La cooperaci¨®n espa?ola en Mali ofrece solidaridad para un pueblo castigado por la pobreza y un observatorio ¨²nico en una regi¨®n estrat¨¦gica para Espa?a. Foto: Pablo Tosco.
Cuando esta legislatura haya terminado y comencemos a recomponer los restos de la devastaci¨®n pol¨ªtica y presupuestaria de la ayuda oficial al desarrollo, descubriremos si los pilares que han apuntalado las instituciones se han mantenido relativamente firmes. La Cooperaci¨®n Espa?ola se sostiene sobre un equipo de profesionales que ¨Cdesde Espa?a y las oficinas de terreno- demuestran que la solidaridad internacional es algo m¨¢s que un capricho de aficionados del que un Estado se puede desprender cuando vienen mal dadas. Su situaci¨®n es tan fr¨¢gil como estrat¨¦gica.
Hace mucho tiempo que esto es cierto, pero tendemos a olvidarlo. Yo tuve la oportunidad de disfrutar de un espl¨¦ndido recordatorio hace pocos d¨ªas, en la reuni¨®n de responsables de Oficinas T¨¦cnicas de Cooperaci¨®n (OTC) en ?frica, Asia y Oriente Pr¨®ximo.
Si la experiencia de los profesionales del desarrollo pesase m¨¢s en la visi¨®n del Gobierno, ?podr¨ªa nuestro ex¨®tico Ministro del Interior referirse como ¡°goteras¡± a las v¨ªctimas del conflicto sirio y la persecuci¨®n eritrea? ?Podr¨ªa el Presidente encaramarse al Consejo de Seguridad utilizando el historial solidario de Espa?a para luego devolver los papeles al caj¨®n de abajo del escritorio? ?Habr¨ªan sido tan eficaces las grandes el¨¦ctricas a la hora de deconstruir el sector espa?ol de renovables y amenazar el modelo energ¨¦tico sostenible?
Lamentablemente, la marginaci¨®n pol¨ªtica es solo uno de los problemas serios y numerosos a los que se enfrentan los profesionales de la Cooperaci¨®n Espa?ola. Esta misma semana se hac¨ªa p¨²blica la carta que 70 responsables de programa han remitido a Gonzalo Robles, Secretario General y director en funciones de la AECID. En ella expresan las dificultades econ¨®micas a las que deben hacer frente, los agravios comparativos con otros cuerpos del personal de Espa?a en el exterior y el anacronismo normativo en el que se desenvuelven. Los directivos de la AECID se parapetan -?sorpresa!- en Hacienda.
Por si fuera poco, sus posibilidades de prosperar profesionalmente se enfrentan a una doble amenaza: la de los diplom¨¢ticos ¨Cun cuerpo que, salvo excepciones, considera la cooperaci¨®n un trabajo de segunda categor¨ªa profesional y salarial, pero que han puesto el ojo en los destinos m¨¢s lustrosos¨C y la de los amiguetes pol¨ªticos. Aunque en ning¨²n caso este ¨²ltimo problema se limita al gobierno actual ¨Cde hecho, mi sensaci¨®n es que otros han sido bastante peores- los ¨²ltimos a?os han conocido varias designaciones pol¨ªticas para puestos directivos en el terreno que alimentan la frustraci¨®n de los verdaderos profesionales. La historia la publica esta misma semana El Confidencial.
Los profesionales de la cooperaci¨®n saben lo mucho que les valora la sociedad espa?ola y la contribuci¨®n insustituible que realizan al desarrollo de los pa¨ªses en los que trabajan. Pero van a necesitar algo m¨¢s si queremos detener la sangr¨ªa de huidas hacia los organismos internacionales y las agencias privadas. A?adan esta a la lista de prioridades para la Restauraci¨®n.
Y con este nuevo lamento cerramos el cuarto curso de 3.500 Millones, su blog de pobreza de andar por casa. Durante el mes de agosto publicaremos algunas entradas, pero he prometido a mis antepasados y a mis descendientes que yo no escribir¨¦ ninguna de ellas. Espero que descansen tanto como pretendo hacerlo yo.
