Este almac¨¦n nuclear se aplaza hasta 2016
Hay que tener una imaginaci¨®n poderosa para relacionar s¨²bitamente el ATC y el recibo de la electricidad
Afligido por la audaz maniobra de Castilla-La Mancha que ha bloqueado la construcci¨®n del Almac¨¦n Temporal Centralizado (ATC) para residuos nucleares en Villar de Ca?as, el ministro de Industria, Jos¨¦ Manuel Soria, arroj¨® un mensaje explosivo a la opini¨®n p¨²blica: ¡°Si no se construye el ATC, la luz puede subir hasta el 24%¡±. Hay que tener una imaginaci¨®n poderosa para suponer que la luz puede subir todav¨ªa m¨¢s y, sobre todo, para relacionar s¨²bitamente ATC y recibo de la electricidad. La relaci¨®n existe, cualquiera ser¨ªa capaz de intuirla a voleo. Pero lo que importa es encontrar el argumento preciso. Y es el siguiente: si las centrales nucleares hubiesen estado paradas durante cuatro a?os, el precio en el mercado de la electricidad habr¨ªa subido el 24%. Es una simulaci¨®n del operador del mercado y, por tanto, matem¨¢ticamente (no sabemos si industrial y econ¨®micamente) fiable.
?Ahora bien ?por qu¨¦ habr¨ªan de pararse las centrales nucleares? No ser¨¢ por la falta de ATC, ya que el almac¨¦n no ha existido hasta ahora y la producci¨®n nuclear no se ha resentido; los residuos se almacenan en los dep¨®sitos individuales... por el momento. El ministro quiere transmitir una amenaza real en t¨¦rminos estrat¨¦gicos ¡ªa medio y largo plazo¡ª como si fuera un peligro inminente. El ATC es estrat¨¦gicamente necesario, entre otras razones porque los dep¨®sitos de cada central tendr¨¢n que cerrarse alg¨²n d¨ªa; pero de eso a suponer que existe una influencia sobre el precio aqu¨ª y ahora hay un largo trecho; exactamente el que media entre informar y atemorizar.
El ministro Soria tendr¨ªa que estar m¨¢s preocupado por el futuro pol¨ªtico del almac¨¦n despu¨¦s del magistral movimiento de la autonom¨ªa manchega: ampliar la Zona de Especial Protecci¨®n para las Aves de la laguna del Hito para que ocupe los terrenos destinados al ATC. No es una jugada tan pueril como puede parecer a primera vista, y bien lo saben los abogados del Estado que intentan contrarrestarla. Un recurso contencioso-administrativo puede perderse y se resolver¨¢ ad calendas grecas; y cualquier alegaci¨®n por parte de Enresa tendr¨ªa la misma y dudosa eficacia jur¨ªdica. Se puede utilizar el ca?¨®n Gran Berta contra el acuerdo auton¨®mico y declarar el ATC de inter¨¦s p¨²blico. Pero, claro, para eso habr¨ªa que demostrar, en Espa?a y en Europa, que no hay otra soluci¨®n que Villar de Ca?as; y eso es metaf¨ªsicamente imposible porque, como se recordar¨¢, hab¨ªa hasta ocho posibles emplazamientos.
El ATC est¨¢ en lo que un ajedrecista llamar¨ªa situaci¨®n de zugzwang: cualquier movimiento que haga empeora su posici¨®n. Si recurre, alarga los plazos; si declara el ATC de inter¨¦s p¨²blico, tambi¨¦n, con el agravante de que tendr¨ªa que presentar c¨¢lculos y viabilidad del proyecto; si no hace nada, el almac¨¦n estar¨¢ cl¨ªnicamente muerto. Existe una opci¨®n ¡ªavalada por Medido Ambiente, cuyos funcionarios son poco partidarios de implicarse en un proceso desconocido¡ª que no resuelve nada, pero que suele ser la t¨¢ctica favorita de los Gobiernos del PP: aplazar la decisi¨®n a la pr¨®xima legislatura. Y esta ser¨¢ la que se adopte.
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