Apuesta educativa desde el comercio justo: una universidad para el campo

Por Marco Coscione

Los peque?os productores de la Cooperativa del Sur del Cauca (Cosurca), en Colombia, lo tienen claro. Sin una educaci¨®n popular, solidaria y campesina, los j¨®venes seguir¨¢n dejando las tierras de sus padres, ampliando los cordones de pobreza en las ciudades y favoreciendo, indirectamente, la concentraci¨®n de tierras en las zonas rurales. ¡°Lo que necesitamos¡±, afirma Ren¨¦ Ausecha, gerente de Cosurca, ¡°es volver a valorar las potencialidades del campo, de manera solidaria y sostenible, y defender cotidianamente el arraigo a nuestras comunidades¡±. Adem¨¢s, para responder a esta necesidad, los peque?os productores de Cosurca entienden que no hay que esperar a nadie. El proceso educativo debe construirse desde abajo y es urgente empezar ya.

Es por estos motivos, entre otros, que todas las asociaciones de base que constituyen esta cooperativa de comercio justo se comprometieron con la fundaci¨®n de la ¡°Corporaci¨®n Universitaria Caminos del Sur Occidente Colombiano ¨C UNICAMINOS¡±, de propiedad de los mismos productores, para que responda concretamente a sus necesidades y las prioridades de las comunidades rurales y sus j¨®venes. La misi¨®n de esta universidad ser¨¢ fortalecer el acceso a la educaci¨®n, investigaci¨®n y extensi¨®n alternativa en el Macizo y Sur Occidente de Colombia, formando profesionales solidarios, con pensamiento aut¨®nomo y cr¨ªtico.

Desde hace algunos a?os, Cosurca comenz¨® a investigar los deseos y los desaf¨ªos de los j¨®venes que viven y trabajan en las veredas y municipios rurales donde se encuentran sus productores de caf¨¦. De esta manera, la cooperativa entendi¨® claramente dos aspectos: 1) los j¨®venes s¨ª quieren estudiar, a pesar de no tener las posibilidades y los espacios adecuados en la educaci¨®n proporcionada por el Estado o por el mercado; 2) los j¨®venes s¨ª quieren una educaci¨®n de calidad pero, sobre todo, acorde con sus realidades y que se construya desde las comunidades. Es la educaci¨®n que tiene que moverse hacia las zonas rurales y no los j¨®venes hacia las ciudades.

Demasiadas veces la cultura urbana obliga los j¨®venes a dejar el campo en busca de una ¡°vida mejor¡±; demasiadas veces resulta que esa ¡°vida mejor¡± es solo consumo y deudas, una vida que aleja de una relaci¨®n armoniosa con la naturaleza. Es por eso que el arraigo a la tierra y su defensa est¨¢n en el centro del proyecto educativo de Cosurca.

La universidad, seg¨²n los planes previstos, tendr¨ªa inicialmente 3 sedes, que aprovechar¨¢n espacios no utilizados en tres municipios: ¡°Hay muchos espacios p¨²blicos y privados sin utilizar; en ning¨²n momento pensamos en construir nuevos edificios para la universidad. Usamos los que ya existen, limitamos la construcci¨®n de nuevos y fomentamos la cooperaci¨®n entre distintas entidades¡±, nos comenta Lupercio Velasco, Coordinador del Departamento de Gesti¨®n y Cooperaci¨®n de Cosurca.

Los cursos ser¨¢n semi-presenciales, con un ¨¦nfasis marcado en el desarrollo de actividades en terreno. En la actualidad se est¨¢ pensando arrancar con tres cursos principales: 1) Agroeconom¨ªa, carrera que se caracterizar¨ªa por evidenciar y fomentar todas las potencialidades del sector agropecuario pero desde las pr¨¢cticas de la econom¨ªa solidaria y el comercio justo, y desde la gesti¨®n cooperativa, social y asamblearia de las actividades econ¨®micas; 2) Administraci¨®n de servicios ecotur¨ªsticos, para diversificar las posibilidades de empleo para los j¨®venes; y 3) Gesti¨®n sostenible de los recursos naturales, con ¨¦nfasis en la relaci¨®n de reciprocidad entre los seres humanos y la madre naturaleza.

Todas las carreras deben estar acompa?adas por un trabajo muy intenso en extensi¨®n social y en el acompa?amiento constante a los j¨®venes para que construyan territorios y fortalezcan las din¨¢micas comunitarias. Para defender esta apuesta, Cosurca espera recibir el apoyo de otros pa¨ªses, universidades y movimientos sociales que est¨¦n desarrollando teor¨ªas y pr¨¢cticas de econom¨ªa solidaria, comercio justo, finanzas solidarias y monedas sociales, agroecolog¨ªa, soberan¨ªa alimentaria, gesti¨®n comunitaria de emprendimientos econ¨®micos, entre otros.

Con estos actores se podr¨¢n construir convenios institucionales para intercambiar experiencias, recibir de manera virtual o presencial cursos de profesores extranjeros, permitir a los j¨®venes del campo hacer investigaciones, per¨ªodos de estudios, intercambio o pr¨¢cticas en el extranjero; para conocer las realidades de otros procesos similares en el mundo y volver a las comunidades m¨¢s animados y con la esperanza de que otra educaci¨®n s¨ª es posible y otros caminos hacia un ¡°convivir en armon¨ªa¡± s¨ª son posibles¡­ tambi¨¦n en y desde el sur occidente colombiano.

Foto: Cosurca