Comentarios
bien gonzalo, ya te vas reconciliando con la otc despues de la salvajada de articulo que hiciste cuando fuiste a DFID y regresaste obnubilado.
Muy de acuerdo con este post de Fanjul que acierta en lo esencial del asunto. Aqu¨ª el problema de fondo es mucho m¨¢s grave que el se?alado hace pocos d¨ªas en el Confidencial, no se trata de una simple bronca (que por cierto no existe) entre empleados de la AECID, debido a un agravio comparativo en sus condiciones laborales. Aqu¨ª el asunto de fondo, que en parte se se?ala en el art¨ªculo del Confidencial y que bien apunta Fanjul, estriba en que la AECID es, probablemente, el ¨®rgano p¨²blico espa?ol con la peor pol¨ªtica de recursos humanos, el capital m¨¢s valioso de cualquier empresa u organizaci¨®n, de toda la administraci¨®n p¨²blica nacional... puesto que no hay pol¨ªtica, ni praxis, ni planes de mejora, ni voluntad pol¨ªtica para aplicarlos si los hubiera y as¨ª, como todos comprendemos, es imposible que la ayuda espa?ola alcance los niveles de calidad, eficacia y eficiencia que se merecen los millones de beneficiarios de nuestra ayuda... y digo nuestra, por que todos la estamos pagando con nuestros impuestos. Esto ¨²ltimo s¨ª deber¨ªa preocuparnos y mucho, puesto que viene siendo se?alado repetidamente en los distintos informes de evaluaci¨®n independiente a los que hemos sido sometidos en los ¨²ltimos a?os. En la reciente examen intermedio del IV Plan Director de la Cooperaci¨®n Espa?ola 2013-2016, que por cierto se puede consultar en la p¨¢gina web de la AECID, se se?ala claro y alto el problema y nuestros pol¨ªticos y tomadores de decisi¨®n siguen mirando para otro lado:¡°...la actual configuraci¨®n administrativa de la AECID / SGCID, y la estructura dual sede/terreno dificultan el establecimiento e implementaci¨®n de una pol¨ªtica de recursos humanos coherente con los objetivos de gesti¨®n por resultados, basada en una evaluaci¨®n por desempe?o y que ofrezca un plan de carrera profesional motivador. Se trata de un problema estructural ya que sin motivaci¨®n de promoci¨®n en la carrera profesional (no existen jur¨ªdicamente v¨ªas para pasar de una modalidad a otra) o de retribuci¨®n (por las restricciones presupuestarias), la evaluaci¨®n por desempe?o pierde efectividad¡§ (p¨¢gina 68)Tambi¨¦n se indica: ¡§La inadecuaci¨®n de capacidades humanas tanto en n¨²mero como en competencias es sin duda un tema recurrente en la Cooperaci¨®n Espa?ola que no ha escapado a este examen intermedio. De manera pr¨¢cticamente un¨¢nime todos los entrevistados ponen de manifiesto el n¨²mero y calidad insuficiente de personal y la inadecuaci¨®n de las modalidades de contrataci¨®n y de la estructura del personal existentes. En este periodo, a las limitaciones estructurales se han a?adido las restricciones de movilidad en la funci¨®n p¨²blica¡§. (pagina 68)Por ¨²ltimo y aunque no se se?ala en el informe, se siguen dando en nuestra cooperaci¨®n procesos de selecci¨®n opacos, con el nombramiento de perfiles poco adecuados, claramente pol¨ªticos, en puestos a los que se deber¨ªa llegar por criterios estrictos de competencia t¨¦cnica y esto se repite legislatura tras legislatura. Es por eso que AECID tambi¨¦n ostenta, seguramente, el r¨¦cord de ser el ¨®rgano p¨²blico espa?ol con una mayor ¡§sangr¨ªa¡§ de personal altamente cualificado y especializado, que finalmente decide hacer las maletas y pasar a trabajar en entornos m¨¢s competitivos y estimulantes.
bien gonzalo, ya te vas reconciliando con la otc despues de la salvajada de articulo que hiciste cuando fuiste a DFID y regresaste obnubilado.
