?Su hijo le ha dibujado con una cabeza enana? Preoc¨²pese

El d¨ªa del padre es una de esas ocasiones del a?o en las que la casa puede acabar convertida en una pinacoteca. Para los peque?os la festividad comienza semanas antes, con la preparaci¨®n de las obras de arte expresamente creadas para agasajar a su progenitor y en las que manifestar¨¢n una serie de mensajes susceptibles de interpretaci¨®n. Pero ¨Cm¨¢s de uno se formular¨¢ esta pregunta en su fuero interno¨C, ?queremos llegar tan lejos? ?Nos conviene realmente comprender esos dibujos?

Con este fin, en psicolog¨ªa trabajan con test proyectivos, pruebas dedicadas al an¨¢lisis del subconsciente de un individuo en funci¨®n de su interpretaci¨®n de los est¨ªmulos (dibujos, manchas de tinta...), que dan pistas para entender el car¨¢cter introvertido de nuestro hijo, el porqu¨¦ de sus comportamientos agresivos (si los tiene) o incluso la detecci¨®n de anomal¨ªas en el desarrollo. A la hora de analizar las pinturas que realizan los peque?os, se eval¨²an distintas cuestiones, dependiendo, por ejemplo, de si el ni?o ha retratado o no a sus personajes con ojos y boca, o si la casa que ha pintado tiene ventanas y chimenea; o de en qu¨¦ parte del folio ha centrado su dibujo.?

Estas pruebas se basan en datos estad¨ªsticos que recogen la probabilidad y la frecuencia con la que aparecen elementos t¨ªpicos en las distintas edades, pero no pueden realizarse sin cierta cautela. Como dijeron en 1962, haciendo con ello historia, los psic¨®logos e investigadores Sudberg y Tayler: ¡°Las pruebas son herramientas. En las manos de un tonto o de una persona sin escr¨²pulos se volver¨¢n una perversi¨®n pseudocient¨ªfica¡±.

En una cl¨ªnica, estos presentes infantiles pierden toda la inocencia para pasar a ser pruebas rigurosas, "someti¨¦ndolos a unas normas propias para su estandarizaci¨®n", explica Virginia Yera Bergua, psic¨®loga cl¨ªnica especialista en psicodiagn¨®stico y docente de t¨¦cnicas proyectivas en El Colegio Oficial de Psic¨®logos. ¡°Los test se aplican en consulta y en presencia del psic¨®logo. Analizamos el gr¨¢fico adentr¨¢ndonos en el mundo interno del sujeto y descifrando las manifestaciones de su inconsciente¡±, asevera.

En casa y en el colegio, ¡°el ni?o dibuja porque le apetece y porque le gusta; adem¨¢s de porque aprende y obtiene placer al controlar su motricidad¡±, enuncia la experta. A la mayor¨ªa de los ni?os les encanta jugar con los l¨¢pices, para ellos es una tarea l¨²dica, divertida, placentera e incluso relajante. La psic¨®loga asegura que sus ilustraciones son una forma de expresi¨®n mucho m¨¢s potente que el lenguaje: ¡°Con el dibujo pueden expresar lo que con la palabra no son capaces: su personalidad, su nivel intelectual y c¨®mo se relacionan con los dem¨¢s¡±.

Yera Bergua da las pistas para un primer acercamiento a los dibujos que los ni?os hoy regalan a sus padres:

