El contrato ¨²nico, ?nos har¨¢ a todos precarios?
Lo que s¨ª es profundamente conservador, injusto y excluyente es el mercado laboral que tenemos en Espa?a
Parece que la gran ¡°propuesta¡± modernizadora de algunos partidos en estas elecciones, adem¨¢s de ¡°derogar¡± muchas leyes, es repetir una y otra vez que el Contrato para la Igualdad de Oportunidades (o contrato ¨²nico indefinido) que ofrece Ciudadanos ¡°va a hacernos a todos precarios¡±. Cuando una mentira se repite muchas veces, tiene el riesgo de acabar pareciendo medio cierta.
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Nuestro contrato ¨²nico no es ni de izquierdas ni de derechas, aunque esperamos que sirva para mejorar la vida laboral y las oportunidades de mucha gente. Lo que s¨ª es profundamente conservador, injusto y excluyente es el mercado laboral que tenemos en Espa?a. El problema no viene de ayer, ni ha variado con uno u otro partido en el poder: Espa?a bate records en niveles de paro y precariedad desde hace d¨¦cadas. Nuestro mercado laboral es una absoluta anomal¨ªa en Europa y por eso requiere de soluciones valientes y ambiciosas.
Aunque parezca incre¨ªble, tanto PP como PSOE, despu¨¦s de treinta a?os altern¨¢ndose en el poder y tras incontables reformas laborales, vuelven de nuevo con exactamente la misma soluci¨®n ¡°estrella¡± para la precariedad: ?poner m¨¢s inspectores de trabajo!
Poner m¨¢s inspectores de trabajo a controlar si los contratos que se hacen son o no temporales (recordemos que es fraude de ley emplear a alguien con contrato temporal para un oficio que no es temporal) no ha funcionado y tampoco funcionar¨¢ en la pr¨®xima legislatura. No funcionar¨¢ por una raz¨®n muy sencilla: por muchos inspectores que pongamos solo lograr¨ªamos revisar una peque?¨ªsima parte de los m¨¢s de 16 millones de contratos temporales que se firman al a?o. Si logr¨¢ramos doblar el ¨¦xito de 2013 en el que hubo 33.360 inspecciones que cambiaron contratos en fraude de Ley por indefinidos no llegar¨ªamos en un a?o ni al 5% de los contratos que se hacen en un mes (1,4 millones).
Por eso, en econom¨ªas tan ¡°dualizadas¡± como la nuestra (o la italiana, o la francesa), todas, literalmente todas, las instituciones internacionales recomiendan pasarse al contrato ¨²nico. Gobiernos socialdem¨®cratas modernos y reformistas como el de Matteo Renzi, lo han intentado implementar. Asimismo, acad¨¦micos de todos los colores pol¨ªticos, incluyendo a Piketty, o hasta cuatro premios Nobel de Econom¨ªa como Pisarides, Tirole, Kydland y Maskin, lo defienden desde hace a?os.
Acad¨¦micos de todos los colores pol¨ªticos, incluyendo a Piketty, o hasta premios Nobel de Econom¨ªa,como Pisarides, Tirole, Kydland y Maskin, lo defienden?
?Y por qu¨¦ est¨¢ toda esa gente a favor del contrato ¨²nico? ?Es porque son del IBEX, capitalistas y opresores peligrosos? No. Es porque honestamente creen que un contrato indefinido ¨²nico puede acabar con el abuso de rotaci¨®n laboral y de ese modo reducir la temporalidad y la precariedad.
?C¨®mo? Nuestro sistema tiene un enorme muro de separaci¨®n de derechos entre los muy-protegidos indefinidos y los nada-protegidos temporales. Eso hace que las empresas, aunque tengan un trabajador muy bueno, prefieran despedirlo antes que asumir el coste potencial de hacerlo indefinido (en t¨¦rminos de protecci¨®n por indemnizaci¨®n, pero tambi¨¦n judicial).
El resultado de tener ese muro es que una tercera parte del mercado laboral se mantiene permanentemente marginada de los derechos que tienen los indefinidos y excluida de una vida laboral digna y estable.
Recordemos que cerca de siete millones de personas, en su mayor¨ªa de colectivos particularmente fr¨¢giles como j¨®venes y mujeres, no logran llegar al salario m¨ªnimo anual a pesar de trabajar, porque se pasan la vida entrando y saliendo del mercado laboral con contratos kleenex. Y recordemos tambi¨¦n que las consecuencias de esa vida precaria son nefastas para ellos y para la econom¨ªa en su conjunto: no se acumulan derechos para el futuro, no se pueden realizar decisiones vitales clave (como tener hijos), se deteriora el capital humano y la productividad¡
El Contrato para la Igualdad de Oportunidades que ofrece Ciudadanos propone igualar los derechos de todos para que no sea el tipo de contrato, sino el esfuerzo, lo que determine el futuro laboral de un trabajador. Nuestro dise?o ofrece una curva de indemnizaci¨®n creciente por despido que ir¨¢ a?adiendo unos d¨ªas de protecci¨®n cada a?o (empezando en un punto cercano al que ahora tienen los temporales y terminando al menos donde est¨¢n ahora los indefinidos). De ese modo esperamos romper ese muro y que las empresas no despidan de m¨¢s. En otras palabras, las empresas preferir¨¢n conservar un trabajador bueno y ya preparado que cambiarlo por uno nuevo si en vez de un muro, tienen una escalera.
