La cuadratura del c¨ªrculo

En ¡®Campo de retamas¡¯, Rafael S¨¢nchez Ferlosio incluye un aforismo acerca de la esperanza: ¡°?Que d¨®nde se ha ocultado la esperanza? En la etimolog¨ªa de la desesperaci¨®n¡±. La celebraci¨®n de la cumbre mundial sobre el cambio clim¨¢tico deber¨ªa representar una cierta esperanza. Escucho lo que dicen los cient¨ªficos pioneros en la detecci¨®n del desastre en marcha, como Wallace S. Broecker, que alert¨® en 1975 del ¡°calentamiento global¡±, probando su vinculaci¨®n a la actividad humana, y lo que transmiten es una esperanza desesperanzada. El Mago Enloquecido, al que algunos despistados todav¨ªa llaman Progreso, act¨²a como una fuerza mutante sin fronteras.

No me extra?ar¨ªa que, camuflado de Sostenible, el disfraz de moda, lo Insostenible se infiltre en la cumbre para olvidar el presente con el se?uelo del Futuro. Empiezo a desconfiar por sistema cuando nos convocan a la tarea de dejar ¡°un futuro mejor para nuestros hijos¡±. Un eufemismo para aplazar las decisiones. Lo que en realidad dicen esos labios del cinismo futurista es un juego burl¨®n: ¡°?A ver qu¨¦ futuro dejamos a nuestros antepasados!¡±.

Empiezo a desconfiar por sistema cuando nos convocan a la tarea de dejar ¡°un futuro mejor para nuestros hijos¡±

La naturaleza no aplaza su tarea. Nos permite respirar ahora. Todo lo regala. Hasta su belleza desnuda. Pero los oc¨¦anos ya no dan abasto para depurar tanto gas nocivo. Y tiene que ser mucha la mierda para que se infarten los oc¨¦anos.

Hay lugares donde se act¨²a, donde se toma en serio un modelo de energ¨ªa y transporte alternativos, pero una parte del mundo vive dentro del hipermercado y los que est¨¢n fuera se agolpan a sus puertas hipnotizados o empujados por el mago enloquecido. La devastaci¨®n avanza veloz, como lo hace la incesante vanguardia de la industria de armamento, mientras la conciencia ecol¨®gica se mueve laboriosamente, salvando obst¨¢culos poderosos e incluso represalias. Hay imaginaciones muy selectivas: perezosas para capturar las emisiones venenosas, muy ¨¢giles para capturar a los que protestan contra ellas.

No quiero meterme en asuntos de familia, pero a estas alturas ser¨ªa interesante saber si el primo catedr¨¢tico del presidente del Gobierno espa?ol mantiene su opini¨®n sobre la inconsistencia de la alarma ante el cambio clim¨¢tico. Lo que me preocupa no es la evoluci¨®n cient¨ªfica del familiar, sino la opini¨®n actual del primer gobernante. Por una vez, lo confieso, es algo que no me deja dormir.

En mi pesadilla, seguramente producto del calentamiento global, el presidente del Gobierno pide la palabra en la cumbre sobre el cambio clim¨¢tico y vuelve a retomar el argumento que le convirti¨® en un cl¨¢sico involuntario del humor surrealista: ¡°Yo s¨¦ poco de este asunto, pero mi primo supongo que sabr¨¢. Y ¨¦l me dijo: ¡®He tra¨ªdo aqu¨ª a 10 de los m¨¢s importantes cient¨ªficos del mundo y ninguno me ha garantizado el tiempo que har¨¢ ma?ana en Sevilla. ?C¨®mo alguien puede decir lo que va a pasar en el mundo dentro de 300 a?os?¡±.

La c¨¦lebre declaraci¨®n fue hecha en el a?o 2007, cuando el presidente lideraba la oposici¨®n. Lo curioso es que no ten¨ªa una intencionalidad chistosa, sino que reflejaba un estado de inconsciencia, compartido por mucha gente influyente. Una anomal¨ªa hist¨®rica en Espa?a es lo poco conservacionistas que son los conservadores. La relaci¨®n con la ciencia tambi¨¦n ha sido bastante traum¨¢tica. ?lvaro Cunqueiro, un conservador conservacionista, hablaba de un personaje que le pidi¨® un pr¨®logo para una obra titulada La cuadratura del c¨ªrculo. El escritor le pregunt¨® el porqu¨¦ de semejante empe?o, el cuadrar el c¨ªrculo, y el genio local se sincer¨®: ¡°?Yo lo que quer¨ªa era cascarle a los de la Academia de Ciencias de Viena!¡±.

Supongo que el presidente no quer¨ªa cascarle a los de la Academia de Ciencias, pero su descreencia ha tenido consecuencias pr¨¢cticas. Espa?a perdi¨® en los ¨²ltimos a?os su condici¨®n de referencia mundial en la investigaci¨®n e implantaci¨®n de energ¨ªas renovables. Y lo que es peor. Mientras el ?rtico y parte de la Atl¨¢ntida se derriten, mientras toda la comunidad cient¨ªfica seria advierte de ¡°cambios abruptos¡±, da la impresi¨®n de que aqu¨ª seguimos varados en el r¨¦gimen de la Cuadratura del C¨ªrculo.

Supongo superada la fase del desd¨¦n. El discurso oficial, en el momento de la cumbre, se ajustar¨¢ por lo menos al sentido com¨²n. Pero al sentido com¨²n hay que liberarlo del conformismo. Tal como est¨¢n las cosas, yo tengo alguna esperanza puesta en el Esp¨ªritu Santo. ?l, con su iconograf¨ªa de alma animal, ha inspirado la enc¨ªclica Laudate si, en la que el papa Francisco llama a luchar contra el cambio clim¨¢tico y se?ala, sin eufemismos, las causas. Un papa ecologista. Eso s¨ª que es Sentido Com¨²n.

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