• Son creaciones que expresan y comunican, pero nunca m¨¢s all¨¢ de la edad cronol¨®gica y madurez del cr¨ªo.
• Al ni?o lo que le interesa es que el objeto pintado sea reconocido: un sol de color rosa no es un desaf¨ªo, sino un reflejo de c¨®mo en el momento de la creaci¨®n al peque?o artista le parece que es el sol.
• En edades tempranas aplican el surrealismo de forma natural. Entre los 4 y los 11 a?os, dibujan en un ¨²nico plano y como si fuera un sue?o: todo es posible y el tiempo es simult¨¢neo.
• No podemos decir que su orientaci¨®n espacial sea incorrecta. No nos asustemos si el ni?o ha dibujado la cabeza donde deber¨ªan ir los pies, ya que cuando son peque?os no respetan la perspectiva ni la realidad objetiva.
• Si no entendemos el dibujo, pregunt¨¦mosle al autor. Nos interesar¨¢ saber tambi¨¦n qui¨¦n es qui¨¦n, qu¨¦ est¨¢n haciendo y por qu¨¦ lo ha dibujado.
• Los dibujos reflejan los sentimientos de su hijo y de ah¨ª vienen las diferencias a veces tan acusadas en el tama?o. Las exageraciones representan la importancia que da el cr¨ªo a determinado rasgo. Algo grande es algo querido, por lo que si su v¨¢stago le ha dibujado una cabeza descomunal, sonr¨ªa. Y tampoco se preocupe si pinta en las barrigas de la familia granos de arroz, como hizo Mateo, de 7 a?os: solo significa que la paella es su comida favorita.

?Cu¨¢ndo hay que preocuparse?

Mar¨ªa Luisa Ferrer¨®n, psic¨®loga infantil y autora de varios libros de educaci¨®n destinados a padres, encuentra que los dibujos aportan gran informaci¨®n y constituyen una oportunidad para la detecci¨®n de signos de alarma. En su libro?Abr¨¢zame, mam¨¢ (Planeta, 2007), da las pautas para la interpretaci¨®n de los grafismos infantiles, y encuentra algunos signos comunes de irregularidades en el ¨¢mbito emocional del ni?o.

Seg¨²n la autora, un comportamiento es an¨®malo si, por ejemplo, ¡°pinta tan fuerte que llega a romper la hoja, tacha sus propios dibujos, o solo usa colores como el rojo y el negro¡±. Puede que exista conflicto con otras personas si "dibuja una familia sin incluirse ¨¦l mismo, indicando que se siente fuera, o si elimina a alguna de las figuras integrantes. El dibujo de la familia representa la ubicaci¨®n y el v¨ªnculo que tiene con los distintos miembros". Fij¨¢ndonos en ellos conseguiremos mucha informaci¨®n, seg¨²n declara la experta: ¡°Si uno no tiene boca podr¨ªa simbolizar una falta de comunicaci¨®n con esa persona, al igual que la ausencia de manos hablar¨ªa de falta de contacto f¨ªsico¡±.

El test de la familia es un cl¨¢sico en la consulta del psic¨®logo y se interpreta en conjunto con la prueba HTP, siglas que obedecen a las palabras en ingl¨¦s House, Tree, Person (casa, ¨¢rbol y persona), creado por el psic¨®logo cl¨ªnico J.N. Buck. En todos ellos importar¨¢n el tama?o y la ubicaci¨®n en el espacio del papel, as¨ª como el nivel de detalles expresado, seg¨²n indica Ferrer¨®n: ¡°Debe alertarnos un tama?o excesivamente peque?o de las figuras porque puede ser indicativo de una baja autoestima, aunque un tama?o excesivo tambi¨¦n implicar¨ªa una presencia excesiva y que anula todo lo dem¨¢s¡±.

¡°El dibujo es el intermediario entre la imagen mental y el juego. Y el que hace un ni?o variar¨¢ mucho seg¨²n su estado an¨ªmico, por lo que podr¨¢ ser un dibujo con muchos detalles, flores, corazones y mensajes de amor, pero tambi¨¦n, otro d¨ªa, carecer de colores y prolijidad, una muestra de su desmotivaci¨®n¡±, cuenta?la grafoterapeuta Claudia D¨ªaz Vittar. La especialista advierte de que ¡°estos elementos se deben analizar en conjunto: no significa que la interpretaci¨®n sea siempre igual¡±. Lo mismo sucede con los colores, que se interpretar¨¢n seg¨²n el contexto, aclara Yera: ¡°No hay normas preestablecidas: un precioso coraz¨®n rojo entre dos personas de la mano, puede significar amor y cari?o. El uso de este mismo color, junto con el negro, en otro contexto, podr¨ªa simbolizar lo contrario¡±.