de sida, 1,5 millones de tuberculosis, casi un mill¨®n de neumon¨ªa, 640.000 de malaria. La mayor¨ªa de ellas viv¨ªa en pa¨ªses en desarrollo y muchas estaban entre los m¨¢s pobres de los pobres, a menudo sin luz ni agua corriente. En estas condiciones, ?c¨®mo se sabe con exactitud la causa del fallecimiento? La respuesta corta es que tal precisi¨®n no existe. Un proyecto liderado por investigadores espa?oles pretende aclarar los datos en los pr¨®ximos a?os.
Donde no cuentan con los medios para hacer autopsias, es decir, en la mayor parte del mundo, hasta ahora existen dos m¨¦todos para determinar la causa del fallecimiento: el diagn¨®stico cl¨ªnico, que tiene un error de entre un 30% y un 50% (seg¨²n varios estudios en pa¨ªses en desarrollo, como este), y lo que se denominan ¡°autopsias verbales¡±, entrevistas que se realizan a los familiares del difunto mediante las cuales los investigadores indagan en los s¨ªntomas que ten¨ªa y hacen una estimaci¨®n de la causas. Estos testimonios, con la imprecisi¨®n propia de un lego en medicina y con el tamiz del tiempo ¡ªa menudo se efect¨²an meses despu¨¦s del deceso¡ª, pueden dar pistas, pero tienen una fiabilidad muy relativa.
As¨ª, las estad¨ªsticas que usa la Organizaci¨®n Mundial de la Salud y otros organismos internacionales sobre mortalidad causada por infecciones son simples aproximaciones a la realidad. Y cuanto m¨¢s lejos se quedan de ella, m¨¢s complicado es luchar contra las enfermedades que matan a millones de personas cada a?o: no existen buenos criterios para enfocar los tratamientos, las investigaciones, para detectar y cuantificar las epidemias¡
El proyecto coliderado por los investigadores de ISGlobal Quique Bassat, Clara Men¨¦ndez y Jaume Ordi busca conocer las causas exactas de las muertes en el mundo a trav¨¦s de Autopsias M¨ªnimamente Invasivas (MIA, por sus siglas en ingl¨¦s). Mediante agujas, extrayendo peque?as cantidades de tejido de los principales ¨®rganos del cuerpo, y con un posterior an¨¢lisis, la MIA puede determinar con bastante exactitud las causas de la muerte de una persona, seg¨²n explica Bassat en el Centro de Investigaci¨®n en Salud de Manhi?a (CISM) en Mozambique, donde est¨¢ desarrollando la investigaci¨®n. ¡°Una de las ventajas que tiene es que no hace falta que sean m¨¦dicos quienes extraigan el tejido, ni siquiera personal sanitario. Cualquiera con un entrenamiento de tres semanas puede completarlo con garant¨ªas¡±, asegura.
La novedad que aporta el protocolo, bautizado como Cadmia, no son las extracciones en s¨ª ¡ªya exist¨ªan varias investigaciones que las estaban probando¡ª, sino c¨®mo combinarlas para poder realizar una autopsia efectiva con el m¨ªnimo coste posible. De hecho, el m¨¦todo para que tenga la mayor costo-efectividad (los mejores resultados con la m¨ªnima inversi¨®n) todav¨ªa se encuentra en revisi¨®n. ¡°Estamos tratando de simplificar la metodolog¨ªa al m¨¢ximo. Hemos descubierto que las muestras de algunos ¨®rganos aporta poca informaci¨®n, por lo que no merece la pena extraer y analizar de ellos. Con restos de pulm¨®n, cerebro, sangre, h¨ªgado y l¨ªquido cefalorraqu¨ªdeo (que ba?a el enc¨¦falo y la m¨¦dula espinal) quiz¨¢s se podr¨ªan determinar la gran mayor¨ªa de las muertes. Dentro de estos, las dolencias que afectan a los dos primeros son las m¨¢s mortales¡±, explica Bassat.

Adem¨¢s de la vertiente cient¨ªfica, otro de los focos de la investigaci¨®n es la social y antropol¨®gica. La manipulaci¨®n de los difuntos no es sencilla en ciertas culturas y religiones. En este sentido, las ventajas de este m¨¦todo con respecto a una autopsia convencional son evidentes: no hay que diseccionar el cad¨¢ver, no es necesario extraer ¨®rganos. Se basa en simples pinchazos, que parecen ser mucho m¨¢s aceptados, cuenta Bassat. El estudio se ha desplegado en cinco pa¨ªses para comprobar la respuesta en distintas culturas: Mozambique, Kenia, Gab¨®n, Pakist¨¢n y Mal¨ª.
A finales de a?o ser¨¢ el momento de determinar exactamente el protocolo y comenzar a aplicarlo en seis lugares del mundo. Manhi?a ser¨¢ uno de ellos, pero el resto est¨¢ por determinar. El plan es que en los pr¨®ximos 20 a?os se extienda a un total de 25 pa¨ªses. En las pruebas que se han hecho hasta ahora, la correlaci¨®n entre este nuevo m¨¦todo y la autopsia completa ha sido del 80%. Y han encontrado sorpresas. Por ejemplo, la prevalencia de la tuberculosis como causa de muerte era m¨¢s alta de lo que se pensaba: hasta un 15% de los casos analizados por el equipo del CISM.
El pasado 3 de junio, en Bruselas, Melinda Gates dijo que la fundaci¨®n que lleva su nombre (y la de su marido Bill) despu¨¦s de muchos a?os aportando dinero para luchar contra estas enfermedades hab¨ªa decidido pararse a revisar todo lo que estaban haciendo. Una de sus conclusiones fue que la medici¨®n y la cuantificaci¨®n era clave para decidir d¨®nde continuaban destinando el dinero de la organizaci¨®n que m¨¢s fondos aporta al desarrollo en el mundo. Quiz¨¢s por eso han decidido apoyar con 75 millones de d¨®lares durante los tres pr¨®ximos a?os en el proyecto de Bassat, antes incluso de que est¨¦ cerrado el protocolo de actuaci¨®n. Informaci¨®n como esta, a gran escala, puede servir para redirigir las pol¨ªticas sanitarias de los pa¨ªses y para salvar vidas. Porque sabiendo las causas de las muertes pasadas se pueden evitar muchas futuras.
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