Togo se adentra en la era digital

La llegada de internet en al continente africano y el acceso a las tecnolog¨ªas de la informaci¨®n ha puesta al alcance de los ciudadanos nuevas herramientas de comunicaci¨®n, de toma de palabra y de participaci¨®n ciudadana. Los espacios p¨²blicos de informaci¨®n en internet que nacieron en los a?os del siglo XXI con los portales y los foros de discusi¨®n han mejorado de forma notable la implicaci¨®n de los ciudadanos africanos en la vida pol¨ªtica de sus pa¨ªses. En torno a 2005 surgieron en Togo los primeros blogs, las redes sociales y las plataformas de v¨ªdeo blogs que han cambiado para la poblaci¨®n, su manera de vivir su ciudadan¨ªa. Hoy, el pa¨ªs ha pasado de poco m¨¢s de cien mil usuarios de internet a 430.000, seg¨²n datos de Internet World Stats de noviembre de 2105 y de apenas 50.000 usuarios de tel¨¦fono m¨®vil a cuatro millones y medio. Repasamos c¨®mo la tecnolog¨ªa y el acceso a internet influyen en la vida de sus habitantes:

E-democracia

Concebido en sus principios como un cuaderno de a bordo donde el internauta escrib¨ªa sus opiniones y observaciones sobre el tema que le gustaba o en el que ten¨ªa alg¨²n tipo de conocimiento, el blog en Togo se fue convirtiendo poco a poco en un espacio de expresi¨®n, de informaci¨®n para muchos periodistas profesionales o improvisados en un pa¨ªs donde la libertad de prensa y de opini¨®n brilla por su ausencia y en el que crear un peri¨®dico o una radio es una aut¨¦ntica carrera de obst¨¢culos.

Con el nacimiento de Facebook y de Twitter ha surgido una especie de ciberactivismo que ha dado paso a una nueva ciudadan¨ªa digital; con cada vez m¨¢s j¨®venes togoleses que van comprendiendo la necesidad de tomar la palabra para contar al mundo lo que ocurre en el pa¨ªs, sobre todo lo que no funciona bien y tambi¨¦n poder protestar aunque sea virtualmente, ya que cualquier intento de manifestaci¨®n en el terreno suele ser reprimido violentamente por las fuerzas policiales. As¨ª, en los ¨²ltimos tiempos, hemos podido seguir muchas veces, casi en directo, en las redes, acontecimientos pol¨ªticos como las distintas manifestaciones de los partidos de la oposici¨®n, las movilizaciones ciudadanas de todo tipo contra el r¨¦gimen actual y muchas de sus decisiones arbitrarias, el desarrollo de las ¨²ltimas elecciones y el consiguiente fraude, y en las ¨²ltimas semanas, la represi¨®n violenta de la que fueron los estudiantes universitarios que reclamaban mejores condiciones de estudio en el campus universitario.

Al igual que en muchos pa¨ªses africanos, la sociedad civil togolesa as¨ª como la juventud togolesa ya no quieren a presidentes vitalicios ni elecciones poco transparentes. Con esta idea surgi¨® en el a?o 2014, la campa?a ciudadana #Article59, promovida por j¨®venes activistas y blogueros togoleses, en la que instan al Gobierno togol¨¦s as¨ª como a los parlamentarios a obrar en favor de reformas institucionales y constitucionales que limiten el mandato del presidente a s¨®lo dos. Esta campa?a ciudadana, en la que no participa ning¨²n partido pol¨ªtico, tuvo mucho ¨¦xito y apoyos en sus principios, sobre todo en Twitter, donde se nota cada vez m¨¢s la presencia de j¨®venes africanos y togoleses.

Democracia tecnol¨®gica

A parte de permitir la participaci¨®n ciudadana y la e-democracia, las tecnolog¨ªas facilitan tambi¨¦n el acceso a la innovaci¨®n a pesar de que en un pa¨ªs como Togo, surgen m¨¢s bien de la iniciativa personal de la poblaci¨®n que de los pol¨ªticos o el Gobierno. As¨ª, en Djidjol¨¦, uno de los barrios m¨¢s populares de Lom¨¦, la capital togolesa, existe un proyecto innovador fundado por Sename Kodjo Agbodjiinou, un arquitecto con formaci¨®n en antropolog¨ªa que se ha convertido desde el a?o 2012 en el pionero del tech hub o espacio de innovaci¨®n en el pa¨ªs. Ha creado una verdadera peque?a rep¨²blica digital en las afueras de la capital con W??Lab (que viene de ¡°w??¡± que en lengua Ewe, significa hazlo), un espacio de innovaci¨®n compartido donde cada d¨ªa se elaboran nuevos enfoques de colaboraci¨®n productiva en un contexto africano basado en un concepto que su creador llama #LowHigTech.

La idea de este concepto es poner las altas tecnolog¨ªas al alcance de las poblaciones locales que generalmente no tienen los medios necesarios para acceder a ellas, creando as¨ª puntos de encuentro entre las comunidades y la tecnolog¨ªa. #LowHighTech, es el punto de arranque de un sinf¨ªn de innovaciones posibles que ha dado lugar principalmente a la construcci¨®n de W.Afat, una impresora 3D fabricada a base de residuos electr¨®nicos. W.Afat se ha convertido en el objeto simb¨®lico de la pr¨®xima revoluci¨®n industrial y tiene la ventaja de fabricar objetos a partir de materiales en pl¨¢stico, vidrio y madera u otros materiales.

Cada a?o, este laboratorio acoge y forma a decenas de j¨®venes para sensibilizarles a la cultura digital, el emprendimiento y la cultura del Do it yourself (DIY, "hazlo t¨² mismo") un punto de encuentro entre bricolaje y tecnolog¨ªa punta para intentar encontrar una soluci¨®n a los problemas cotidianos de los africanos. As¨ª han nacido programas como el HubCit¨¦ cuyo objetivo es reflexionar sobre la creaci¨®n de un modelo de smart city (ciudad inteligente) africana, una ciudad adaptada a la realidad del continente, desarrollada en torno a eventos y lugares abiertos de innovaci¨®n. Esta iniciativa que su fundador define como una "utop¨ªa urbana" ha impulsado su primer espacio de democracia tecnol¨®gica y se ha transformado en dispositivo social, jugando as¨ª un papel en la creaci¨®n del embri¨®n de un escenario tecnol¨®gico local donde emergen proyectos y eventos originales como la #SiliconVilla de creaci¨®n de empresas o el iniciador de programa RepLab de peque?os talleres de proximidad.

En un pa¨ªs donde no existe la cultura del emprendimiento ni del start-up y que est¨¢ m¨¢s atrasado que Senegal o Costa de Marfil en lo que se refiere a lo digital y el acceso a internet, este proyecto financiado por fondos propios lleva casi cuatro a?os trabajando para hacer emerger un verdadero ecosistema que sirva de catalizador para un escenario tecnol¨®gico. En plena era digital, Togo sigue siendo uno de los pa¨ªses m¨¢s atrasados del continente a todos los niveles, y donde todav¨ªa las telecomunicaciones no est¨¢n liberalizadas y los precios est¨¢n por las nubes, limitando as¨ª el acceso a unos pocos privilegiados o pudientes. Aun as¨ª, en un entorno tan hostil incluso para la vida humana, y donde es dif¨ªcil disponer de luz el¨¦ctrica las 24 horas del d¨ªa, es toda una haza?a que ¨¦sta y otras iniciativas salgan adelante.