La poblaci¨®n mundial de aves marinas ha ca¨ªdo casi un 70% en 60 a?os

Este art¨ªculo se ha publicado en 'The Guardian' y forma parte del acuerdo Climate Publishers Network, una red de diarios liderados por EL PA?S y el diario brit¨¢nico para colaborar en la cobertura del cambio clim¨¢tico.

Cada d¨ªa, durante 60 millones de a?os, las aves marinas han logrado proezas incre¨ªbles: circunnavegar el planeta sin hacer paradas, zambullirse m¨¢s de 200 metros en mares traicioneros para agenciarse un bocado, enfrentarse al clima m¨¢s impredecible del mundo como si no fuera nada del otro jueves y dar con el camino de vuelta a casa en aguas con pocas o ninguna indicaci¨®n. Pero ahora las aves marinas, como tantas otras especies, han encontrado la horma de su zapato.

Desde hace mucho tiempo, los ecologistas saben que numerosas poblaciones de aves marinas est¨¢n en declive, pero un estudio publicado recientemente por PLOS ONE plasma una situaci¨®n peor de lo que se preve¨ªa. Seg¨²n los investigadores, la abundancia de aves marinas se ha reducido en un 69,7% en solo 60 a?os, lo cual equivale a la muerte de unos 230 millones de animales.

¡°Me sorprendi¨® mucho el resultado. Era considerablemente m¨¢s alto de lo que esperaba¡±, afirma Edd Hammill, coautor del estudio junto con la Universidad Estatal de Utah. ¡°La conclusi¨®n que debemos extraer de esto es que hay un problema grave en los oc¨¦anos¡±. A Ben Lascelles, director de asuntos marinos en Birdlife International, que no particip¨® en el estudio, los datos le resultan alarmantes porque la reducci¨®n parece casi indiscriminada y afecta a ¡°un gran n¨²mero de especies de varias familias¡±.

Las aves marinas ascienden a casi 350 especies en todo el mundo

Las aves marinas, que incluyen a cualquier p¨¢jaro que dependa en gran medida del entorno marino, ascienden a casi 350 especies en todo el mundo, una asombrosa variedad de animales amantes de lo extremo. Por ejemplo, el infatigablemente errante albatros, que posee la mayor envergadura del planeta; el ping¨¹ino emperador, del tama?o de un ni?o y el ¨²nico p¨¢jaro que se aparea durante el invierno ant¨¢rtico; y el diminuto pa¨ª?o, que pr¨¢cticamente brinca sobre el agua al alimentarse (al fin y al cabo, debe su nombre a San Pedro).

Pero, teniendo en cuenta que las aves marinas viven tanto en mar abierto como en el litoral, esta ecl¨¦ctica mezcla de p¨¢jaros hace frente a toda una letan¨ªa de peligros: pesca excesiva, ahogamiento provocado por sedales o redes, contaminaci¨®n por pl¨¢sticos, especies invasoras como las ratas en zonas de anidaci¨®n, infraestructuras de petr¨®leo y gas y poluci¨®n t¨®xica que avanza por la cadena alimentaria... Por si esto no bastara, el doble rev¨¦s del cambio clim¨¢tico y la acidificaci¨®n del oc¨¦ano amenaza con inundar las zonas de anidaci¨®n y alterar las fuentes de alimento.

¡°Las aves son indicadores especialmente buenos de la salud de los ecosistemas marinos¡±, explica el principal autor del estudio, Michelle Paleczny, de la Universidad de Columbia Brit¨¢nica y el Sea Around Us Project. ¡°Cuando presenciamos un declive de las aves marinas de esta magnitud, nos damos cuenta de que los ecosistemas marinos tienen alg¨²n problema. Nos da una idea del impacto general que estamos teniendo¡±.

Pero, con una cantidad tan grande de especies en entornos tan variados, nos preguntamos: ?c¨®mo contaron los cient¨ªficos tantos p¨¢jaros?