Nuestro sistema tiene un enorme muro de separaci¨®n de derechos entre los muy-protegidos indefinidos y los nada-protegidos temporales
Como hemos explicado muchas veces nos comprometemos a que la indemnizaci¨®n media de los trabajadores no baje (ahora est¨¢ en apenas 13 d¨ªas por a?o, por el alt¨ªsimo numero de temporales). Tampoco perjudicar¨¢ a los que ya tienen contratos indefinidos, porque no se aplica de forma retroactiva. Y lo que es m¨¢s importante, m¨¢s all¨¢ de la indemnizaci¨®n, la protecci¨®n que tendr¨¢ un trabajador con nuestro contrato indefinido ser¨¢ mucho m¨¢s alta que la que tienen ahora los temporales.
Pensemos por ejemplo en una mujer embarazada. Ahora tiene acceso a muy pocos derechos garantizados con un contrato temporal. Si tuviera un contrato indefinido como el que ofrecemos, tendr¨ªa muchos m¨¢s derechos en t¨¦rminos de acceso a protecci¨®n judicial, por ejemplo.
?Soluciona el contrato ¨²nico todos los problemas de nuestra econom¨ªa? Evidentemente no. Hasta que no reformemos el modelo productivo y dejemos de gastarnos el dinero en diputaciones e infraestructuras elefanti¨¢sicas, para invertirlo en educaci¨®n e innovaci¨®n, seguiremos teniendo muchos problemas.
?Acabar¨¢ el contrato ¨²nico con toda la temporalidad? Tampoco. Nuestra econom¨ªa tiene unos sectores como el turismo o la construcci¨®n que tienen un sesgo temporal natural. Pero incluso as¨ª, nuestras tasas de temporalidad son mayores que las de cualquier otro pa¨ªs de la zona euro, sector a sector. Repetimos: el objetivo del contrato ¨²nico es acabar con el abuso de la temporalidad en aquellos empleos que no tienen nada de temporales.
Como el contrato ¨²nico no es suficiente para solucionar los enormes problemas de nuestro mercado laboral ofrecemos muchas m¨¢s mejoras en nuestra regulaci¨®n. En primer lugar, nuestro programa incorpora un bonus-malus, parecido a los seguros de autom¨®vil: las empresas que abusen en exceso de la rotaci¨®n laboral (y por lo tanto, del sistema de prestaciones por desempleo) tendr¨¢n que pagar por ello, con mayores cotizaciones a la Seguridad Social. Por el contrario, las empresas cuya gesti¨®n de recursos humanos no se base en la rotaci¨®n se ver¨¢n recompensadas pagando menores cotizaciones.
En Espa?a adem¨¢s tendr¨ªa la ventaja de que ayudar¨ªa a que emergiera mucha econom¨ªa sumergida, porque los empleados tendr¨ªan incentivos a no cobrar en negro
Adem¨¢s, proponemos un seguro (o ¡°mochila austr¨ªaca¡±) que pagar¨¢n las empresas a una cuenta personal del trabajador. De momento es peque?a (1% del salario), pero esperamos poder ampliarla con el tiempo. Es importante, porque solamente de esta manera podemos asegurar la portabilidad de derechos, algo clave para el futuro laboral al que nos enfrentamos.
En tercer lugar ofrecemos un complemento salarial que permitir¨¢ ofrecer salarios m¨¢s altos a las rentas m¨¢s bajas (una transferencia directa del Estado). No existe en la evidencia emp¨ªrica y la experiencia internacional una pol¨ªtica m¨¢s efectiva contra la pobreza laboral, que al mismo tiempo incentive a trabajar y se pueda financiar. En Espa?a adem¨¢s tendr¨ªa la ventaja de que ayudar¨ªa a que emergiera mucha econom¨ªa sumergida, porque los empleados tendr¨ªan claros incentivos a no cobrar en negro.
En cuarto lugar ofrecemos una revoluci¨®n en las pol¨ªticas activas de empleo y formaci¨®n, que los viejos partidos han sido incapaces de reformar (o han usado directamente para enriquecerse) con un paquete de medidas para volver a ofrecer una esperanza a los m¨¢s de 3 millones de personas que llevan m¨¢s de un a?o sin trabajar.
Y finalmente, ofrecemos, para reducir la precariedad de los aut¨®nomos, eliminarles las cuotas fijas, para convertirlas en costes variables a partir de que ganen por encima del salario m¨ªnimo.
Entiendo que haya partidos que tengan una visi¨®n distinta del mercado laboral. Pero precariedad (masiva) es lo que tenemos ahora. Y las soluciones que ofrecen los viejos partidos no han funcionado. Si tienen ideas nuevas para cambiar las cosas, que las expliquen. Estaremos encantados de escuchar.
Antonio Rold¨¢n Mon¨¦s es candidato de Ciudadanos al Congreso y coautor, junto a Luis Garicano, de Recuperar el futuro: Doce propuestas que cambiar¨¢n Espa?a. @toniroldanm
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