Muy de acuerdo con este post de Fanjul que acierta en lo esencial del asunto. Aqu¨ª el problema de fondo es mucho m¨¢s grave que el se?alado hace pocos d¨ªas en el Confidencial, no se trata de una simple bronca (que por cierto no existe) entre empleados de la AECID, debido a un agravio comparativo en sus condiciones laborales. Aqu¨ª el asunto de fondo, que en parte se se?ala en el art¨ªculo del Confidencial y que bien apunta Fanjul, estriba en que la AECID es, probablemente, el ¨®rgano p¨²blico espa?ol con la peor pol¨ªtica de recursos humanos, el capital m¨¢s valioso de cualquier empresa u organizaci¨®n, de toda la administraci¨®n p¨²blica nacional... puesto que no hay pol¨ªtica, ni praxis, ni planes de mejora, ni voluntad pol¨ªtica para aplicarlos si los hubiera y as¨ª, como todos comprendemos, es imposible que la ayuda espa?ola alcance los niveles de calidad, eficacia y eficiencia que se merecen los millones de beneficiarios de nuestra ayuda... y digo nuestra, por que todos la estamos pagando con nuestros impuestos. Esto ¨²ltimo s¨ª deber¨ªa preocuparnos y mucho, puesto que viene siendo se?alado repetidamente en los distintos informes de evaluaci¨®n independiente a los que hemos sido sometidos en los ¨²ltimos a?os. En la reciente examen intermedio del IV Plan Director de la Cooperaci¨®n Espa?ola 2013-2016, que por cierto se puede consultar en la p¨¢gina web de la AECID, se se?ala claro y alto el problema y nuestros pol¨ªticos y tomadores de decisi¨®n siguen mirando para otro lado:¡°...la actual configuraci¨®n administrativa de la AECID / SGCID, y la estructura dual sede/terreno dificultan el establecimiento e implementaci¨®n de una pol¨ªtica de recursos humanos coherente con los objetivos de gesti¨®n por resultados, basada en una evaluaci¨®n por desempe?o y que ofrezca un plan de carrera profesional motivador. Se trata de un problema estructural ya que sin motivaci¨®n de promoci¨®n en la carrera profesional (no existen jur¨ªdicamente v¨ªas para pasar de una modalidad a otra) o de retribuci¨®n (por las restricciones presupuestarias), la evaluaci¨®n por desempe?o pierde efectividad¡§ (p¨¢gina 68)Tambi¨¦n se indica: ¡§La inadecuaci¨®n de capacidades humanas tanto en n¨²mero como en competencias es sin duda un tema recurrente en la Cooperaci¨®n Espa?ola que no ha escapado a este examen intermedio. De manera pr¨¢cticamente un¨¢nime todos los entrevistados ponen de manifiesto el n¨²mero y calidad insuficiente de personal y la inadecuaci¨®n de las modalidades de contrataci¨®n y de la estructura del personal existentes. En este periodo, a las limitaciones estructurales se han a?adido las restricciones de movilidad en la funci¨®n p¨²blica¡§. (pagina 68)Por ¨²ltimo y aunque no se se?ala en el informe, se siguen dando en nuestra cooperaci¨®n procesos de selecci¨®n opacos, con el nombramiento de perfiles poco adecuados, claramente pol¨ªticos, en puestos a los que se deber¨ªa llegar por criterios estrictos de competencia t¨¦cnica y esto se repite legislatura tras legislatura. Es por eso que AECID tambi¨¦n ostenta, seguramente, el r¨¦cord de ser el ¨®rgano p¨²blico espa?ol con una mayor ¡§sangr¨ªa¡§ de personal altamente cualificado y especializado, que finalmente decide hacer las maletas y pasar a trabajar en entornos m¨¢s competitivos y estimulantes.
bien gonzalo, ya te vas reconciliando con la otc despues de la salvajada de articulo que hiciste cuando fuiste a DFID y regresaste obnubilado.