Recuento de aves

En primer lugar, el equipo de investigadores evalu¨® todos los datos de poblaci¨®n disponibles sobre aves marinas y encontr¨® informaci¨®n demogr¨¢fica de 3.213 poblaciones. Pero no pod¨ªa utilizar todos esos recuentos, ya que los ecologistas hab¨ªan estudiado muchas de esas poblaciones remotas solo una o dos veces, lo cual no es suficiente para mostrar una tendencia real. Finalmente, el equipo eligi¨® 513 poblaciones que hab¨ªan sido contabilizadas al menos en cinco ocasiones. En total, dichas poblaciones representaban alrededor de un 19% de las aves marinas del mundo.

Las aves marinas tienen el doble de posibilidades de extinci¨®n que las terrestres

As¨ª y todo, Hammil cree que los hallazgos del equipo constituyen ¡°una representaci¨®n rigurosa de lo que est¨¢ sucediendo en el mundo¡±, y a?ade: ¡°Aunque no incluimos todas las poblaciones, s¨ª figuran todas las familias de aves marinas, as¨ª como poblaciones de todos los litorales importantes del mundo¡±.

Paleczny explica tambi¨¦n que cuando los investigadores observaron las diferencias entre las poblaciones controladas y no controladas, no encontraron ¡°pruebas de que las primeras est¨¦n disminuyendo m¨¢s¡±.

Los hallazgos tambi¨¦n se ven reforzados por investigaciones anteriores. En 2012, un estudio publicado por Bird Conservation International descubri¨® que el 28% de las especies de aves marinas corren peligro de extinci¨®n y que un 47% est¨¢n disminuyendo. En resumen, esto significa que las aves marinas tienen el doble de posibilidades de extinci¨®n que las terrestres.

¡°La tendencia para muchas especies de aves marinas ha sido claramente descendente desde hace a?os, y este estudio aporta m¨¢s pruebas al respecto¡±, afirma Lascelles.

Los oc¨¦anos todav¨ªa est¨¢n tristemente desprotegidos y las pesquer¨ªas necesitan m¨¢s gesti¨®n y vigilancia"

Pese a ello, el estudio de Paleczny y Hammil probablemente ofrezca una panor¨¢mica a¨²n m¨¢s alarmante sobre el estado de las aves marinas del mundo. Por ejemplo, seg¨²n ellos, la familia del charr¨¢n ha ca¨ªdo en un 85%, las fragatas en un 81%, los petreles y las pardelas en un 79% y los albatros en un 69%.

Esos funestos descubrimientos apuntan a uno de los patrones del estudio: a las aves de mar abierto ¨Ccomo los albatros, las fragatas, los petreles y las pardelas ¨C normalmente les va peor que a los p¨¢jaros que viven cerca de la costa.

¡°Las aves [de mar abierto] sufren especialmente debido a su gran alcance geogr¨¢fico. Como estas especies viajan muy lejos, hay m¨¢s posibilidades de que encuentren amenazas¡±, comenta Hammill, que a?ade que los p¨¢jaros costeros ¡°en algunos casos¡± tienen menos problemas gracias a una mejor gesti¨®n de las zonas de anidaci¨®n y a unos materiales de pesca m¨¢s adecuados.

Pero, aunque se reduzcan las amenazas, seg¨²n Lascelles la recuperaci¨®n exige diligencia y paciencia. ¡°La mayor¨ªa de las aves marinas viven muchos a?os y se reproducen lentamente, lo cual significa que incluso peque?os incrementos de la mortalidad pueden causar importantes disminuciones de la poblaci¨®n, de las que tardan mucho en recuperarse¡±.

Incluso algunas aves costeras muy dispersas experimentan grandes declives. Por ejemplo, el estudio descubri¨® que las poblaciones de cormoranes se han reducido en un 73%.

Avances

Teniendo en cuenta todas las amenazas que afectan a las aves marinas del mundo, es apropiado preguntar: ?por d¨®nde empezamos en materia de conservaci¨®n?

