El plato, barricada de una revoluci¨®n pac¨ªfica
Con cada elecci¨®n diaria fomentamos una manera de comer y de comprar, capaz de subvertir la realidad que nos rodea
Como nos recuerda el fil¨®sofo Daniel Innerarity en la introducci¨®n del libro Cocinar, comer, convivir, alimentarse, lejos de ser un acto trivial, es una acci¨®n cargada de astucia e intenci¨®n pol¨ªtica. En nuestra sociedad es frecuente sospechar que vivimos inmersos dentro de un orden dif¨ªcil de alterar, donde las decisiones son tomadas por terceros en despachos aislados de la realidad y las preocupaciones de la calle. Que moramos sumidos en una coyuntura salpicada de cortinas de humo creadas para distraer la atenci¨®n de los ciudadanos lejos de los verdaderos problemas que les apremian. Que nos encontramos bajo dict¨¢menes dise?ados para satisfacer los intereses de compa?¨ªas y organismos que tutelan las decisiones de los Estados.
As¨ª, se da por supuesto que el ciudadano de a pie poco puede hacer para revertir la situaci¨®n. Pero a pesar de lo que creamos, lejos de ser marionetas conducidas por otros, nuestras acciones corrientes poseen una relevancia trascendental. Nuestras decisiones y hechos pueden dar forma a lo ordinario m¨¢s all¨¢ de lo que imponen las rutinas, lo que nos convierte, m¨¢s que en t¨ªteres, en actores principales de nuestros actos. Porque en el gesto habitual es precisamente donde se produce un mayor impacto social y la oportunidad perfila un futuro diferente.
Alimentarnos es una acci¨®n que todos realizamos diariamente. Omitimos que tras la decisi¨®n de d¨®nde y qu¨¦ comer se fomenta un modelo de comercio frente a otro; se apuesta por el supermercado frente al negocio virtual o por la peque?a tienda frente a la gran superficie. En un gesto se resuelve por uno u otro sistema productivo, por la agricultura biol¨®gica o los grandes invernaderos, por las variedades tradicionales o por la biotecnolog¨ªa. Llenando el carro de la compra se aprueba la pesca de anzuelo o la de arrastre; la actividad de los barcos factor¨ªa o la pesca de bajura. Se avala la labor del artesano o la manufactura industrial, el ingrediente local o la marca global.
Con nuestra selecci¨®n al adquirir uno u otro art¨ªculo hostigamos o favorecemos el tr¨¢fico mar¨ªtimo y el tr¨¢nsito de mercanc¨ªas; se?alamos o aplaudimos comportamientos.En la balda del supermercado, en la vitrina del colmado est¨¢n la adopci¨®n de la sostenibilidad o los des¨®rdenes del sistema. El compromiso o la indiferencia. Comprando y comiendo generamos riqueza o pobreza, arruinamos o potenciamos negocios; estimulamos o penalizamos la movilidad, las tasas y los impuestos. Con cada cucharada que nos llevamos a la boca deforestamos selvas, levantamos presas, ampliamos carreteras, hacemos fluctuar la Bolsa e incentivamos o destruimos el empleo. Arrancamos o sembramos cultivos, deshabitamos pueblos y potenciamos comarcas.
Nuestros peque?os gestos colectivos determinan la viabilidad del fast food o del men¨² del d¨ªa; fallan en favor de las cadenas de comida r¨¢pida, del bar de barrio o todo ello a la vez. Trastocando nuestra manera de comer y comprar subvertimos la realidad que nos rodea. El plato puede ser una tarima de orador desde la que hacer pol¨ªtica, la barricada de una revoluci¨®n pac¨ªfica capaz de desencadenar secuelas inimaginables y ampliar posibilidades en esa pugna entre modelos que se da cada d¨ªa en la sociedad. ?Vamos a ignorar toda esa fuerza?
Ensalada de pollo al vapor
Ingredientes
Para 4 personas
Para el pollo:
- 2 muslos y contramuslos de pollo
- Jengibre
- Ajo
Para los tallarines de agar
- 200 mililitros de caldo de verduras
- 4 gramos de filamentos de agar-agar
Para el ali?o
- 20 gramos de mostaza en pasta
- 4 gramos de vinagre de arroz
- 2 gramos de mirin (condimento de la cocina japonesa)
- 20 gramos de hatcho miso (pasta de soja fermentada)
- Un pepino
- S¨¦samo tostado
- Piment¨®n
- Cebollino picado
Instrucciones
1. El pollo
Cocinar el pollo al vapor durante 30 minutos cubierto con jengibre y ajo laminados. Eliminar la piel y la grasa. Cortar el pollo en tiras. Reservar en frío.
2. Los tallarines de agar
Hidratar los tallarines de agar-agar en el caldo de verduras durante 30 minutos. Escurrir y reservar.
3. El ali?o
Emulsionar todos los ingredientes en un bol. Reservar en frío. Pelar y cortar el pepino en tiras.
4. Acabado y presentaci¨®n
Mezclar el pepino, 400 gramos de pollo y 50 gramos de los tallarines de agar. Mezclar todos los ingredientes con 40 gramos de aliño. Servirlos en un bol. Terminar espolvoreando un poco de sésamo tostado, cebollino picado y pimentón. Servir muy frío.
El pollo
Es un alimento con un elevado contenido en prote¨ªnas de alto valor biol¨®gico. En general, es un alimento con bajo contenido en grasa si lo comparamos con otros productos de origen animal. En cuanto al tipo de ¨¢cidos grasos, los monoinsaturados son los que est¨¢n en mayor porcentaje aunque tambi¨¦n existen ¨¢cidos grasos saturados y poliinsaturados.
Dependiendo de la parte del pollo que se consuma, van a existir diferencias nutricionales. Por ejemplo: si comparamos distintas partes (con piel y en crudo), como ala, muslo y pechuga, la aportaci¨®n cal¨®rica var¨ªa entre las 217, 110 y 105 kilocalor¨ªas por cada 100 gramos de la porci¨®n comestible, respectivamente.
La cantidad de grasa cambia tambi¨¦n entre ala y pechuga, de 15,97 gramos de grasa a 1,2 por cada 100 gramos de porci¨®n comestible (ambas con piel y en crudo).
En el muslo podemos destacar el contenido en vitaminas B3, B6, B5, B2; en cuanto a los minerales, selenio y f¨®sforo, y en menor proporci¨®n potasio y hierro.
elpaissemanal@elpais.es
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.