Muy de acuerdo con este post de Fanjul que acierta en lo esencial del asunto. Aqu¨ª el problema de fondo es mucho m¨¢s grave que el se?alado hace pocos d¨ªas en el Confidencial, no se trata de una simple bronca (que por cierto no existe) entre empleados de la AECID, debido a un agravio comparativo en sus condiciones laborales. Aqu¨ª el asunto de fondo, que en parte se se?ala en el art¨ªculo del Confidencial y que bien apunta Fanjul, estriba en que la AECID es, probablemente, el ¨®rgano p¨²blico espa?ol con la peor pol¨ªtica de recursos humanos, el capital m¨¢s valioso de cualquier empresa u organizaci¨®n, de toda la administraci¨®n p¨²blica nacional... puesto que no hay pol¨ªtica, ni praxis, ni planes de mejora, ni voluntad pol¨ªtica para aplicarlos si los hubiera y as¨ª, como todos comprendemos, es imposible que la ayuda espa?ola alcance los niveles de calidad, eficacia y eficiencia que se merecen los millones de beneficiarios de nuestra ayuda... y digo nuestra, por que todos la estamos pagando con nuestros impuestos. Esto ¨²ltimo s¨ª deber¨ªa preocuparnos y mucho, puesto que viene siendo se?alado repetidamente en los distintos informes de evaluaci¨®n independiente a los que hemos sido sometidos en los ¨²ltimos a?os. En la reciente examen intermedio del IV Plan Director de la Cooperaci¨®n Espa?ola 2013-2016, que por cierto se puede consultar en la p¨¢gina web de la AECID, se se?ala claro y alto el problema y nuestros pol¨ªticos y tomadores de decisi¨®n siguen mirando para otro lado:¡°...la actual configuraci¨®n administrativa de la AECID / SGCID, y la estructura dual sede/terreno dificultan el establecimiento e implementaci¨®n de una pol¨ªtica de recursos humanos coherente con los objetivos de gesti¨®n por resultados, basada en una evaluaci¨®n por desempe?o y que ofrezca un plan de carrera profesional motivador. Se trata de un problema estructural ya que sin motivaci¨®n de promoci¨®n en la carrera profesional (no existen jur¨ªdicamente v¨ªas para pasar de una modalidad a otra) o de retribuci¨®n (por las restricciones presupuestarias), la evaluaci¨®n por desempe?o pierde efectividad¡§ (p¨¢gina 68)Tambi¨¦n se indica: ¡§La inadecuaci¨®n de capacidades humanas tanto en n¨²mero como en competencias es sin duda un tema recurrente en la Cooperaci¨®n Espa?ola que no ha escapado a este examen intermedio. De manera pr¨¢cticamente un¨¢nime todos los entrevistados ponen de manifiesto el n¨²mero y calidad insuficiente de personal y la inadecuaci¨®n de las modalidades de contrataci¨®n y de la estructura del personal existentes. En este periodo, a las limitaciones estructurales se han a?adido las restricciones de movilidad en la funci¨®n p¨²blica¡§. (pagina 68)Por ¨²ltimo y aunque no se se?ala en el informe, se siguen dando en nuestra cooperaci¨®n procesos de selecci¨®n opacos, con el nombramiento de perfiles poco adecuados, claramente pol¨ªticos, en puestos a los que se deber¨ªa llegar por criterios estrictos de competencia t¨¦cnica y esto se repite legislatura tras legislatura. Es por eso que AECID tambi¨¦n ostenta, seguramente, el r¨¦cord de ser el ¨®rgano p¨²blico espa?ol con una mayor ¡§sangr¨ªa¡§ de personal altamente cualificado y especializado, que finalmente decide hacer las maletas y pasar a trabajar en entornos m¨¢s competitivos y estimulantes.
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