¡°Ya tenemos soluciones para muchas de las amenazas, pero hay que ampliarlas y ponerlas en pr¨¢ctica en muchos sectores y zonas geogr¨¢ficas¡±, afirma Lascelles. ¡°Hay que hacer m¨¢s esfuerzos para librar a las colonias de aves marinas de especies invasoras, reducir la captura accesoria en las pesquer¨ªas o los p¨¢jaros atrapados en redes y crear zonas de conservaci¨®n¡±.

Paleczny tambi¨¦n hace un llamamiento a la creaci¨®n de zonas mar¨ªtimas internacionales protegidas que abarquen la amplia variedad de aves.

Las zonas protegidas en los oc¨¦anos van muy a la zaga de las terrestres. En la actualidad, solo un 2% de los oc¨¦anos del mundo se hallan bajo alg¨²n tipo de protecci¨®n y menos de la mitad proh¨ªben por completo la pesca. En cambio, casi un 15% del paisaje terrestre mundial est¨¢ protegido.

Con una extensi¨®n tan reducida del oc¨¦ano te¨®ricamente cerrada a la pesca ¨Cmenos del 1%¨C no es de extra?ar que muchas aves marinas sean v¨ªctimas de la pesca excesiva. De hecho, un revelador estudio de 2012 descubri¨® que cada vez que la abundancia de peces descend¨ªa por debajo de un tercio de los niveles m¨¢ximos, las poblaciones de aves marinas empezaban a menguar en respuesta.

¡°Lo que esto indica es que [las aves marinas] han evolucionado de tal manera que viven en condiciones de alimentaci¨®n medias o por encima de la media¡±, afirmaba el coautor Ian Boyd a Mongabay en 2012. ¡°No es que esto sea muy sorprendente, pero algunas cosas no resultan evidentes hasta que tienes las pruebas delante de ti¡±.

En aquel momento, Boyd dijo que sus hallazgos deber¨ªan generar una nueva campa?a para salvar ¡°a un tercio de las aves¡± (y otros depredadores marinos) de las pesquer¨ªas del mundo.

Pero, para Hammill, el ¡°problema m¨¢s acuciante¡± es la contaminaci¨®n ocasionada por los pl¨¢sticos.

Ignorada durante mucho tiempo por los ecologistas ¨Ctal vez por la intratabilidad del problema¨C, poco a poco, la poluci¨®n de los pl¨¢sticos en el oc¨¦ano ha ido despertando un mayor inter¨¦s. Un estudio publicado el mes pasado revelaba que un 90% de las aves marinas del mundo probablemente ten¨ªan pl¨¢stico en el est¨®mago.

¡°He visto de todo, desde encendedores hasta tapones de botella y coches en miniatura. He encontrado juguetes [en las tripas de aves marinas]¡±, dec¨ªa la coautora del estudio Denise Hardesty, de CSIRO, a The Associated Press.

Las aves marinas confunden constantemente el pl¨¢stico con huevas de pescado y devoran grandes cantidades. El pl¨¢stico en el est¨®mago de un animal no solo libera toxinas mortales, sino que tambi¨¦n puede causar una muerte lenta por hambruna al obstruirle el intestino. Los p¨¢jaros incluso administran trozos de pl¨¢stico a sus cr¨ªas, que mueren en masa.

Al final, unas acciones a gran escala para ayudar a las aves marinas podr¨ªan contribuir enormemente a limpiar nuestros ecosistemas marinos, cada vez m¨¢s llenos de basura.

¡°Los oc¨¦anos todav¨ªa est¨¢n tristemente desprotegidos y las pesquer¨ªas necesitan m¨¢s gesti¨®n y vigilancia. Para que se lleven a cabo todas estas actividades se requiere inversi¨®n y apoyo de los Gobiernos de todo el mundo¡±, se?ala Lascelles. ¡°A corto plazo, estas acciones generar¨¢n resistencia en las poblaciones de aves marinas, algo necesario en vista de las nuevas amenazas como el cambio clim¨¢tico¡±.

Traducido por NewsClips.