Kuelap, el Machu Picchu del norte de Per¨²

Para llegar hay que echarle ganas. Son 8 horas por carretera desde Chiclayo(o 12 desdeCajamarca) hasta la ciudad de Chachapoyas, en la ceja de selva amaz¨®nica. Despu¨¦s otras 3 horas m¨¢s por pista de tierra hasta el parking del complejo y luego media hora a pie por una senda pavimentada hasta la entrada de las ruinas. Pero merece la pena. Kuelap, la gran ciudadela de piedra del norte de Per¨², construida por la cultura chachapoyas hace m¨¢s de mil a?os, es uno de los secretos mejor guardados de este pa¨ªs sudamericano.

Kuelap es la gran desconocida de la arqueolog¨ªa peruana. Y comprend¨ª el por qu¨¦ cuando llegu¨¦ all¨ª: como ya he mencionado, no queda precisamente en la orilla de la carretera Panamericana.

Para visitarlahay que ir primero hasta Chachapoyas, un lindo pueblo colonial con casitas blancas de planta baja y una preciosa plaza de Armas, capital del departamento del Amazonas peruano. Toma su nombre de la cultura precolombina que domin¨® esta zona fronteriza entre los Andes y el Amazonas mucho antes siquiera de que los incas existieran. Se calcula que los chachapoyas vivieron entre el siglo VIII y el XVI, cuando llegaron los espa?oles.

Hay que reconocer que como estrategas comerciales habr¨ªan sido un desastre (con ese nombre, no me extra?a que se extinguieran), pero como artesanos de la piedra eran unos virgueros. El m¨¢ximo exponente conocido de su arquitectura fue esta ciudadela de Kuelap, que se levanta sobre un cerro de forma alargada a 3.000 metros de altitud, en el valle del r¨ªo Utcubamba, afluente del Amazonas.

Fui hasta Kuelap porque unos amigos viajeros y blogueros me lo recomendaron; y no me arrepent¨ª del largo viaje. Lo primero que impresiona es la s¨®lida muralla de sillar de piedra caliza que rodea todo el conjunto. Se encuentra casi intacta y tiene una altura de 20 metros en su parte m¨¢s alta. Tres estrechos pasadizos, por los que un hipot¨¦tico ej¨¦rcito atacante hubiera tenido que pasar de uno en uno, dan acceso al interior.

Una vez dentro lo que llama la atenci¨®n son las m¨¢s de 500 estructuras circulares que se despliegan por el recinto: son el basamento de otras tantas viviendas familiares (una de ellas se ha reconstruido para que los visitantes se hagan una idea de c¨®mo fue la ciudad). Esto ha llevado a los investigadores a pensar que no fue una fortaleza militar, sino un recinto de uso ceremonial y residencial.

Tambi¨¦n se conserva casi al completo el templo Mayor (en forma de cono truncado e invertido), un torre¨®n de vigilancia y cimientos de lo que fue el Pueblo Alto, la zona destinada a sacerdotes y gobernantes.

Dada su remota ubicaci¨®n, Kuelap estuvo oculta entre el ramaje de la selva monta?osa hasta 1843, cuando un juez de paz enviado a la zona para dirimir un asunto entre ganaderos se dio cuenta de que aquel amontonamiento de piedras era en realidad una construcci¨®n antigua hecha por el ser humano.

Desde luego, Kuelap no es Machu Picchu (sobre todo, no est¨¢ rodeada de unas monta?as tan espectaculares como Machu Picchu). Pero si andas por el norte de Per¨², te gusta la historia y la arqueolog¨ªa y quieres disfrutar de una aut¨¦ntica ciudadela preincaica apenas explotada a¨²n por el turismo, no dejes de visitar Kuelap.

Nota: hay un proyecto para mejorar la carretera y construir un telef¨¦rico (de hecho, las obras ya han empezado) que acortar¨ªa bastante el viaje desde Chachapoyas. As¨ª que si quieres verlo sin masificar, date prisa.

C¨®mo ir

Hay tres formas:

-La m¨¢s barata pero cansada es tomar el transporte p¨²blico desde Chachapoyas hasta la aldea de Viejo Tingo (6 soles: 1,7 €) y luego pegarte tres horas a pie y en ascenso.

-Apuntarte a una de las excursiones diarias que organizan las muchas agencias de viaje de Chachapoyas (casi todas tienen oficina en la plaza de Armas y aleda?os); cuesta entre 40 y 60 soles, seg¨²n temporada (de 12 a 17 €) e incluye el traslado en minibus, la entrada a las ruinas y una estancia all¨ª de unas dos horas, con gu¨ªa.

- Contratar un viaje privado con ch¨®fer en Chachapoyas; cuesta 150 soles (43 €) y puede ser interesante para grupos.

Precio y horarios

La entrada al recinto cuesta 15 soles (4,2 €). Est¨¢ abierto a diario de 8:00 a 17:00

Donde comer y dormir

En la pista de tierra que da acceso a las ruinas, y poco antes de llegar a ellas, hay varias aldeas con sencillos restaurantes y alojamientos (aunque lo normal es ir y venir en el d¨ªa y quedarse a dormir en Chachapoyas). Los buses de las agencias suelen parar antes en alguno de esos restaurantes para que los viajeros que quieran encarguen el almuerzo al subir, a fin de tomarlo luego al bajar del complejo.

Uno de los pueblos con m¨¢s servicios es Choctamal, a una hora de las ruinas. All¨ª est¨¢ el restaurante El Tambo (tel. 992 926 205), limpio y aconsejable, con men¨² por 15 soles (4,2 €); tambi¨¦n alquila cuartos (35 soles-10 €, la doble).